♠️ Capítulo XL ♠️

114 11 65
                                    

- Recuerda lo que dijiste Ayla. Por favor mantente alejada de Chris en el futuro.
- ¿Qué,por qué?

No dejó pasar un segundo entre ellos que Alexander ya había tomado la cintura de la joven mientras la besaba apasionadamente sin recibir resistencia de parte de ella hasta que debieron separarse por falta de oxígeno.

- Porque yo soy el único que puede besarte... -  dijo el vampiro mientras recuperaba el aliento - ...mi querida princesa.

...

Un nuevo beso nació entre ellos, las manos del vampiro acariciaban las curvas de la humana lentamente al principio para luego convertirse en caricias necesitadas llenas de deseo, ella por su parte se limitó a tomar su rostro y mantener el beso lo más posible.
La fuerza del vampiro se incrementó lo suficiente como para alzar a la joven sin problema alguno y apoyarla contra la puerta de sus aposentos manteniéndola en la altura justa para que ella pudiera sentirlo también.
Sus ropas estorbaban por lo que Alexander se encargó de quitarlas de su camino rompiéndolas de un solo jalón para tener el pase directo a su cuerpo, sus intimidades ya estaban listas para el otro...

Al día siguiente Ayla despertó gracias a la brisa que mecía las cortinas del gran ventanal, estaba en los brazos de Alexander y todo era solo un sueño... ¡Había soñado tener relaciones con Alexander!. La noche anterior Alexander le había pedido mantener su distancia con respecto a Chris para luego besarla pero no había pasado nada más... solo había vuelto a dormir en su cama.

- ¿Qué sucede? - la voz gruesa matutina de Alexander ponía sus pelos de punta - ¿Sigues pensando en el beso de anoche?
- Creo que voy a levantarme... - dijo Ayla girando sobre su cuerpo.

Alexander lo impidió con su brazo.

- ¿Q-qué quieres hacer?
- Deberías saber qué quiero hacer con mi princesa... - dijo mientras se acercaba a sus labios.
- ¡N-no!
- ...

Alexander se quitó sobre el cuerpo de la joven sin reacción alguna para arrojarle una caja blanca con su ropa en el interior.

- Debo salir, cámbiate y ven a verme. - ordenó.

Cuando el vampiro salió del dormitorio Ayla estudió la caja y su interior... ¿ropa de pareja?

Cuando Ayla estuvo lista se dirigió por el pasillo a buscar al vampiro pero algo la detuvo. Alexander hablaba con alguien oculto detrás de una pared...

¡¿Alguien igual que Alexander?!

Más allá de mi vida Tu mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora