Little Moon ©

18|| Ben

Thea's pov:

Abrí mis ojos y los entrecerré un poco al ver que estaba en mi habitación.

¿A qué hora llegué aquí?

Me levanté estirándome un poco y caminé hacia mi peinador al ver una notita adhesiva de color azul.

Te dejé esta nota para que no te asustes por verte en tu habitación, ayer te traje y para que no durmieras incómoda, llamé a Ada para que ella te cambiara, no te preocupes, no vi nada, pasaré por ti faltando quince.
Atte. El guapo chico al que tienes loco, Jack.

Reí por la última frase y negué divertida, me adentré al baño y me di una ducha rápida, salí con una toalla alrededor de mi cuerpo y fui hacia mi armario, me coloqué mi ropa interior, un short Levi's, una blusa de tirantes negra y una camisa a cuadros de Chris.

Me maquillé y me peiné, tomé mis cosas y salí de mi cuarto caminando hacia la cocina, cuando llegué vi a Chris desayunando y tomé una manzana.

—¿Por qué no me habían dicho?

—Mamá no quería que supieras por qué según ella era peligroso para ti y no quería que su hija estuviera involucrada en esto, pero como eres Luna de Jack —se encogió de hombros y asentí escuchando el claxon del auto.

—¿Vamos? —asintió dejando el plato en el lavaplatos, salimos de la cocina y abrí la puerta viendo el auto de Jack.

—Buenos días, cuñado —Chris dice y Jack sonríe, enciende el auto y cuando está a punto de arrancar, voltea hacia mí con el ceño fruncido.

—¿Ni unos buenos días me vas a dar, linda? —dice y sonrío apenada, lo tomo por la mandíbula y lo acerco a mí fundiendo nuestros labios en un beso, escucho como Chris carraspea y me separo de Jack mordiendo su labio.

—Tu hermano está presente y a tu hermano no le gustan este tipo de saludos —los dos reímos y Jack arranca el auto empezando a manejar, cuando llegamos nos bajamos y Jack toma mi mano mientras caminamos hasta la entrada.

—Oye —me detiene y enrolla sus manos en mi cintura—. Tengo que irme, hoy es día de entrenamiento —asiento mientras me da un casto beso—. Te amo, linda —me da una nalgada y se separa de mí caminando en dirección opuesta a nosotros, lo veo saludar a algunos chicos y sonreí caminando hacia mi salón.

Al tocar la campana vemos cómo la orientadora entra con una sonrisa en el rostro, me acomodé mejor en la silla y esperé que dijera algo.

—Buenos días, chicos, cómo saben, es temporada de clubs —todos empiezan a silbar y hacer bulla—. Les daré una lista para que vean cuáles están ahora y puedan elegir uno —todos empiezan a pasar unas hojas hacia atrás y tomo una pasando las demás de igual forma.

Literatura.

Leí y coloqué mi nombre en la línea, un chico pasó tomando los papeles de regreso y la orientadora salió deseando un buen día.

Volteo hacia los asientos vacíos de Ada y Alice y hago un puchero.

Después de salir de las primeras tres horas empecé a caminar sola hasta la cafetería, viendo cómo la mesa estaba llena de chicos, las únicas chicas que estábamos ahí éramos Alice, Ada y yo.

Y dado que las dos chicas estaban en un retiro para porristas y llegaban hoy en la tarde, solo estaba yo.

Me senté entre medio de Jack y Chris y empecé a comer de mi bandeja.

Desde el episodio del otro día me habían dado ganas de comer más cosas, más grandes, me había controlado, pero aun así sentía la necesidad de salir a cazar algo.

—¿Estás bien? —Jack tomó mi barbilla y levantó mi rostro.

—Eso creo —me encogí de hombros volviendo mi vista a mi bandeja, Jack colocó su mano en mi muslo y así estuvo hasta que la campana volvió a tocar para clases.

*

Decirles que estoy cansada sería una mentira muy grande.

Matemáticas siempre me ha demostrado que sí una materia puede sacar canas verdes, es esa.

Cuando salgo del salón volteo hacia los lados buscando a los chicos y los visualizo en la entrada, empiezo a caminar hasta ellos y los saludo con un beso en la mejilla, solo estaban Jack, Chris y Leo.

Frunzo el ceño al ver a Chris sonriendo como bobo, nunca lo había visto de esa manera.

—¿Aún no has visto? —elevo mi ceja al no saber de qué habla, volteo hacia todos lados y mi mundo se detiene cuando lo veo.

Ben.

Mi hermano mayor está parado al otro lado del estacionamiento, traía unos pantalones negros y una camisa azul de botones, un ramo de rosas se encontraba en sus manos mientras me daba una sonrisa de oreja a oreja.

Volteo hacia los chicos sin poder creerlo y mis ojos se llenan de lágrimas, empiezo a correr por todo el estacionamiento mientras las personas que aún se encuentran ahí me ven extraño, pero los ignoro.

Cuando estoy a punto de llegar él deja en el capo de un carro el ramo y abre sus brazos, salto hacia él y engancho mis piernas en su cintura.

—No sabes cuánto te extrañé —digo, sintiendo como las lágrimas bajan por mis mejillas, le doy un beso en la mejilla y paso mis manos por detrás de su cuello poniendo mis pies en el suelo—. Me hiciste demasiada falta, tonto.

—Debes agradecerle a Jack —dice él mientras se separa de mí, con sus pulgares limpia mis mejillas llenas de lágrimas y me da un beso en la frente, los chicos llegan hasta nosotros.

—P-pero, ¿C-cómo?

—Hace unos días terminé mi servicio, pero no estaba muy seguro de volver, al día siguiente Jack me contactó y me dijo que me extrañabas y que quería remediar una estupidez que te había dicho, así que aproveché y usé eso de excusa para estar aquí —sonreí limpiando las lágrimas que aún salían de mis ojos y volteé hacia Jack.

—¿Hiciste eso por mí?

—Lo haría todo por ti.

—No sabes cuánto te lo agradezco —lo abracé con todas mis fuerzas y me separé de él dándole un beso en la boca.

—«¿Estoy perdonado, hermosa?»

—Estás perdonado —lo abracé de nuevo cerrando mis ojos.

*

xPau01