De puerta a puerta

Tengo miedo

Hasta que al fin aparecen. - dice enojado.
-¿Qué haces aquí? ¿Dónde estás Nette? ¿Por qué no habías....
-Jacob.- grita Lena mientras salta para abrazarlo.-¿Qué haces aquí?- dice soltando a su hermano.
-Por ustedes.- me señala bruscamente y también a Dominic que se encontraba a mi espalda.- El mayor tema de controversia en New York.
-¿De qué estás hablando? - pregunta Dominic, con cara de preocupación.
-El día que sus padres decidieron repostularse como candidatos para la alcaldía, salen unas fotos de ustedes besándose en la playa, en tu revista.- vuelve a apuntarme con el dedo.- Sus padres me mandaron a buscarlos, ya que ninguno de usted contestan sus celulares o responden un maldito correo electrónico. Están en todas partes, no hay un medio de comunicación que no hable de usted, incluso los están llamando los modernos "Romeo y Julieta". Así que recojan sus cosas nos iremos para el aeropuerto en una hora.

Mi mundo se derrumbó en un minuto. Todo lo que me hacía feliz se iría por culpa de la política. Esa estúpida ambición que ha arruinado mi vida en más de una ocasión. Me vinieron cientos de preguntas a la cabeza, pero la que más retumbaba era...¿Qué pasará con mi relación con Dominic?
-¿Cómo consiguieron las fotos?- pregunta Kyle que no había participado en la conversación.
-No se sabe, Kyle. Y te aseguro que ese es el menor de los problemas.
-¿Cuándo...ha ocurrido este escándalo?- Lena suena angustiada.
-Hace dos días. Incluso salieron en las pantallas de Times Square.
-¿Quién es la Autora del artículo?- ya tengo alguien en mente.
-No lo sé, Katherine, solo sé que mi mejor amigo se está besando con alguien que es como mi hermana menor y que están afectando la política de la cuidad.
-Kat.- Dominic toca mi hombro.- Resolveremos todo cuando lleguemos a New York. Vamos a recoger nuestras cosas.

No le respondí solo me fui corriendo a nuestra a habitación. Todo esto había sido mi culpa. No debí enamorarme de Dominic, debí escuchar a mi cerebro y no a mi corazón, debí quedarme en mi zona de confort. Fui una estúpida, debí pensar en todas las posibilidades de que nos descubrieran, pero no, me tuve que enamorar del hijo del enemigo político de mi padre, el que una vez odie con todo mi ser y ahora, no se que será de mi vida.
Odiaba estar en la prensa, esa fue una de las razones que me alejé de mi familia. Ahora estoy en el centro del ojo público y me hacen llamar como una niña suicida que no supo apreciar su vida por un chico que ni siquiera conocía tan bien.

-¿Estás bien?
-Sí, Lena gracias por preguntar. - digo acomodando mis cosas en la maleta.
-Me iré con ustedes.
-No te atrevas. - No dejaría que ella no complete su trabajo por mi culpa. - Tienes que continuar con tu proyecto, sé qué harás un excelente trabajo, apuesto a ti.
-No quiero dejarte sola. - me abraza, aún estamos con los trajes de baño y el agua salada. - Sé que este tema te afecta mucho, incluso más que antes.
-Estaré bien, Dominic estará a mi lado hasta que vuelvas.- o al menos eso espero.    -Además este en un problema en que nos metimos los dos solos y ahora tenemos que resolverlo.
-Iré en una semana te lo prometo.
-Deja de abrazarme y ayúdame con mi maleta.
-Ve date un baño, yo termino esto.
Tomo unos jeans fuertes, un sweater, un par de medias y mis botas de frío .
Puede que en Dominicana esté caliente pero en New York la temperatura estará en sus bajas.

Tome una ducha rápida, mientras me desenredaba el pelo alguien tocó la puerta.
-¿Te falta mucho?- escucho a Dominic al otro lado de la puerta.
Tomo mis cosas y abro la puerta.
Me encuentro a Dominic con solo una toalla abrazada a sus caderas, estaba apoyado en el marco de la puerta, en sus ojos se podía percibir que no estaba feliz.
-Todo tuyo. - le pasó por el lado. Pero él no me permite salir, me toma del brazo delicadamente y me besa la frente.
-Saldremos de esta, tranquila. - me suelta y entra al baño cerrando la puerta al momento de yo salir.

Lena ya no estaba, mi maleta estaba cerrada, con mi mochila al lado. Ví que Dominic tenía todas sus cosas listas. Solo era cuestión de que saliera del baño para irnos y acabar con estas hermosas vacaciones, para volver al infierno que llamo vida, pero ahora, todo será peor.