Narra Pilar
Debería sentirme feliz
El propósito del cambio era proporcionar un nuevo comienzo. Debería ser una oportunidad para hacer un compromiso más serio con alguien que me ama.
Entonces, por qué siento que estoy de luto?
Escucho un golpe en la puerta, pero ni siquiera tengo la oportunidad de responder antes de que se abra.
- Hola
Dice Purre
- Hola!! Adelante
Pero, por supuesto, él ya está dentro y se tira sobre mi cama.
- Pensé que deberías venir a ver si necesitas ayuda. Levanto una ceja, y él
Un poco avergonzado. - Yo nse. Lo estoy ofreciendo demasiado tarde. Es que... cambio muy molesto, no?
Es solo un pretexto, y ambos lo sabemos, pero como no estoy actuando normalmente últimamente, lo dejé pasar. Me alegro de que esté aquí y las cosas parezcan ... bueno, no exactamente normales, pero al menos estamos hablando.
- Qué hago?
Él Pregunta.
Señalo el armario.
- Qué tal terminar de empacar mis zapatos? Anto comenzó, pero le tomó unos cinco minutos...
Observo mientras Purre toma un montón de zapatos y lo arroja sin ceremonias en la caja.
- Bueno veo este problema que no tendrás.
Comento sarcásticamente.
Él sonríe, repitiendo el gesto.
- Cuántos zapatos tienes, mujer?
- Esta 'mujer' que agregaste al final de la oración responde tu propia pregunta. Tengo muchos.
- Espero que Giuliano esté listo para perder el ochenta por ciento del armario.
Purre comenta, agarrando una sandalia rosa y dándole una mirada escéptica antes de tirar sí, tirar en la misma caja.
Es la primera vez desde el anuncio del cambio que Purre toca el nombre de mi novio.
Sí, Giuliano se convirtió nuevamente en mi novio, pero voy a vivir con el. Por supuesto que él es mi novio. Aun así, he estado evitando su presencia en casa tanto como sea posible. La idea de ambos en el mismo entorno no me agrada.
- Entonces, estás feliz de tener el baño solo para ti?. Le pregunto, mi tono deliberadamente alegre. -Toda esa agua caliente. Ah, y será el dueño absoluto del control remoto. Y sus cervezas no tendrán que competir en el espacio del refrigerador con mis vinos ... No habrá más pelos en el desagüe y ...
Para mi completo horror, mi voz está ahogada. Ni siquiera puedo ver las pequeñas cadenas que estoy tratando de desenredar hace unos minutos, porque mis ojos se llenan de lágrimas. No puedo evitar las lágrimas.
- Oye, dice Purre con pánico. Se sienta a mi lado en el suelo, haciendo estallar un montón de burbujas del plástico en el proceso. - Qué fue Pilar?
Atrapa una lágrima con su dedo, lo que me hace llorar aún más.
- No sé, digo, entre sollozos. Es solo que ... creo ... que no ...
Pasa sus dedos ligeramente por mi cara.
- Yo también te extrañaré, Pili.
Lo miro con visión borrosa.
- Compré algunas toallas nuevas. Varios. Lo dejé lavada y lo puse debajo del fregadero... Y te llamaré todos los días para recordarte ...
Me pasa la mano por la boca para callarme
- Pilar, cálmate. Relájate Vivirás a cinco minutos de aquí. No es que nunca nos volvamos a nos ver.
- Lo sé. Me limpio la nariz con el dorso de la mano. - Pero será diferente. No?
Purre se pega las rodillas al pecho, se pasa los brazos por las piernas y se mira las manos.
- Lo es. Será diferente.
Eso no es lo que quiero que él diga, así que lloro aún más fuerte antes de arrojarme a sus brazos, apretando su cuello con fuerza. Se tensa por un momento, pero luego pone una mano sobre la mía espalda y la otra a mi cabello.
- Pilar no tiene que llorar así
- Yo sé, murmuré contra su cuello. Soy una mantequilla derretida.
Abrazada por él, me siento en el lugar correcto. Por enésima vez, me pregunto si estoy haciendo lo correcto al vivir con Giuliano. Retrocedo un poco para mirar a Purre, y nuestras caras están a centímetros de distancia. Es extraño pensar que hace unas semanas esto terminaría en un beso.
Y lo extraño es que mi deseo de hacer eso permanece.
Ay Dios .
No puedo querer el Purre todavía.
Para empezar, está Giuliano.
Además...
De acuerdo, no puedo pensar en ninguna otra razón.
- Anto te llamará
Le revelo, desesperada por interrumpir mis pensamientos.
Levanta las cejas y me pregunto si es por el cambio discusión abrupta sobre el tema o la noticia en sí.
- Ah, sí?
Asiento con la cabeza.
- Intenté advertirle, pero ... está decidida.
Él frunce el ceño.
- Qué quieres decir, adviértirte?
- Para que ella se prepare, le explico. Por tu negativa.
Purre me mira con una expresión indescifrable.
- Y por qué ló negaría?
- Bueno, le digo, forzando una sonrisa y palmeando su rodilla. - Bueno ... ella no solo quiere sexo ... Ella quiere una relación seria, de verdad.
Lo tengo ... Su tono indica que no entendió nada.
- Anto quiere un novio
Refuerzo diciendo con todas las letras.
Espero a que absorba la información para asegurarme que no tiene intención de asumir nada con Anto o cualquier otra chica. Qué seguirá siendo un soltero encantador y coqueto.
No es que me guste la idea de que Purre se acueste con muchas chicas, pero es algo mucho más fácil de aceptar que él con alguien de verdad ...
Pero Purre no dice nada de eso. Simplemente se encoge de hombros.
- Me gusta anto
Mi boca esta abierta.
- No puedes estar pensando en decir que sí.
Él deja escapar una risa corta y ligeramente áspera.
- Bueno, no es exactamente una propuesta de matrimonio, verdad? Si ella me llamara, lo aceptaría.
- Pero ...
- No quiero estar soltero para siempre, Pilar.
Su tono es un poco alto, y el mío un poco molesto cuando respondo.
- Desde cuándo, Purre? Veo a Purre apretar los dientes con irritación, pero insisto. Cuándo indicaste que querías una novia?
- No lo sé, oye. Pero tengo derecho a cambiar de opinión, no? Quiero decir, no estoy diciendo que voy a comprar un anillo de bodas el próximo fin de semana, pero no me quedaré cerrado a la idea cuando aparezca la chica adecuada.
Siento un nudo en la garganta.
No sé por qué, pero esta información me deja sorprendida y dolida.
Purre está esperando a la chica correcta?
Siempre pensé que eras un soltero convencido. Solo pensando que quieres ser el novio de alguien ...
Sacude toda mi creencia de él quién era O de quien éramos.
No tiene ningún sentido en absoluto.
Nada más tiene sentido.
- Anto seria su novia?
Trato de fingir que no me molesta la situación, sin éxito.
- Qué está pasando? Ahora, quién viene con dos pesas y dos medidas, eres tú? Pregunta, poniéndose de pie con una expresión irritada en su rostro.
- Qué quieres decir?
Yo también me pongo de pie para enfrentarlo.
- Puedes tener un novio y un mejor amigo, pero solo puedo tener a vos?
- No. Respondo. Eso no es lo que estoy diciendo. Solo pensé que ...
Él se cruza de brazos.
- Qué, Pilar? Qué te pareció?
Frunzo el ceño ante la frialdad en su voz. No puedo responder porque la respuesta que está en la punta de mi lengua destruirá lo que hay entre nosotros.
Porque la idea loca que domina mi cabeza es que no puedo aceptar el hecho de que Purre estaba esperando a la chica correcta ...
Porque eso significaría que no soy yo.
Todo este tiempo, nunca me permití pensar en Purre como una posibilidad porque pensaba que él no quería salir.
Solo que estaba equivocada
Simplemente no quiere ser mi novio.
Pero está bien.
Solo somos dos amigos que..
- Oh, Dios mío. Cierro los ojos con fuerza. - Sucedió.
- Qué pasó? No te entendo, Pilar
Su tono sigue siendo irritante.
Me obligo a mirarlo a los ojos.
- Echamos a perder nuestra amistad. Complicamos todo poniendo el sexo en el medio.
- O vos complicaste todo al decidir volver con el imbécil de tu ex.
- Hey. Le señalo. Esto no es justo. Le pregunté su opinión, y usted dijo ...
- No importa lo que dije. Grita Purre. Pilar, O quieres estar con Giuliano o ...?
Se detiene y se pasa las manos por el pelo. Doy un paso adelante
- O quiero estar con Giuliano o qué?
Ni siquiera puedo decir cuánto quiero que él termine esta oración.
En cambio, baja las manos y cierra los ojos.
- Joder Pilar, esto es una locura. Saldré de aquí.
- Gran idea. Huir cuando las cosas se ponen feas, digo irritada. - Anto es una chica con suerte. Serás un gran novio.
Purre me mira, sus ojos fríos como el hielo. De una manera que nunca he visto.
- Tengo una palabra para ti, Pilar, pero ten en cuenta que cuando lo digo, no significa que quiero que todo vuelva a ser como era antes. Cuando lo diga, será para advertirte que no quiero nada más de ti.
Siento una punzada de pánico.
- Purre ... no hace eso.
Él levanta su mano.
- No, escúchame. Tienes derecho a vivir con Giuliano. Necesitas seguir adelante. Pero también necesito hacerlo, y no puedo hacerlo con alguien que siempre dice que soy un imbécil superficial y mujeriego. Puedes hacerle esto a alguien que piensa que puede tenerlo todo, pero yo no.
- Espera, Purre ...No..
Se inclina para mirarme a los ojos, y la expresión de su rostro es brutal cuando dice lo que nunca imaginé que escucharía.
Nuestra palabra segura.
"Alvaria".
Y así, de la nada, mi mejor amigo ya no es parte de mi vida.
