Justo después de un mes y medio de aquel incidente en casa de mi tío, por fin, lograron apresarlo y llevarlo a juicio por todos los delitos que cometió, sus cargos fueron infinitos, así como su condena. No podía decir si me encontraba feliz o triste por él, después de todo era mi tío, lo cual ocasionaba en mi muchos sentimientos encontrados.
Me levanté y me vestí con la ropa más seria que tenía, arreglé mi cabello, el cual era un poco más corto que antes y tomé las llaves que Emma me había dado. Dante había partido a hacer un par de entregas, pero yo tenía otras cosas que hacer.
Subí aquellas escaleras lentamente y le pedí al oficial que me llevara hasta ahí. Quería ver al tío Giuseppe por última vez. El policía me dejó en una sala de espera; ya que era entre semana no había personas ahí, otro oficial acompañaba a mi tío por la puerta de los reclusos y lo sentó frente a mi.
- ¿A qué has venido? - preguntó, un poco grosero y de mal humor.
- Vine a despedirme - contesté con seriedad - no voy a volver a verlo nunca más y creo que, hay cosas importantes que quiero decir - el tío frunció en ceño y con desdén se inclinó en su silla.
- ¿Vienes a burlarte de mi? - negué - realmente no te entiendo, no deberías de venir a ver a la persona que más te dañó ¿acaso no piensas por tí mismo? - parpadeé un par de veces, sin saber qué responder.
- Sólo vine a darle las gracias - sus ojos se encogieron notoriamente y me miró molesto.
- ¡Gracias! ¿De qué? Al final, sí que viniste a burlarte de mí ¿no? - de nuevo negué.
- Sólo es que... quiero pensar que, si todo lo que sucedió, jamás hubiese pasado, yo no sería capaz de apreciar la felicidad que tengo en mis manos hoy en día, no sería capaz de saber cuan afortunado soy, de tener a mi lado personas que me quieren y me valoran, sólo quería decir gracias - me detuve un momento y lo vi hervir en cólera, no era que me gustara hacerlo, pero estas palabras tenía que sacarlas desde lo más profundo de mi ser.
- Tu, pequeño mocoso del demonio - murmuró por lo bajo.
- Pienso, que si el tío no me hubiese acogido bajo su techo, hoy en día no tendría la oportunidad de algo tan bueno, probablemente hubiese terminado vagando por las calles, sin nada que comer o qué vestir, es por ello que por muy mal que lo haya pasado no puedo sentirme completamente desdichado, lamento si te molesté con mi visita, me voy ahora - me levanté y me dispuse a levantarme, la expresión en el rostro del tío era una combinación entre el enojo y la tristeza.
- Sólo vete de una vez - dijo y salí de ahí, sintiendo que me quitaba un gran peso de encima.
Durante días, lo había discutido con Emma, ella dijo que si era lo que quería hacer, estaba bien, que después de todo él ya no era capaz de dañarme y que tenía que ponerle un punto final a toda esa historia, antes de volver a empezar. Nunca entendí al tío, a veces él se sentaba conmigo a hablar de mamá y de los años que vivieron como hermanos, solía ser amable conmigo, aunque cuando se molestaba, solía gritar y dar golpes. Sin embargo a mi nunca me tocó un pelo.
Era dificil decidir si era bueno o no, o si me tenía algún tipo de afecto, en el fondo me gusta pensar que si, ya que el primer día que estuve con él, en su casa, me había dejado dormir a su lado y me había contado historias de mamá, para que me sintiera mejor.
Pero no todo se resumía a lo que sentía por mi tío y las cosas que tenía por decirle, había algo más que tenía que hacer antes de volver a casa ese día. Tomé el autobús por primera vez y partí en dirección al cementerio.
Cuando era un niño, nadie fue capaz de explicarme la repentina desaparición de mi madre, mucho menos pudieron explicarme sobre la muerte, mi tío solía evitar ese tema, además, pasé el resto de aquellos años, aislado y mi vida se basó en trámites administrativos y un reacomodo fallido.
Desde que supe que no sería capaz de ver a mi madre nunca más, quise poder tener la oportunidad de despedirme, pero nunca pude hacerlo, así como tampoco podía visitar su tumba. Gracias al tío Evan, me enteré que ella y mi padre se encontraban en la misma, juntos, como lo estuvieron en vida.
Me dió las indicaciones para poder ir, así que decidí que la primera vez, sería por mi cuenta, creí que si me acompañaba alguien no sería capaz de decir todo lo que tenía que decir, quería que mi madre escuchara lo que había en mi corazón también.
Pasé por los alrededores de las tumbas, buscando la de la familia D'Angelis, lo cual no fue dificil, la tumba era tan grande y tan vistosa que resaltaba del resto; pude verla a algunas calles de distancia.
Me acerqué lentamente, sintiendo el ritmo de mi corazón aumentar con cada paso, cuando estuve al frente, pude ver el enorme mausoleo, imponía con su tamaño y arquitectura, tenía una puerta de cristal muy gruesa y estaba protegida por barrotes de acero, me asomé un poco entre ellos y pude ver algunos nombres, junto a ellos, estaban sus respectivas fotos.
Mi madre y mi padre tenían una, ellos dos, abrazados y sonrientes, al verla mis ojos se llenaron de lágrimas y no pude evitar el llanto, lloré muy fuerte, como no me había decidido a llorar en algún tiempo, lloré por que la extrañaba, por que quería que volviera y me abrazara una última vez, quería a mi madre más que a nada en el mundo.
Una vez que pude dejar de llorar, comencé a hablarle, le pedí perdón por no haber ido en tantos años y hablé sobre todo lo que había sucedido hasta ese momento, le hablé de Dante, de Emma y de Marie y le dije que eran personas increíbles y buenas, que me cuidarían mucho de ahora en adelante.
Salí de aquel cementerio con un gran vacío dentro de mí, quería volver a casa cuanto antes y recostarme en los brazos de Dante, quería sentir un poco de calor a mi alrededor, por lo que me apresuré lo más que pude en volver. Ese día, dejé todo el pasado atrás, a partir de ahí me enfocaría en alcanzar mi felicidad. Ese día, volví a empezar, lejos de la tristeza y la soledad que me abrumaron alguna vez, intentando confiar en las personas que estaban cuidando de mi.
~~~ Este es el fin de la historia.
Hola! Espero que hayas disfrutado la historia hasta aquí, ha sido una aventura increíble el escribirla y espero que lo haya sido el leerla.
Aunque es el final, aún tengo unos cuantos capítulos extras por publicar, por favor no se impacienten, aún falta el mejor capítulo y saben a lo que me refiero!
Espero lo disfruten. Muchas gracias por haber llegado hasta aquí, me haces muy feliz y me harás aún más si me regalas un comentario, contando qué te pareció, me ayudaría mucho a crecer.
Hasta pronto! Nos vemos en una nueva historia!!~~~
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Quédate a mi lado
Ficção AdolescenteYo, no estoy muy seguro de cómo fue que llegué hasta aquí, pero no parece ser un mal lugar, después de escapar del infierno, cualquier lugar estaba bien, pero nunca creí llegar al cielo, con gente que me quisiera y me protegiera de la manera en la q...