Salgo de la cocina luego de beber un poco de agua. No hay nadie en la sala y no se escuchan murmullos. En silencio subo a mi cuarto, cuando llego me acuesto en la cama.
¿De qué estaban hablando Aurelio y Mariel? La curiosidad me esta matando. Odio no poder hacer mis propias conclusiones aveces. Intento pensar de que podrian estar hablando pero es tan dificil, quizás se estaban diciendo lo mucho que se amaban y esas cosas.
Pero lo raro es que Aurelio no me miro a los ojos, y aunque lo intente evadir me di cuenta de que no me miraba, cuando siempre lo a hecho para intimidarme. Y en esta ocación fue lo contrario.
Tomo un libro de la mesita y continuó leyendo, quizás así distraigo mi mente. Este libro es un clásico "La bella y la Bestia" me identificó con esta historia, yo no soy la bella pero él sí es la bestia.
Si mi mamá tan solo estuviera aquí, nada de esto estuviese pasando, ella nunca lo permitiría, ella si me amaba.
(------------)
Era sábado, los dias aquí eran eternos. Me levanto y me dirijo al baño hacer mis necesidades y busco ropa deportiva. Dicen que el dolor se cura con un poco de ejercicio.
Miro mi reflejo en el espejo con un moño me hago una coleta. Tengo los ojos hinchados, una sombra oscura se encuentra debajo de mis ojos, no e dormido bien. Tomo un poco de polvo y cubro un poco las imperfecciones.
Salgo de mi cuarto y cuando voy a bajar las escaleras me encuentro con Mariel quién tiene una maleta roja en sus manos. Una sonrisa aparece en mis labios, Aurelio tomo cartas en el asunto.
—Ni pienses que esto se quedará así. Aurelio siempre será mío, nunca se podrá enamorar de alguién más que no sea yo.— Yo asiento con mi cabeza y continuó caminando, ella me toma del brazo, esto me esta cabreando.
—¿Qué carajos quieres?
Narra Aurelio
Estoy en la cocina esperando que Lilith baje, tengo que hablar con ella. Pedirle disculpas. Lo que hice no estuvo bien y estoy consciente de ello. Cuando vi las cámaras de seguridad me quede perplejo al ver como una mujer puede llegar a tanto con una mentira. Mariel tomaba un objeto contundente y se daba golpes con el mismo, provocandoce daño. Pero solo se podía apreciar su cara de satisfaccion al hacerlo. La muy tonta pensó que yo no tendría cámaras en mi propia casa.
Por obvias razones la obligue a irse de la casa hoy, fue un error aceptarla aquí.
Aunque para que se fuera tuve que discutir con ella anoche. No fue facil perlo lo hice.
Estoy sentado en la mesa del comedor cuando escucho gritos. Salgo de inmediato y observo la escena de Mariel y Lilith.
—¿Qué carajos quieres? —Nunca había escuchado a Lilith hablar de esa manera. Abro los ojos como plato al escucharla. Ellas no se percatan de mi presencia todavia.
—Si no es para mi tampoco será para ti.
En un abrir y cerrar de ojos Mariel empuja por las escaleras a Lilith quien intenta vagamente sostenerse de algo para no caer, pero la tarea fue imposible. Se golpea con cada escalón por el que cae, lastimando su hermoso cuerpo.
Estoy en shock, nunca pense lo que podria llegar hacer Mariel.
Corro en busca de Lilith, ella tiene múltiples golpes en su cara y en su cuerpo, no la toco para no lastimarla. Sus ojos están cerrados, no los abre. Esto me pone en alerta.
ESTÁS LEYENDO
Solo dime Acepto ©
Roman pour AdolescentsSi te obligan a casarte ¿Puedes llegar amar a esa persona? Como llegar a querer a una persona que no conoces y que te trata de la peor manera. ¿En el encierro puede nacer el amor? Obligarte a casarte con una persona es lo peor que te puede suceder y...