07

1.4K 113 27
                                    


Manuel caminaba fastidio a lado de Mateo, ya que anteriormente se vio obligado, si claro, ahora el se encontraba en una situación poco amigable; los alumnos que pasaban a su alrededor los miraban extrañados, otros murmuravan entre ellos.

Mientras algunas minas y pibes miraban a Palacios muy comprometidos con el, del lado de Vainstein el solo trataba de ignorar a toda esa bola de gente, el lo que quería en esos momentos era escribir, pero por la culpa del alto gil de Mateo no puede.

Al llegar, Vainstein mira dónde estában.
Estaban en el taller de música, y bueno no había nadie.

—Bueno Vainstein... llegamos...— Mateo cerro la puerta detrás de él, Manuel miro el lugar y después se giro para ver a Palacios.

—Hnm, no entiendo eso de querer estar a solas Palacios... habla ahora–

Manuel tenía su rostro serio y tranquilo, sin importarle el echo de que estaba en un salón solo con Mateo.

—Mira Manu, la verdad es que sabés tu hermana es linda, y está re buena... La recordé y dije ¿Por que no hablarle? Sin importarme el ello de que sea tu hermana— Palacios se comenzó a acercar hacía Manuel, con un toque de diversión en su rostro.

—Deja de joderme Mateo.

—Me dijiste Mateo, Manu...–
Vainstein rodó los ojos y se alejó empezando a caminar a la puerta, pero Mateo le impidió el paso.

—Quítate Palacios...–
—Quítame Manu–susurró Mateo con una leve sonrisa sin enseñar sus dientes.

Manuel lo miro a los ojos con el seño fruncido.

—Palacios no quiero que vos le hables a mi hermana, lo arreglamos después, mañana no faltes entendido...– dijo con seriedad y con su voz un poco más ronca.

— Mhn, see escucha tan bien Manu...–
—Ya quítate–
–Quítame...—

—Bien...-–Manuel tomo de los hombros a Palacios con brusquedad mientras lo jalo con fuerza hacia la derecha, inmediatamente Mateo lo toma de la cadera aferrándose, Vainstein al sentir lo que Mateo hacia lo quiso tirar directamente hacia el suelo, no lo consiguió o bueno no como se lo esperaba ya que al momento de quererlo tirar aún tomando lo de los hombros, Mateo lo golpeó en su estómago haciendo que los dos se cayeran; de una u otra forma haciendo que Manuel quedé abajo de Mateo.

—hanm— Manuel gimió de dolor cuándo sintió el peso del más chico sobre su cuerpo.

Empezó a respirar con dificultad por la falta de aire, ya que por el  golpe en el estómago este se quedará casi sin nada de aire.

—Alto gil que eres, to-davía caes en-cima pelotudo de mier...— no termino su oración puesto que Mateo se le había acercado demasiado a su rostro.

—Manu, no cabe duda de que eres amm muy herm...—

Tres golpes se escucharon en la puerta haciendo que Palacios ruede los ojos y se levante rápidamente —eres un asco, Vainstein. No cabe duda de que  vos sos un falso—

Manuel no ti que su comentario estaba fuera de lugar, pero no contesto, no podía, no se le daba la gana contestar a tan ignorante persona.

—¿Hay alguien? es el servicio de limpieza— se escuchó del otro lado de la puerta.

Manuel cómo pudo se puso de pie ya con su respiración regulada pero solo un poco.

—Se acabo la función Vainstein, a echarle banda— Mateo habrío la puerta le dedicó una sonrisa falsa a la señora para después salir del salón ya con su rostro serio. Manuel dejo que pasara la señora, para después salir con rapidez.

—¡Maldito hijo de puta, esto no se queda así!–

Manuel grito, sin importarle que algunos alumnos y compañeros suyos lo hayan visto.

—Dale Manucho, que te a paso ché estás cómo agitado...— dijo un compañero de clase suyo, un tanto extrañado por la apariencia de su compañero.
—Nada, no me pasa nada– soltó sin más Manuel. —vámonos—

A Palacios se le hizo una sonrisa triunfadora, ya tenía justo lo que quería.

***

Mateo salia del colegio un tanto sonriente, saludaba a algunas minas que anteriormente fueron sus polvos.

Palacios cruzaba la calle, había algunas veces que tomaba el transporte público para regresar a su casa, pero hoy se dió la libertad de ir caminando, no tenía planes hoy, tampoco era como si lo estuvieran esperando mucho en casa, solo por su hermano.

Mateo se encontró con una calle un tanto desavilitada. Era corta y estaba en penumbra; no se veía mucha gente o bueno no sé veía nada de gente, pero era el camino más corto a casa así que se metió un tanto más alerta que ha como estaba antes.

Sin previo aviso, caminando se percató de un sonido que se escuchaba por detrás de él; rápidamente se giro tomado de cuello a la persona.

Pero ow sorpresa, no había visto quién era...

—Pero que te pasa loco, si que haz estado practicando ché—

—Alto pelotudo, pude a verte echo algo peor— soltó el agarre que no había ejercido demasiada fuerza pero aún así era un agarre firmé. —¿Que estás haciendo aquí? Ya tiene que no te veo—

—Solo esperaba amm algunas cosas, cosas que tenía que arreglar y eso. Quise venir a verlos ya sabes a los wachos y a vos también, te vi desde hace como tres calles sabés obviamente sabía dónde estudias, solo que te venía siguiendo desde el otro lado—

Ribba miraba a Mateo con una sonrisa en sus labios sin mostrar sus dientes, Mateo lo miro serio pero a los pocos minutos lo tomo para darle un fuerte abrazo.

—Hijo de puta te extrañe, todos lo hacemos...— dijo aún habrazandolo; Daniel sonrió con algo de tristeza en su rostro.

—Lo sé, lo sé, creeme...— Trueno se separó del abrazo y lo miro con una sonrisa; enseguida lo agarro por los hombros para seguir caminando.

—Y dime wacho, ¿qué tal vas con la melodía?— Miro Palacios el rostro de su compañero para poder ver su reacción; este solo soltó una risa.

—Aun puedo comerme al mundo—dijo mirando hacia el suelo, Mateo lo miró para después mirar al frente.

—Hnm, dale no lo dudó, pero me dejaste muy confundido sabés, encerio venís por mi o por Val...— Mateo fue interrumpido rápidamente por Daniel.
—Hey pero que hoy estás encontra mía o que eh, claro que vine por vos, también a los demás, ¿aún le hablas a "Kmi"?

—Hay si claro hace no mucho me llamo; aún así quizás si te paso por la mente ese pibe de Oliva, ehh— Dijo con un tono burlón, aún así vio la reacción de Ribba este solo se limitó a sonreír.

***

ƇƠƝƬƦƛƦƖƠƧ·TruepliK·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora