Para que me quieras

NOCHE DE PÓKER

BBuenas mis queridos lectores me alegro mucho haber aumentado un poco las ventas de este periódico, al parecer también hay gente de florida que pide el envío del mismo, al parecer les gusta mi historia o tal vez quieran saber el desenlace de mi conquista, sin más les comienzo.

Los días habían pasado demasiado rápido ya estábamos viernes, Alastor reforzó el lazo con Artemis, ahora me costaba que no llorara cuando Alastor se marchaba, 2 de esos días Alastor se quedó a dormir en el sofá ya que comenzaba a no querer separarse del niño, eso lo aproveché para dejarlo admirarme en ropa de dormir, pero la mayoría de las veces toma una bata y me cubría o simplemente me ignoraba, luego desayunábamos juntos, yo siempre le hacía algunas insinuaciones pero fingía que no las veía o incluso comenzaba una conversación sobre lo que leía en el periódico, luego se despedía dándole un beso en la frente a Artemis y a mí solo me decía adiós, así sin gracia y sin afecto, solo se marchaba. Ese día rumbo a mi trabajo me volví a topar con Angel.

-Hola dulzura, este ¿sabes? el día de hoy yo y Husk haremos una reunión con Alastor vamos a jugar póker, ¿te gustaría unirte? -

Sonreí muy tontamente, nunca en mi vida había jugado esa cosa, había escuchado de él, pero nunca lo había jugado, pero el hecho de que estaba mi objeto de adoración en la reunión me hacían contemplarlo como una buena idea y como si Angel leyese mis pensamientos dijo.

-Querida haremos apuestas y habrá alcohol, sé que tú no puedes tomar, pero, digamos que Al no piensa mucho las cosas si toma demás y por lo que sospecho no te has divertido con él ¿cierto?

Había dado en el clavo, la verdad me divertiría el apostar con Alastor y hacer interesante la noche, no quería aprovecharme de su posible estado etílico, pero de verdad que deseaba, aunque fuese el roce de sus labios.

-Tengo un problema, no soy una madre irresponsable, no podría llevar a mi Artemis, y dejarle solo en casa sería terriblemente horrible y sería la peor madre del mundo-

Dije un poco sacada de la fantasía por más que hubiese esa posibilidad no podía dejar solo a mi pedacito de sol.

-oh, no te preocupes, conozco a una pariente de Alastor, la cual es de su completa confianza, él la quiere casi que, como una hija, no será un problema. –

Me sentí extraña, ¿acaso Angel estaba ayudando para que Alastor cayese en mis brazos?

-querida tómalo o déjalo, se lo diré en la tarde, si Niffty te aprueba quiere decir que tendrás más apoyo para conquistar a Alastor, la chica es buena influyendo en el indirectamente. -

No podía creerlo, ellos pensaban que lo mejor era que Alastor volviese conmigo, me parecía hermoso.

-antes que agradezcas no lo hacemos por ti, si no por él. -

Me dijo dulcemente me parecía raro que Angel se pusiese medio a la defensiva antes de decirle algo.

Luego de ello me dirigí a mi trabajo, pasé un largo día entre tumultos de papeles, entrevistas y demás, luego de ello caminé de vuelta a casa topándome con Vox.

-Oh, querida tienes un momento-

Me tomó del brazo un poco brusco y me hizo voltear a verle.

-Cielito, sé lo que intentas, pero ¿crees que tienes derecho a una oportunidad con mi Al? -

Le miré sorprendida, ¿Cómo que mi Al?

-Espera Al no es una propiedad ¿sabes? –

Le espeté, tenía razón después de irme como una pendeja, era claro que no tenía derecho a intentar de coquetear con él, pero lo amaba y creía que eso sería suficiente.