🌹║26

602 88 48
                                    

Sicheng

Han pasado casi tres semanas desde aquel día en que ofendieron mi imagen masculina.

Y claro, el día en que también casi me violan.

No puedo decir mucho sobre aquello ya que me perdí de casi toda la acción, apenas alcancé a ver a Kun llegar. Me asusté al verlo caer, tanto que colapsé, por eso y por lo anterior.

Es un alivio que haya sido una actuación para tomar al enemigo con la guardia baja y luego golpearlos hasta dejarlos totalmente asustados en el suelo.

Muy inteligente, mi bello Kun.

No sé si sea coincidencia pero no he visto a Yuta desde aquella fiesta, ni tampoco he sabido de él. Sólo se que Ten ha seguido juntándose con él y la novia, así que no tengo porque pensar que puede estar mal o que esta tirado bajo un puente en proceso de descomposición.

Sin embargo, aún sueño con él, diciéndome esas palabras en voz suave y melódica.

Deseas más, ¿Cierto?

¿Estás listo, amor? —preguntó Kun, terminando de subir nuestras cosas al auto.

¡Ya voy! —le grité desde mi habitación.

¿Te molesta si me quejo? —preguntó Ten, acostado en mi cama, con control en mano y viendo la televisión. Alguien que no parece que esté muy feliz con mi regreso con Kun.

Ten, en serio. —le supliqué.— No lo conoces bien...

No, Sicheng. —me cortó con prepotencia.— Lo conozco muy bien, ese es el problema.

Pero nos arreglamos.

A base de mentiras.

¿Qué quieres decir?

Nada Sicheng. —resopló, fue hacia la puerta y la abrió, dando como terminada la conversación.— Nada.

⊱⋅ ─── ❴✾◐✾❵ ─── ⋅⊰

Taeyong


Qué mal lo de Winwin.

Se sacó los lentes de la cabeza, se los puso sobre los ojos y dijo:

Sip.

No sabía que usabas lentes. —comenté sincero.

No lo hago.

Entonces...

Son de la Sun.

Arrugué el entrecejo, ¿Qué hacían los lentes de la Sun aquí?

¿Qué le pasó a tu cara? —me preguntó Ten, riendo.— ¿Tan raro es que tenga amigas?

No, pero pensé que al haber tenido a una amiga que se haya metido con tu pareja, aparte de Xiaojun, haría que te costara confiar en mujeres.

Mi comentario creo que le sentó como golpe en las bolas. Se quitó los lentes y los dejó sobre la mesa, miró sus manos como siempre que esta pensando pero volvió a sonreír.

Directo al hueso. Por dos.

Yuta me tiene así. —me senté al borde del sillón, me llevé el vaso a los labios y tomé un sorbo de limonada.

c a s i│𝘁𝗮𝗲𝘁𝗲𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora