Trabajar como detective en el Departamento de policía de Detroit era algo difícil, debido a los acontecimientos ocasionados por los divergentes.
Hank Anderson, mejor amigo y figura paterna de Tn, es su compañero de trabajo, con el cual seran asigna...
Estar en casa, con una taza de café en las manos mientras veo por la ventana era algo ya común en mi vida, esa era mi forma de buscar paz cuando tenía muchas cosas en que pensar.
No me gustaba salir a la calle, no me agradaban mucho las personas. ¿Por qué? La cosa es simple, su manera de actuar con los demás, últimamente tratan a los androides como si fueran la cosa más insignificante y deplorable del mundo. No es como si yo estuviese del lado de ellos, pero tampoco me gusta ver lo mal de los tratan. Es inhumano e injusto, considerando que ellos son seres vivos, deberías tener derechos al igual que nosotros.
Pero las personas son de mente cerrada y coeficiente de ardilla prematura, por esa razón los androidew son considerados esclavos a nivel mundial.
Hubiera seguido tranquila, pensando en la inmensa estupidez humana de no ser por mi celular, el cual vibraba de manera exagerada en la mesa del comedor. De muy mala gana, me puse de pie y deje la taza de café a un lado, para luego tomar el celular entre mis manos y responder.
- ¿Hola?
- Oh Tn, joder gracias por responder, necesito que vengas por mi, al bar de siempre. - habló Hank con un notable fastidio en su voz.
- Hank, si otra vez estas ebrio, juro que te voy a meter a una jodida bañera de hielo, la otra vez vomitaste en mi auto. - camine hacia mi habitación y comenze a sacar ropa más abrigada para salir en busca de mi amigo.
- ¿Que? No joder, no es eso, es algo peor. - se apresuró en decir - Y sobre lo de tu auto... Enserio lo siento, no volverá a ocurrir, niña. - se disculpó algo apenado, disminuyendo el tono de su voz - Solo, por favor ven, esto es algo serio.
Suspiro de manera profunda, dándome ánimos a salir de casa.
- Esta bien, voy en camino, esperame. - y sin esperar respuesta corte la llamada.
Me puse un suéter plomo, con un pantalón negro junto a unas botas del mismo color y un abrigo de color celeste pálido.
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Tome mi placa y mi arma, junto con mi celular y las llaves de mi casa. No planeaba ir en auto, de seguro Hank habria llevado su auto.
Salí del Departamento y pedí un taxi. Solo fue cuestión de minutos en que este llegará. Me subí en el y le indique a donde debía ir. En todo el camino yo solo me dedique a mirar por la ventana.
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Baje del auto y le pague al conductor. Mire al frente y allí estaba el bar con letras led amarillas, «Jimmy's Bar". Agradecí el hecho de que no tenía que entrar a aquel lugar, ya que Hank estaba afuera de este, con una botella de cerveza entre las manos y la mirada fija a el asiento de copiloto del auto.
No le di mayor importancia y camine hacia donde estaba el, para luego posar una de mis manos en su hombro.
- Hey, ¿todo bien? - hable con voz baja. Este se sobresalto por mi repentina aparición para luego posar su mirada en mi.-- ¿Cual era el asunto importante?
- A mi también me da gusto verte, pequeña. - habló con sarcasmo. Me sonrió y despeino mi cabello a modo de afecto para luego señalar con su barbilla al asiento del auto - Miralo por ti misma. - le volvió a dar otro sorbo a su botella.
Mire hacia donde el me había señalado, y para mí sorpresa no había ningún hombre noqueado allí, no... En el asiento se encontraba un androide, cabello oscuro, piel pálida con algunas pecas en su rostro, ojos marrones y con apariencia aparentemente indefensa. Omitiendo el led que tenía y el rostro con una expresión carente de alguna expresión, el se veía como un humano común.
"Un humano".
- ¿Compraste un androide? - dije sin quitar la vista del autómata. Jamás había visto un modelo igual, por lo que me causa más curiosidad.
- Ja ja, que graciosa estás hoy. - habló con sarcasmo.
Volvió a dar otro sorbo a su botella mientras negaba con la cabeza, balanceandose ligeramente de adelante hacia atrás, señal de que el alcohol ya lo había mareado un poco.
- No, el vino solo, dice que "Cyberlife lo mando a ayudarnos con la investigación" - bufo. Ladee la cabeza, ¿tenenos una investigación? - El muy hijo de perra es muy insistente.
- Hank... - reprendi ladeando la cabeza para verlo, sabía que no podía cambiar la forma en la que percibía a los androides, pero sería algo bueno que no se expresará así con lo que podía ser un androide con complejo de terminator.
- La paz. - elevó las manos.
- ¿Y que modelo es? - volví la mirada al androide, el cual se encontraba sentado de manera tranquila observandonos con lo que parecía ser confusion y curiosidad.
- Y yo que mierda voy a saber. - volvió a tomar de su botella.
Ignore aquello y mire al autómata de manera tranquila, no quería que pensara que yo era una persona descortés, el merece ser tratado con respeto.
- Hola, soy la detective Tn White. - me presente de manera amable, inclinando mi cabeza para poder verle mejor - ¿Tienes algún nombre por el cuál pueda llamarte?
El androide me miro por unos segundos, su LED cambio a color amarillo unos segundos para luego volver al azul. Salió del auto y se paro frente a mi. El es mucho mucho más alto que yo.
- Hola detective, mi nombre es Connor, soy el androide enviado por Cyberlife. Es un placer conocerle. - se presentó, estoy bastante segura que lo que acaba de decir era solo un simplemente un discurso que tenía como predeterminado al presentarse ante cualquier persona, aterrador si lo pensabas a fondo.
Pero, quitando esa pequeña cosa... Su voz era bastante agradable.
- Eso ya lo se. -Hank habló con desagrado.
Rode los ojos y mire a Connor.
- No le hagas caso a Hank, solo esta molesto porque le interrunpimos su momento de relajación. - hice un gesto con la mano para restarle importancia - También es un placer conocerte Connor. - sonreí un poco. El imitó mi acción, lucia tan inocente.
- Nos fue asignado un caso de homicidio, será mejor que nos apuremos al llegar. - Nos miro a ambos. Hank y yo asentimos - Puedo decirles la ubicación del lugar.
- Eso sería genial Connor, gracias. - hable para luego mirar a Hank - Vamos, luego podrás seguir bebiendo.
- Aja. - tiro la botella en un basurero y camino hacia el asiento del conductor. Connor quiso volver a sentarse en el asiento del copiloto pero Hank habló de nuevo - Eh tu, los humanos van adelante, los robots atrás.
Quise decir algo más, pero Connor habló primero.
- Como usted diga, Teniente. - de manera obediente, me cedió el lugar y se fue a sentar el los asiento de atrás.
Entre al auto y mire a Hank de manera acusadora, no me gustaba el trato que le daba al pobre androide, no le había hecho nada.
- ¿Que? - me miro mientras ponía sus manos el en volante.
Yo solo negué con la cabeza y comenze a mirar por la ventana. Esta será una larga noche...
Más aún si se trata de un homicidio.
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