Workout pt. I (Stucky)

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Bucky Barnes se encontraba en el campo deportivo de un club al que pertenecía, practicando ejercicios de saltabilidad. El castaño era un talentoso atleta, y se destacaba en mas de una disciplina.

Steve Rogers no podía evitar admirarlo y babearse ante el espectáculo que el otro estaba brindando, practicando saltos de rana que provocaban que sus pantaloncillos se subieran y marcaran sus curvas. Sin contar que mostraba unas piernas magníficamente fuertes. Por dios que mal lo ponía este hombre.

Cuando terminó, ambos se saludaron y fueron a buscar sus cosas.

-Que cuentas, Steve?

-No mucho, venia a retirar mis cosas.

-Oh, cierto. Oye, lamento que te hecharan del equipo de futbol.

-A mi no. No los soporto. Pero era mi única forma de acceder al gimnasio. Ahora voy a volver a ser un fofo.-suspiró apenado.

-No necesariamente. Yo no voy al gimnasio y aún así me ejercito... Y mi figura es muy buena no lo crees?- dijo Bucky bromeando, pero Steve se le quedó viendo el trasero y asintió.

-Podria entrenar contigo?- Se le escapó. De verdad ansiaba pasar más tiempo con el.

-Por supuesto. Que días puedes venir?- El rubio quería saltar de emoción.

-Quisiera evitar los jueves y sábados. No quiero encontrarme con los imbéciles de mis ex-compañeros.

-Oh, claro. Miércoles y viernes será... Quisieras contarme la razón de que te hayan expulsado.- Steve dudó unos momentos... Pero decidió confiar y decirle.

-Porque un hijo de puta dijo que lo acosé en la ducha.Y fue al revés. Sam descubrió que era gay y cuando estábamos saliendo del gimnasio se me tiró encima. Yo lo golpeé y le dije que no se le ocurra volver a tocarme, pero el fue con los entrenadores y dijo lo contrario. El equipo decidió creerle a él.- James le palmeó la espalda.

-Que horrible, amigo. Quizá no te conozca demasiado pero a Sam sí, y es un imbécil. No fue tu culpa.

-Gracias...

-¡Nos vemos el viernes!- dijo a modo de despedida. Steve correspondió y se fue a su casa con otro ánimo.

***

Cuando llegaron al campo a la hora acordada, estiraron juntos y se pusieron a entrar en calor. Steve estaba acostumbrado a correr dos o tres kilometros, pero James apenas le hizo correr uno. Pero luego continuaron con ejercicios de calentamiento que el rubio no conocía, y su poca flexibilidad no ayudaba. Cuestión que no podía hacer diez repeticiones sin perder el equilibro y flaquear. A Bucky le daba ternura, pero debían proseguir.

Luego de ejercicios de fuerza física; abdominales, sentadillas, flexiones y saltos, Bucky le mostró a Steve un nuevo elemento.

-Entonces qué dices que es esto?

-Un trineo. Ves el cinturón que prende de el? Pues te lo colocas y realizas una pasada arrastrandolo. Intenta levantar bien las rodillas, pisar con la media punta del pie y mover los brazos con amplitud. Estás listo?

Steve asintió y Bucky se puso a su lado. Se colocó el trineo y empezó a correr como le habían indicado. Su técnica de carrera era buena, pero el trineo era algo pesado, y cuando se llevó puesto una roca causó que el objeto frenara de golpe; desprendiendo el cinturón y haciendo al pobre Steve caer estrepitosamente.

Bucky se apuró a ayudarle aunque no pudiera contener su risa. Steve por poco no era un caso perdido. Una vez incorporados, trotaron unas vueltas más para aflojar y se retiraron a estirar.

-Que tan mal lo hice?

-Pues...Como corredor eres muy lindo. Y si te dedicas al modelaje?- el rubio sonrió y suspiró negando.

-Gracias por el no cumplido.

-De hecho intentaba coquetear.- Steve lo miró, sin creerlo.

-Te parezco lindo?

-Ay vamos, no te hagas el ingenuo. Eres atractivo y lo sabes.

-No tanto como tu, Buck. No podía dejar de mirarte cada vez que pasaba por aquí con alguna excusa tonta. Eres hipnóticamente hermoso...

-Ok ok, tu ganas nene. Me convenciste.

-Aguarda... ¿De qué?

-De tener una cita. Paso por ti hoy a las nueve, te parece?

-Em... Yo... -Que estaba soñando acaso? Se había golpeado tan fuerte y estaba imaginando todo?

-Pasa algo lindura?- El castaño lo sacó de su subconsciencia.

-No! Lo siento es solo que no me esperaba que tu... Pues.... Eso. Olvidalo, dame tu numero así te paso la dirección.

El otro sonrió y luego de ese intercambio se despidieron de forma amistosa, cosa que al rubio no le conformaba. Por lo que corrió a sus espaldas y le dio una nalgada antes de salir corriendo.

Bucky definitivamente se la iba a cobrar esa noche.

N/a: Debería continuar esto...?

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