Mamá había sido bueno conmigo, a pesar de que veía los constantes maltratos de mi padre hacia mí y no hacía nada no podía juzgarla, a pesar de su silencio, trataba de comprenderla y de entender su dolor y su supuesto amor, lo aguante y sabía que ella me amaba mucho, aunque me lo puso en duda varias veces, haciéndome sentir como una basura miles de veces, sintiendo que mi padre era su prioridad, no podía canalizar mi era incontables veces y terminaba golpeando a muchos, sin pudor, convirtiéndome en una versión más débil de mi padre, sin poder abrir mis ojos y creer que solo estaba defendiéndome y cerrándoles las bocas cuando hablaban mierdas de mi familia.
Y deje de creer, me olvidé de la idea de que podríamos salir del enfermo de mi padre, me sumí en el pensamiento de que siempre íbamos a sufrir, de que mi madre continuaría apegada a él, siendo una esclava, sin juicio ni palabra en el hogar, siendo su saco de boxeo porque ella junto a mí éramos las personas con las cuales se desquitaba, drogas y alcohol, esos problemas los arrastraba a casa.
Cuando pensé que era momento de acabar con todo (porque hasta pensé en suicidarme), llegó una luz, dándome esa fortaleza que necesitaba, aconsejándome, mostrándome y enseñándome lo que era el autocontrol, escuchando mi historia y errores, también aconsejándome, esa luz se volvió todo lo que necesitaba.
Dejó de ser mi soporte, empecé a amar aquella luz, a ver su belleza y me enamoré hasta del más pequeño detalle, de sus virtudes, de lo que se consideraba debilidades y cada día logró robarme mi corazón, esa luz era Misuk, hermosa por dentro y por fuera, calmada y tranquila, la amaba mucho, ella era una de mis razones.
-No sé por qué te ofreciste como testigo. – le dije tomando aquella taza de café, mientras ella sonreía, en unas horas sería el juicio donde le dictarían la condena a mi padre.
Todos nos estábamos preparando para este día, mentalmente, sabiendo que podría llegar a ser desesperante, aterrador, lleno de subidas y bajadas. Sabía que para mamá iba a ser más que difícil, ya que tendría que verle la cara una vez más y en realidad sentía que ella no quería hacerlo.
-Quiero ayudarlos. – contestó dándole un mordisco a una rebanada de pan con mermelada, para luego sonreír. – Quiero hacerlo, por ti y tu mamá, también siento que no he hecho nada para ayudarlos. – tomé su mano libre y entrelacé nuestros dedos.
-Ayudaste más de lo que deberías, has estado ayudando a mi mamá, hablando con ella, sobre sus sentimientos y dándole consejos, me has reconfortado, me has abrazado, te has desvelado conmigo, me das recomendaciones, estás ayudando mucho, gracias, enserio. – ella se acercó a mí y me robó un corto pero placentero beso.
-Eres demasiado lindo, JeongIn. – y tomó mis mejillas y las estrujo. – Además te ves muy guapo. – guiñó, y me hizo sentir un tanto apenado, haciendo que soltará una sonrisa nerviosa y que cubriera mi cara con una de mis manos. Para esta ocasión debía vestirme formal.
-Gracias. – hablé aún cubriendo mi cara, cosa que no duró mucho porque apartó mis manos.
- ¿Te han dicho que te ves bonito sonrojado? – y me volvió a besar, sus labios eran dulces y me encantaban, el beso fue tan dulce. Al terminarlo, me dio otro y otro, hasta cansarse y bueno yo no me quejaba, porque en realidad me encantaba.
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-Solicitamos que la señorita Misuk venga al estrado. - media hora en el juicio, todos estábamos muy tensos. Desde que vi a mi padre, la repugnancia se desató en mi ser, él se veía con su conciencia tranquila, como sí no hubiese hecho nada, como sí todo estaba bien, lo detestaba.
Misuk caminó con seguridad, pero pude ver que ella a pasar me observó de reojo y levantó sus comisuras "vamos bien, tranquilo" sentía como sí eso era lo que quería decirme.
- ¿Alguna vez el hijo de mi cliente le habló sobre el supuesto maltrato de parte de su padre? – ya habían enseñado algunas evidencias fuertes, más el testimonio anónimo de varias personas, pero el abogado insistía que era inocente, ya que mi papá se declaró de esa manera.
-Sí lo hizo. - respondió tranquila y corta.
- ¿Y qué le dijo sobre eso? – ella movió su mano sobre el podio y me miró, luego miró a otro punto.
- Me contó algunas cosas, que su padre lo golpeaba a él y a su madre, que estaba en un lugar donde no se sentía feliz, no se sentía seguro, pero sí estaba ahí era para estar con su madre. – siempre tan relajada, me encantaba esa característica.
- ¿Y por qué se fue a vivir con usted? – ella pestañeo varias veces, creía que nadie sabía de ese lugar que viví con ella por un tiempo y que dejé de hacerlo hace dos semanas.
-Se fue por un inconveniente. – contestó mirando al otro fijamente.
- ¿Cuál inconveniente? – y seguía indagando.
- Bueno, él regresó de la escuela y encontró a su padre teniendo relaciones sexuales con otra mujer, JeongIn decidió enfrentarlo y ambos pelearon, su mamá llegó a desarmar la pelea y el señor Yang la hizo elegir, ella le dio dinero a JeongIn para que fuera un lugar decente, hasta encontrar la forma de que volviera a casa, yo era y soy la confidente de JeongIn. – siguió expresándose: - Sí tenía un problema, me lo contaba a mí y yo lo aconsejaba, ese día cure todas sus heridas y le invite a quedarse a mí casa, no quería que deambulara por las calles con el peligro, hasta encontrar un lugar. – mi mamá sonrió y observé a mi papá lejos, estaba tenso.
- Muy dulce señorita, pero le haré otras preguntas, ¿Está segura de que el chiquillo no le mintió?, ¿Por qué no llevó al caso a las autoridades en algún momento?
-Confío en él y su palabra, lo vi muchas veces golpeado. Y no lo denuncié porque lo sugerí y el dijo que no aún, quería que su mamá abriera los ojos y que fuera capaz de testificar contra su padre, porque sí no lo hacía lo liberarían a él, ellos debían estar de acuerdo en hacerlo, sí no, esto no tendría sentido. – ella se retiró, era turno de nuestro abogado.
-Solicito al señor Yang en el estrado. – se levantó y caminó hacia él y luego se sentó. Teníamos un buen abogado.
- ¿Podría decirnos como era la actitud de su esposa? – y tiró mi padre su cabello hacia atrás.
-No es una mala mujer, pero es demasiado débil, no hacía las cosas muy bien, pero aún así, la ame, la amo más que a nadie en este mundo. – era un mentiroso, creo que la única persona que se tragaba sus mentiras era el mismo.
- ¿Y sí tanto la amaba por qué razón la golpeaba? - atacó de inmediato.
-A mi esposa siempre le gusto el sadomasoquismo, solo fue sacado de contexto. – cuanta hipocresía en una persona, suspire, nadie podía creerle.
-Y la llevo al hospital, casi la mata. Además, les pegaba a sus hijos, tal y como testificaron ¿por qué razón?
-Se lo ganaron. – contesto simple, y me alegre porque sabía que con esa simple oración la había cagado una vez más.
Después de todos los testimonios y de deliberar era el gran momento, el juez daría el veredicto, respiré profundo.
-Después de deliberar se ha decidido que Yang Jeonji, cumpla una condena de seis años, por consumo frecuente de sustancias ilícitos, violencia intrafamiliar, concedo el divorcio y una orden de alejamiento hacia sus hijos y su antigua esposa. – celebré internamente y abracé a mamá. – Pueden llevárselo.
Todos fuimos a comer algo, me había pasado abrazado a mí novio, ya podía tomar un respiro y vivir sin complicaciones.
...
Los finales no siempre son complicados y espero que no me odien.
Los amo mucho, pero no me pidan que no me actualice, es lindo, pero a veces no puedo y me desespero por no hacerlo.
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Dulce y Lindo pecado ➳ Yang JeongIn
Fanfic"Ella no quería aceptar que se estaba enamorando de un dongsaeng" "El haría lo que sea para que ella estuviera con él" -El es un niño comparado conmigo, le falta muchísimo por vivir, yo no puedo robarle la juventud, debe conocer niñas de su edad y...