Narra Tom:
- ¿Serenata?- sugiere Jay mordiendo su rebanada de pizza como de costumbre.
- Muy usado- niega Harrison enseguida- ¿Cuantas rebanadas llevas?
- Cuatro solamente- Jay se pone a la defensiva- Ese no es el punto, necesitamos ideas.
Tal vez ellos no eran los indicados para decirme como decirselo, llevamos dos horas sentados pensando en la mejor forma de hacerlo y aún no tengo la más remota idea.
Estoy estresado. ¿Cómo se supone que se lo diré sin quedar como idiota frente a ella? Siempre me veo así cuando estoy al lado suyo, es como si todo lo demás desapareciera y solo estuvieramos ella y yo, ella sonriendome y contandome alguna cosa interesante y yo oyendo todo lo que tenga que decirme, pero al momento de confesarle lo que siento- lo que realmente siento- me detengo y me quedo paralizado, me cuesta decirselo, admiro a Jay, que aunque lo rechazaron le dijo todo, o a Harrison que organizo algo grande cuando estaba enamorado de una chica hace unos años, yo no tengo ninguna de las dos cualidades.
- No te angusties, Tom, lo harás bien, además ella dijo que te diría que sí- Harrison pone una mano sobre mi hombro- De todas maneras aqui estamos para lo que necesites.
- Quiero hacerlo bien, Harrison- paso una mano por mi cabello- Quiero decirle lo que no le pude decir, pero no se como hacerlo. ¡No tengo idea!
- Madre de dios- dice Jay totalmente asombrado- Tom Holland esta en crisis.
Narra Hayle:
Mi mamá y yo estabamos viendo una pelicula de Disney, estoy aburrida, pero estoy comiendo helado con un cobertor de tigres así que supongo que esta bien. Tomo otra palomita (o muchas) y el plato ya esta completamente vacio. Tocan el timbre de la puerta y trato de evitar a mi mamá a toda costa.
- Hayle, abre.
- ¿Qué?
- Tocan la puerta- me dice- te toca abrir. No seas floja.
- No tocaron- miento, quien sea que toque puede esperarse afuera.
- Eres floja, ¿lo sabias?- dice mi mamá.
Sé que por dentro me quiere arrojar una chancla, pero como esta de buen humor solamente me aprieta el cachete para después levantarse a abrir. Volteo a ver quien es, y me encuentro a Tom, lo observo de arriba a abajo, tiene una pinta formal, una sonrisa adorable, unas flores en su mano y unos chocolates en la otra.
Dios mio.
Mi mamá fija su vista en mi con una sonrisa oculta, yo estoy completamente paralizada con miles de preguntas, estoy segura de lo que va a hacer, solo espero que no lo haga ¡frente a mi mamá! Aguanto la respiración.
- Hola, señora. Soy Tom Holland, un gusto- extiende su mano sosteniendo los chocolates con la otra y mi mamá la estrecha- Quisiera hablar con su hija.
Espero que no saque un anillo de diamantes de su bolsillo porque me desmayaria.
- Si- se mueve a todos lados- Estabamos viendo una pelicula... Pero recorde que tengo que irme al super...- toma su bolso y me tapo la cara con la mano- No hagan algo malo...
- ¡Mamá!
- Si, confío en ti, perdón. Ya me voy- la observó con desesperación, si se queda un segundo más tendre que irme corriendo- Adios.
Sale por la puerta y la cierra detrás de ella, cierro mis ojos, si los abro estará Tom riendose, cosa que no esta mal pero no quiero sentir la vergüenza de lo que acaba de pasar. Necesito concentrarme en la situación. Tom estaba en mi casa. Entró por la puerta. Tiene unas rosas y unos chocolates. Quiere hablar conmigo. ¡Madre santa! ¡Creo que tengo que ir al baño! ¡O a vomitar! ¡Dios ayudame! ¡Ah!
- Hayle- me llama la voz conocida.
Vamos, Hayle. Tu puedes, eres más fuerte que esto. Abro los ojos poco a poco, Tom me está viendo como si fuera una loca, tiene una sonrisa y me esta mirando de una manera que hace que quiera correr. Rio nerviosa.
- Perdón, mi mamá no esta acostumbrada a esto.
- Deberías ver a la mía- sugiere Tom con gracia- La última vez que Jay fue a mi casa pensó que yo era gay.
Se ríe, me levanto del sillon y me pongo mis pantuflas, estoy en pijama, tal vez debí haberme preparado aunque no tenía idea de que esto iba a pasar.
- ¿Has visto esa pelicula?- pregunto para romper el silencio asesino.
- Miles de veces. Quería hablarte de algo...
Pasa la mano repetidas veces por su cabello nerviosamente, asiento para que continue, el mira a todos lados y muerde su labio, esta más que nervioso, no sabía que podía ponerse así. Juego con mis dedos esperando a que hable. Siento mis mejillas arder y no puedo creer que esto este pasando.
- Harrison me dijo que debía de hacer, pero ya se me olvidó. Mierda. Bueno- respira y exhala- De verdad estoy nervioso, Hayle. Jay dijo que debía de imaginarme a la gente desnuda para que el miedo se me quitará pero no quiero pensarlo contigo- no puedo evitar reirme y el se ríe también.
- No lo imagines. Sería humillante- agrego.
- Así que. ¡Vamos Tom, no seas cobarde!- se habla para el mismo en susurros. Se ve malditamente adorable, se digna a mirarme, podría aventarme a el pero quiero esperar a lo que dirá- Bueno, eres la chica más maravillosa que he conocido, nunca he conocido a alguien tan divertida, alegre, tierna y valiente como tu. Eres genial, me encanta pasar el tiempo contigo, si fuera por mi pasaría el resto de mi vida a tu lado.
Me quedo sin poder respirar. De verdad, ¿cómo se hacía?
- Es facil pensar lo que te dire cuando estoy solo, porque pienso siempre en ti, es sencillo pensar cosas de ti, como que tu sonrisa es hermosa y que haría lo que fuera para que lo hicieras más seguido o las demás cosas que me gustan de ti. Que son muchas, debo agregar- me entrega las flores y los chocolates, su cara algo roja le da un muy tierno aspecto y los acepto- Pero cuando estoy frente a ti no sé que decir. Te lo juro. Estoy sin palabras, Jay me mataría si estuviera aquí.
Le sonrío. Mentiría si digo que no me voy a desmayar aquí y ahora. Siento mi boca seca y no puedo decir ni una silaba.
- Sé mi novia.
Me mira decidido, o por lo menos tratando de soportarme la mirada. Creo que voy a morir. No puedo creer que esto sea verdad, esto es tan irreal. Abro la boca para contestar, quiero decirle "claro que si" o "¡si!" pero sólo sale un "¿mmh?" y el ríe ante mi actitud.
- Sé mi novia, Hayle. Prometo que no te voy a decepcionar.
Se queda plantado en su lugar y me obligo a reaccionar, a moverme, a decir algo, es como si estuviera paralizada, estoy en shock. Asiento repetidas veces, dejó las cosas recargadas en el sillón y corro a abrazarlo con fuerza, me recibe el abrazo y me aprieta contra él. Besa mi frente y yo me quedo en ese lugar.
¿Esto es querer llorar de felicidad? Tom y yo estamos juntos. Por fin. A pesar de las cosas que pudieron haber pasado.
Me alejo para mirar sus ojos que sorpresivamente me estan viendo también. Junta mis labios con los suyos pero esta vez es diferente.
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¡¡Llorare de felicidaaaadd!!!
¿Cómo se sienten? Yo estoy saltando en mi camaaa.
Ya estan juntos por fiiin.
#Tayle ❤❤❤Les dejo su capítulo. Espero actualizar pronto ❤
Los amooooo 💕
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El Chico De La Ventana | Tom Holland | SIN EDITAR
FanfictionTom Holland o el intruso que entro en mi casa por la ventana, que luego se convirtió en algo mucho más. ~ ~ ~ *No ha sido editada por lo que puede tener errores* - Si quieres adaptarla, puedes mandarme un mensaje por privado.