×Capítulo 12×

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Elyas llegó al edificio. En la puerta justo, estaba Arsilex. Ambos se saludaron y subieron a la planta más alta. Todo era muy elegante, muy a conjunto con Arsilex quien llevaba una camisa blanca abotonada y unos cómodos jeans. Había gente andando de un sitio a otro, solo que iban vestidos de forma casual.

-Pensaba que esta empresa la llevaba tu madre- Dijo Elyas.

-Mientras ella siga viva puede hacer los cambios que quiera, pero yo tengo todo tipo de libertad para hacer los negocios que yo quiera y con quien quiera- Contestó Arsilex.

-¿Para qué querías hablar?- Preguntó Elyas. Arsilex le hizo una pequeña sonrisa mientras abría las puertas de su despacho.

Tenía un tamaño considerable y también muy elegante. Elyas se sentó en una de las sillas que estaba enfrente de el escritorio. Arsilex, obviamente, se sentó enfrente de Elyas.

-Me gustaría hacer un pequeño negocio contigo. Más que negocio, me gustaría que me hicieras un pequeño favor- Elyas le miró ansioso- Como sabes, esta empresa se dedica a ayudar a niños huérfanos a tener una familia digna, es como un orfanato. Pero aquí les damos la oportunidad de tener una vida sin preocupaciones y que tengan total libertad. Una vez que crecen les conseguimos buenas universidades y trabajos dignos y merecidos.

-Una empresa buena- Elogió Elyas. Arsilex sonrió- ¿Qué favor quieres que te haga?

-Me enteré de lo que le pasó a tu prima, Elizabeth- Elyas miró un momento al suelo- Tengo dos amigos que también son huérfanos, que a pesar de tener estudios altos, lo que quieren es ayudar a alguien protegiéndolo. He pensado que podrían ser los guardaespaldas de Elizabeth.

-¿Cuánto tendría que pagarte?- Preguntó Elyas todavía preocupado.

-A mí nada, a ellos tal vez. Pero aún así, me gustaría que vivieran en tu casa. Van a ayudarte con el tema de las facturas y demás así que no tienes porqué preocuparte- Recalcó Arsilex- Si fuera por mí los tendría aquí, pero es por petición de ellos. No se sienten tan cómodos aquí ya, siendo ellos ya adultos y conviviendo con adolescentes o niños.

-¿Por qué has acudido a mí?- Preguntó Elyas.

-Porque eres alguien en quien confío y además es un trato por otro. Ellos mantienen a tu prima, y si es necesario a Herny, protegidos y tú me haces el favor de acogerlos en tu casa. Si alguna vez ves que tienes problemas económicos porque hay mucha gente en tu casa, pues me lo dices y te echo una mano- Elyas suspiró, la verdad que a Arsilex se le veía muy desesperado.

-Está bien, pero quiero conocerlos- Contestó Elyas. Arsilex sonrió ampliamente.

-Te van a caer genial, ya verás- Dijo Arsilex animado.

Vegetta siguió a Mary hacia una habitación alejada.

-Escucha, necesito que me facilites información sobre el estado mental de David- Vegetta se tensó enseguida- Soy consciente del trastorno de personalidad que padece David, así que no te pongas tan tenso.

-¿Cómo sabes de eso?- Preguntó él. Ella suspiró y se cruzó de brazos.

-He visto el combate desde la televisión del hospital, al lado de un psicólogo de confianza. Se ha dado cuenta de que David se ha dejado ganar y del estado mental que tenía en ese momento. No lo he querido decir al resto de médicos, pero la causa del desmayo ha sido que él mismo estaba tratando de que su otra personalidad no se manifestara ¿Tienes idea de porqué lo ha hecho?- Preguntó rápida.

-Con quien estaba peleando, Herny, era el hijo de un socio del padre David. Su padre le realizó malos tratos, eso es lo que ocasionó el trastorno de personalidad. David tenía miedo de hacer un daño innecesario a Herny.- Contestó Vegetta.

-De momento eso es lo que único que necesito, gracias por la información Samuel.

-Espera ¿Por qué guardar esto en secreto?- Preguntó Vege.

-Sé que hay cosas que David no quiere que la prensa y los medios sepan, podría destruir su carrera. Además digamos que tengo un doble trabajo en el hospital- Vegetta miró sin entender- Mi madre, cuando trabajaba aquí, hacía una labor de forense a quienes lo pedían si recibía dinero a cambio.

-¿Por qué alguien querría saber eso?- Preguntó Vege.

-Porque hay personas que les gusta tomarse la justicia por su cuenta- Dijo Mary cruzándose de brazos- Si me disculpas...tengo que prepararme para la operación de David.

____ acarició mi mejilla con delicadeza. En ese momento desperté. Sentí un dolor muy fuerte en el costado, al intentar moverme. ____ se sorprendió.

-No te muevas- Dijo mirándome preocupada. Empecé a toser un poco. Ella acarició mi pelo. Hice un intento de sonrisa, que se pareció más a una mueca por el dolor- Van a tener que operarte- Dijo con dificultad.

-Sí, imagino- Contesté.

En ese momento, Mary entró en la habitación y ____ se alejó un poco.

-Me alegro de que ya te hayas despertado David. Soy María Navarro, aunque puedes llamarme Mary. Soy la doctora que te va a operar esta noche. Es una operación algo...delicada, no sé si me entiendes- Asentí- Bien, en dos minutos vendrán dos enfermeros a llevarte a la sala de cirugía- Dijo antes de salir por la puerta.

Me quedé en silencio absoluto. _____ puso su mano encima de la mía.

-Todo saldrá bien- Ella sonrió para tranquilizarme- Estaré en la sala de espera.

Iba a salir pero la agarré mano con fuerza. Lo hice inconscientemente, me sentía algo asustado. Ella me miró esperando a que dijera algo.

-Si por algún casual, no vuelvo...- Mis palabras salían con dificultad, porque apenas podía hablar- Quiero que sepas que...te quiero...te quiero más que a nadie- Dejé salir todo mi ser. Ella me miró sorprendida.

-¿A qué tipo de «te quiero» te refieres?- Preguntó acercándose de nuevo a mí.

No me dio tiempo a contestar. Unos enfermeros llegaron para llevarme a la sala de la operación. Ella se quedó allí mirando como me iba.

Continuará...

×Obsession× [Fargan y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora