Capitulo 27

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-¿Por qué ese abrazo tan emotivo?-Aurelio entra por completo a la habitación y cierra la puerta detrás de el.

-Lo siento, señor. -Geryel agacha la cabeza. Se siente avergonzado por lo que acaba de suceder, tan inoportuno.

-Le estaba agradeciendo todas esas veces que me a salvado. Siempre le estaré agradecida. -Le doy una pequeña sonrisa a Aurelio por que se perfectamente que el esta igual de agradecido con el.

-Yo también. Siempre estaré en deuda contigo Geryel. -Aurelio pone su mano sobre el hombro de Geryel. El levanta su cabeza y una pequeña sonrisa aparece en su rostro, dejando atrás la culpa que se veía segundos atrás en su mirada.

-Gracias señor...

Entre todos ayudamos a hacer la maleta y acomodar toda la ropa que compramos. Cuando terminamos Geryel se lleva su maleta ya lista con todo lo nuevo.

Aurelio y yo nos quedamos solos.

-¿Como te fue?-Me siento sobre la cama para descansar un poco de estos tacones tan altos.

Si que molestan.

-Todo fue bien. Estuvimos más tiempo del que pensaba ya que teníamos distintos puntos de vistas y todos debíamos estar de acuerdo para lograr el objetivo.

-Es normal que todos tengamos diferentes puntos de vista y es difícil ponerse de acuerdo del todo. Así como nosotros.-Lo señalo a el y luego a mi.

-¿Así como nosotros?-El se sienta justo a mi y se quita su saco dejandolo en la cama.

-Claro. Muchas veces no estamos de acuerdo con algo y tenemos enfrentamientos por eso. Pero... Siempre intentamos llegar a un acuerdo.

-Menciona una de nuestras diferencias.- Su curiosidad se asoma en sus ojos. Puedo ver que quiere jugar conmigo.

-Por ejemplo, cuando no me dejas salir con un traje hermoso.- Levanto una de mis cejas y lo acuso con la mirada.

-Hasta donde yo se el traje es hermoso, pero solo para que yo lo vea, no para que todos los hombres morbosos de una fiesta te desnuden con la mirada.-Todas las palabras salen con fluidez de su boca, como si ya hubiese pensado antes en la respuesta que me daría si le hacia esa acusación.

-Eres un exagerado.-Me rio muy fuerte mientras recuerdo esos días que lo eh molestado con trajes que dejan poco a la vista.

Pero se lo merecía.

-Por esta razón no te dejaré escoger el traje de mañana.- Su cara en estos momentos es muy similar a cuando ganas un juego de Xbox o PlayStation.

Le ganas al enemigo y te sientes más que feliz. Esa es justamente su expresión, la de un ganador.

-¿Mañana?

-Si. Asistiremos a una fiesta ya que tenemos una nueva asociación.

-¿Y dices que escogeras mi vestido?-Me levanto de un salto y me colocó frente a él mientras el sonrie con malicia.

No quiere que vuelva a hacer lo mismo otra vez. Ya esta cansado de perseguirme y cubrirme cuando tengo un traje muy revelador.

-Claro. No permitiré que vuelva a ocurrir lo mismo de las veces anteriores.-Dijo exactamente lo que había pensado.

-Quiero escoger mi vestido.-Hago un puchero muy similar al de un bebé. Cruzo mis manos por debajo de mi pecho.

-Eres una niña pequeña.-Me riñe.

-¿Tú crees?- Arqueo una de mis cejas y saco mi lengua.

-Yo creo que si.-El ríe y yo no aguanto más la risa. Explotó a carcajadas.

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⏰ Última actualización: Apr 28, 2020 ⏰

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