Chapter 6: Jongin
“Otra vez olía a sexo”
Jongin despertó con ese pensamiento, pero esta vez era él, no Kyungsoo, el que apestaba a sexo descontrolado. ¿Abría bebido otra vez? Pero él recordaba haberse acostado.
Kyungsoo aun dormía por lo que decidió darse una ducha. ¿Qué rayos le pasaba? No era la primera vez que le pasaba. Llevaba desde que había discutido con Kyungsoo despertándose con olor a sexo. Era sábado, por lo que pasarían todo el día juntos ya que no tenía planes.
Cuando salió con solo una toalla rodeándole la cintura y otra para secarse el pelo, se dejó caer en la cama y comenzó a frotarse en las puntas. Miró a Kyungsoo, que aun dormía y se sorprendió. ¿Tan cansado estaba?
Se puso los pantalones holgados y se acercó al mayor. Dormía de lado abrazando la almohada y se dio cuenta de que había un libro debajo de ella.
Era un libro de Psicología. Jongin lo cogió y fisgó en las páginas marcadas. Todas hablaban de desdoblamientos de personalidad durante el sueño.
Arqueó una ceja y dejó el libro sobre la mesita de noche que había al otro lado de la cama, pero un olor dulzón llegó hasta él, incluso podía lo palpar en el paladar. Se agachó apoyándose en él colchón de su amigo y hundió el rostro en su cuello.
¡Dios! ¿Desde cuándo su amigo olía tan bien? Siempre había pensado que era su pelo el que olía de forma dulzona gracias al champú. Pero se equivocaba, no era el champú, era la piel de su amigo.
Gruñó de puro placer y se dejó caer un poco sobre él para poder olerlo mejor. Sentía su cuerpo arder y como algo entre sus piernas reclamaba atención.
El cuerpo de Kyungsoo se tensó y Jongin se separó un poco temiendo que despertara, pero este solo rodó un poco hasta quedar boca arriba.
Jongin frunció el ceño, ¿qué era eso que tenía su amigo?
La camisa sin mangas que usaba modo pijama dejaba ver parte de su pecho que tenía zonas de color moradas, incluso en su cuello y en sus hombros habían pequeñas marcas de mordiscos y chupones.
Jongin se acercó con cuidado acariciando cada una de sus marcas, lo que hizo que el mayor se despertara y lo apartara de un empujón. Kyungsoo retrocedió hasta quedar sentado contra el respaldo de la cena.
-¿Qué… qué estabas haciendo?-preguntó asustado con los ojos muy abiertos.
Kay se incorporó quedando de rodillas sobre la cama.
-Nada, so… solo…-no sabía que decir, su compañero lo miraba confundido y con las mejillas encendidas de la vergüenza, ¿desde cuándo podía ser tan adorable? Tosió un poco aclarándose la garganta-¿Qué champo usas?- fue lo primero que preguntó.
-El mismo que tu- se defendió un poco más relajado.
-Y… ¿y por qué a mí no me deja ese olor tan dulce?- el menor hizo un puchero y se levantó de la cama.
Por un momento Kyungsoo suspiró, como si tuviera miedo de que Jongin hubiera visto las marcas. Y Jongin decidió hacer como si no las hubiera visto.
-Hyung ¿salimos a algún lado?- preguntó Jongin.
