She's perfect » Nash Grier

Capítulo treinta y nueve {últimos capítulos}

—¿Estás lista, cariño? —preguntó mi padre, llegando a mi habitación.

—Sí —dije emocionada—. ¡Que lindo! Pero tu moño esta mal —me reí.

Me acerque y le acomode su pajarita negra. Estaba vestido con un traje negro, listo para casarse.

Era 27 de junio, el día del casamiento de mi padre y Destiny. Estaba muy emocionada y feliz por ellos dos. Luego de la fiesta, ellos se irían recién casados a Venecia, por luna de miel. Mientras, las chicas y yo nos quedaríamos en la casa, para cuidarla.

Nos subimos al auto, listos para irnos a la Iglesia. Al llegar, ya todos nuestros familiares y amigos, estaban ahí. Muchas de las personas que estaban alli, no las conocía por el simple hecho de que el año pasado me enteré que ellos eran mi familia. Todos parecían buenas personas y lo eran.

La hora de que Destiny llegará, llegó. Junto a Chad, fuimos a nuestro lugar listos, con las almohadas y los anillos. Sí, nosotros llevaríamos los anillos. Estaba algo nerviosa ya que, mis tacones eran muy altos y se me dificultaba caminar con ellos. No quería arruinar la fiesta, cayendome y tal vez, perdiendo el anillo.

Ignore los malo de mi cabeza y me centre en pasarlo bien, y alegrarme por mi padre y su chica.

Destiny llegó, su vestido era blanco y hermoso, aun recuerdo cuando lo eligió. La cola de este, estaba sostenido por dos niñas como de 4 años. En su sonrisa, se podía ver su alegría y emoción. Al igual que en la mía.

Todos estaban de pie, observando como la novia caminaba al altar, junto a las dos niñas. Uno de todos los que estaban allí, centro su mirada en mi. Unos ojos celestes me observaban, junto a una sonrisa. Le devolvi la sonrisa y me rei, seguido al ver que le molestaba su corbata, mal puesta.

{...}

Ya se habían escuchado los "Sí, acepto" de los novios. Y era hora, de que Chad y yo, llevaramos los anillos. Mientras caminabamos, todas las miradas estaban centradas en nosotros, algo muy incomodo. Y en segundos, logramos llegar frente al cura y los novios.

—El señor bendiga estos anillos que van a entregarse uno al otro en señal de amor y felicidad —habló el cura.

Yo le entregue a mi padre el anillo para Destiny y Chad el anillo para mi padre a Des. Los dos nos sonrieron y les devolvimos la sonrisa. Nosotros fuimos al primer asiento, donde Nash y Claire nos esperaban sentados. Me senté entre mi novio y mi hermano, sonriente.

—Los declaro; marido y mujer. Puede besar a la novia —pronunció el cura.

Todos se levantaron y comenzaron a aplaudir, y yo también. Me sentía tan feliz por ellos dos. Ya estaban casados. Una feliz pareja.

—Mira cuando nosotros estemos así y en el mismo lugar —apuntó Nash a mi padre, que aún besaba a Des.

Sonrei y mis mejillas tomaron un color rojo. Chad al verme así se rió de mi, yo lo ignore y quedé pensando en lo que Nash me había dicho.

No podía esperar a que los dos estemos en ese mismo posición —si es que lo lograbamos— felices, listos para la luna de miel y también, listos para hijos. Pequeños Nash, Nash Jr, Little Nash ok, esperen eso es lo mismo que lo primero.

En fin, ¿se imaginan Nash y yo, felices con toda una vida por adelante? Junto a amigos y familiares. Si eso sucedía, no podía esperar. 

{...}

—Me duelen los pies con estos tacones. Espera —hice que Chad, pare de caminar y me agarre de su hombro, para tener equilibrio y quitarme los tacones.

Ya era hora de irse, porque los novios ya se fueron. Y así, que todos debíamos irnos también.

Nash ya estaba en el auto, junto a su Iphone sonriente. Su sonrisa me encantaba, al igual que sus ojos. Amaba todo de él y no podría dejar de decirlo.

Justo como me dijo Christie cuando la visite;

Pasaría mi toda mi vida junto a él.

Y juro que nunca me cansaría de él, su sonrisa, sus ojos, sus buenos y malos chistes que hace cuando me encuentro mal.

Levantó su mirada y me observó, aún con su hermosa sonrisa.

Quiero pasar el resto de mi vida con él.