Aubrey quiere ser madre, así que toma el asunto en sus propias manos.
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Todos los créditos de la hermosa portada para: @Fraternityimperfect y @pairands 💘
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Historia original.
Se prohíbe total y completamente la adaptación de este escrito dentro o...
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El último fin de semana en los cuales los padres de Harry están en casa, decidimos viajar. Al vivir en la ciudad, ellos no están acostumbrados a la playa y a la naturaleza y la verdad eso es algo a lo cual nosotros estamos más que felices de asistir. Así que el jueves por la noche, arreglamos nuestras cosas, montamos todo a la camioneta de Harry y el día viernes, luego del trabajo, nos vamos directamente hacia la playa.
Como es costumbre, el día está precioso, hace muchísima calor y la brisa choca contra nuestro rostro. Antes de tomar el camino hacia allí, pasamos por el supermercado para coger lo que haga falta para dos noches allí. Anne posiciona en el carrito, una variedad de frutas que me hacen agua la boca. Ella se ríe al verme observar con tanto deseo la fruta en el carrito, me abraza por el costado y besa mi cabeza con ternura.
—El bebé necesita proteínas y nutrientes.
Asiento en su dirección, porque tiene mucha razón, pero aun así meto dentro del carrito unas barras de chocolate blanco y unas gomitas. La verdad es que últimamente necesito tener un poco a mano, porque el bebé está haciéndome tener unos antojos muy deliciosos.
Tras tomar todo lo que necesitamos y tras pasar por las cajas registradoras, volvemos a emprender camino hacia la playa. Hemos rentado una pequeña cabaña frente al mar y es realmente preciosa, el contacto nos lo pasó Jesy y algo me dice que el precio tan económico y la buena disposición del chico que nos atendió, fue porque mi amiga estuvo involucrada con él en algún momento. Realmente amo a Jesy y amo que consiga descuentos.
Al llegar allí nos turnamos para bajar las cosas del coche y acomodarlas dentro. Ayudo a Elijah con sus cosas y le tiendo la cama, sonriéndole en cada oportunidad cuando me pasa sus mantas y almohadones. Una vez que lo primordial está hecho, Anne nos indica que ella será la encargada de preparar la cena y que podemos relajarnos yendo a la playa. Insisto en ayudarle, pero me espanta rápidamente, diciéndome que me hará bien un respiro y al bebé la caminata. Así que tras untarnos protector solar, coger nuestras sandalias y un par de toallas, bajamos hacia la playa.
El mar está precioso, majestuoso y glorioso. Elijah chilla emocionado al ver el agua y Harry tiene que detenerlo al ver las intenciones de salir corriendo. Toma su mano y lo guía lentamente hacia la orilla. Así que yo tiendo las toallas y me siento sobre una de ellas, observándoles. Acaricio mi estómago, el cual sigue siendo solo una pequeña protuberancia, incluso al tener casi cinco meses. Mi ginecóloga dice que es normal, que no tengo que preocuparme, que el bebé está sano y que todos los embarazos y el desarrollo de ellos son diferentes. Así que eso me ayuda a dormir mejor por las noches y no preocupar mi cabeza más de lo necesario. Harry voltea a verme de vez en cuando, cuidando de que Elijah no caiga al agua y pueda pasar un accidente.
Cuando acaban, acercan hacia donde estoy, cayendo sentados en las toallas disponibles.
—¿Cómo estás mami? —pregunta mi pequeño tomando una de mis manos.
