In the new world. [Rick Grimes Y Tu]

Capitulo 7.

Subí al techo, Rick siempre se apartaba del grupo a hablar por su radio, me acerqué con lentitud y él noto mi presencia, lo abracé por la espalda, apoyé mi cabeza en su hombro y luego deje suaves masajes en estos, Rick soltaba pequeños jadeos al contacto que le estaba dando. Le dejé un beso en el cuello y me levanté.

-No- Rick tomó mi mano antes de irme-, no pares... quédate un momento-, volví a los masajes y a los besos cortos-. Necesito más momentos así contigo.

-Tal vez no son tiempos para tener una amante- Rick y yo soltamos una risa, el sheriff se dio la vuelta y me empujo hasta el suelo quedando él arriba mío sin aplastarme, dejaba suaves pero largos besos en mis labios-. Yo tambien te quiero- Rick sonrió y se levantó, imite su acción pero él tomo mi cintura para darme otro beso, sonreí-. Si, te quiero.

-No quiero separarme otro segundo de ti.

-Si sabes que te engaña con Shane, ¿por que no cortas esto de raíz?

-Porque tengo un hijo pequeño que...no lo entendería.

-Bien, debemos irnos.

-¿Vendrás conmigo?

-No, iré con Daryl.

-Ven conmigo- me abrazó por la espalda y caminamos así hasta la salida-, bien, solo tengan cuidado.

Íbamos manejando por entre los autos los espacios eran reducidos pero podiamos intentar, una pequeña explosión se escuchó de la caravana de Dale haciendo que pararamos. Bajé de la moto y miré a Rick a través del humo el cuál llego al instante a mi lado.

-Bueno si no encuentras un repuesto aquí al menos habrán otras cosas.

-Podemos sacar el combustible de los autos, incluso hacerlos funcionar.

-Quizás algo de agua...

-O comida.

-Esto es un cementerio- todos miramos a Lori-, no me gusta mucho esto.

-Nos iremos pronto, pero ahora debemos buscar lo que necesitamos.

-___ ayúdame a sacar gasolina- miré a T-Dog con una sonrisa-, ¿qué?

-¿Por qué asumes que yo sé hacerlo?

-Yo lo haré- Daryl me dio una palmada en la cabeza-, inútil.

Comencé a revisar los autos, escuché pasos cerca mío, saqué mi revólver y quité el seguro, la levanté levemente al ver a alguien cerca y cuándo salió detrás del coche que nos separaba pude notar a Rick.

-¿Vas a dispararme?

-Solo si te mordieron- Rick sonrió y negó levemente con la cabeza, me acerqué a él y lo abracé, me separé de golpe-. Oh, mierda.

-¿Qué pasa?- Rick siguió mi mirada y vió la horda de caminantes ya encima de nosotros-. Corre.

Seguí la orden y avise al grupo que se metieran bajo los autos y ellos lo hicieron al instante. Rick tomó mi mano y me metió debajo de un camión junto a él.

-No veo a Daryl.

-Tranquila...

Ví a Carl y Sophia, el miedo se notaba en sus miradas nerviosas Rick les hacía señas para que guarden la calma. La horda parecía haber pasado por completo y solté un pequeño suspiro, Rick apretó suavemente mi mano para luego soltarla y tomar su arma. Salimos lentamente de los vehículos. Ví a Daryl a lo lejos y sonreí.

-Debemos movernos, este lugar no es seguro.

-¿Si, ___?- dijo Shane-, ¿y cómo vamos a movernos? Los autos no se reparan en dos minutos.

-Hagan lo que quieran, yo no me quedaré aquí.

-Si ella se va tambien debo hacerlo yo.

-No tienes que hacerlo Daryl, puedo cuidarme sola.

-Nadie se irá- miré a Rick el cuál tenía un semblante serio y tenso-. No te irás, __.

-Tengo una amiga, Maggie. No está muy lejos podemos ir y ver si continúan ahí.

-¿Y si no es así?- pregunto Shane.

-Entonces volveremos y reparamos los putos vehículos, hasta entonces, si quieren venir conmigo, pueden mover las piernas y seguirme.

Me adentré al bosque y a los segundos sentí las voces y pasos de todo el grupo. Rick se acercó a mi colocándose a mi lado, solté un suspiro luego de caminar kilómetros en silencio.

-Sé que algo te molesta, dilo ya Rick.

-¿Qué paso?, esa idea de irte ¿de dónde salió?

-Rick, mi mejor amiga vive a dos kilómetros de dónde nos encontramos, quiero llegar, verla y abrazarla. Pueden darnos un lugar en la granja, alimento, agua, medicamentos, lo que sea.

-¡Un ciervo!- seguí la mirada de Carl y efectivamente estaba el animal, Rick le sonrió-, ¿puedo?

Lori y Rick asintieron y el chico se acercaba lentamente al ciervo, todos mirabamos quietos y en silencio. Hasta que solo se escuchó el sonido del disparo y la bala que atravesó al ciervo y se quedó en Carl, el silencio se volvieron gritos y la falta de movimiento se volvieron corridas.