FIASCO

589 48 102
                                    

Buenos días estimados oyentes o lectores, continuaré con mi relato, como se los he prometido.

Ese día comenzó medianamente normal, lo único es que como saben no estoy acostumbrado a que se me queden mirando mientras duermo, cuando abrí mis ojos lo primero que divisé fue a Charlotte observándome atentamente.

-Pareces un ángel cuando duermes, tan tranquilo-

Me ruboricé ante el cumplido, es decir estaba acostumbrado a los cumplidos, pero realmente no a los de ella, por lo que me sorprendió con la guardia baja, luego de ello me predispuse a darme un baño, colocarme ropa limpia y dejar la sucia en la canasta que se encontraba en el cuarto de pilas, luego comencé a preparar el desayuno, nuevamente me tomó desprevenido, sus manos estaban dentro del delantal y dentro de mi camisa, mientras besaba mi cuello con suavidad, realmente me sentía nervioso, aún más porque estaba cerca de la cocina.

-Oh ¿será que el demonio de la radio, pueda darme una entrevista en privado antes de ir a trabajar? -

No sabía por qué, pero me extasiaba de una manera extraña cuando utilizaba mi seudónimo, o mejor aún escuchar mi nombre en sus labios, tenía un embrujo extraño aquella chica que me hacía ser distinto a todo lo que generalmente hacía o a como generalmente me comportaba.

-Deja almenos que apague el fuego querida para mostrarte lo que el demonio radio puede hacer-

Cuando estuvo listo apagué el fuego, me quité el delantal, ella se sentó sobre el sofá y me acerco tomándome de la mano, al soltarme con sus manos habría comenzado a desabrochar mi pantalón, en cuestión de segundos mi miembro estaba en la mano de la chica, tenía pena aun así ella lo acariciaba lentamente de la base a la punta.

-Te mostrare algo que Angel dijo que podía gustarte-

No comprendía por qué Angel le daría un consejo a Charlie y menos a que se refería, por lo menos no caí en conciencia hasta que comenzó a acercar mi miembro a su boca.

-Espera, Charlie, no es necesario que hagas eso-

Le dije sentía mi cara arder, ella sonrió maliciosamente, podía ver la lujuria en sus ojos, una pequeña lamida a la punta fue suficiente para que perdiera la noción de lo que pasaba, luego fue seguida de lamidas, caricias y empeoro cuando sentí la calidez de su boca recibir y acoger a mi miembro, mientras ella comenzaba a realizar suaves movimientos sobre el mismo abarcándolo por completo, luego puse mis manos sobre su cabeza instintivamente, marcando el ritmo, pasaron varios minutos después volví a ser consciente de la situación más cuando vi, con morbo como ella tragaba el producto de mi excitación, luego se puso en pie, salto a mis brazos aferrándose a mi cintura, me senté sobre él sofá mientras nos besábamos, 2 segundos me tomo, deshacerme de la ropa interior de ella, cuando por fin me introduje en ella nuevamente, le tome de la cintura, guiándole, tanto la intensidad como la velocidad de sus movimientos, acomodándome también para acompañarle mientras me deleitaba con la vista de la chica sobre mí, con forme continuábamos con la faena de la mañana nos devorábamos a besos, el ultimo que me brindo dejo una clara marca amoratada en mi cuello, mientras nuevamente terminaba junto con ella.

Nos quedamos mirando unos momentos, mientras ella se apartaba de encima de mí y me miraba con una sonrisa traviesa.

-Vaya, puedo decir que estas mejorando-

Me dijo sonriente, mientras voltee a ver el reloj debía apresurarme cuando me acomode, note que ahora tendría que cambiarme el pantalón, ya que se habría manchado gracias a la acción anterior.

-Puedes servir el desayuno debo peinarme y cambiar mi pantalón-

Le dije y ella, solo me abrazo y me beso, diciéndome al oído.

Para que me quierasWhere stories live. Discover now