In the new world. [Rick Grimes Y Tu]

Capítulo 23.

Abrí los ojos y me di cuenta que Rick estaba sentado al borde de la cama atando los cordones de sus zapatos.

—¿Ya te vas?

—Si, en unos minutos.

—Repíteme porqué no puedo ir.

—Iremos Daryl, Hershel y yo. Hershel estará más seguro con nosotros y aquí estarán de la misma manera si te quedas.

—¿Qué pasa si las cosas se ponen feas con el Gobernador, te ataca, Daryl va a ayudarte pero por su descuido, atacan a Hershel? Dime.

—Es poco probable.

—Hay un 90% de probabilidades de que pase, Rick.

—Entonces dime que pasara si, nadie va a estar esperándome en la dirección dada y solo me quieren sacar a mi y a los más fuertes para luego atacar la prisión sin que tengan ordenes de un líder.

—En ese caso sería tu culpa— Rick me miró—, porque habrías caído en su trampa y nos habrás puesto en peligro. Déjame ir contigo.

—Ya hablamos de esto anoche, __.

—Me dijiste lo mismo que ahora.

—Porque mi decisión sigue igual.

—Rick— él me miró por primera vez en la conversación—. Cada vez que sales me pregunto si hoy es el día en que volverán sin ti, y me paso todo el día pensando en si volveré a verte, lo entiendes?

—Después de lo que ese hombre le hizo a Maggie— hizo una pausa al darse cuenta que desviaba mi mirada, tomó mi rostro en sus manos—. Después de eso, no quiero siquiera que sapa que existes, __.

—Lo sabrá en algún momento, no importa si me quedo con Hershel o a 3 metros de distancia, necesito estar contigo.

Rick resoplo agotado y ladeo la cabeza pensando en que decir, tomé sus manos, me dio un beso muy suave.

—Está bien, pero vas a quedarte conmigo en todo momento, si?— asentí—. Si te mira de una forma que no me gusta, voy a matarlo.

...

Rick bajo del auto, lo seguí, Daryl nos hacía señas por donde ir, Rick entró en el lugar donde se haría la reunión, le saco el seguro a su revólver y yo hice lo mismo con el mío, me hizo una seña para que entrará. Vimos al Gobernador salir, Rick puso una mano en mi cintura y me puso detrás de él en un intento de protegerme.

—No sabía que tenías compañía— dijo el hombre—, tenemos mucho de que hablar.

—Usted nos atacó, eso lo dejo todo claro.

—Quería dejarlo muy claro, pude matarlos y no lo hice.

—Y aquí estamos.

Hizo un movimiento para sacar su arma, Rick y yo le apuntamos, él levantó las manos.

—Voy a dejar mi arma, para demostrar que vengo en paz, y me gustaría que hicieran lo mismo, puedo?— se saco el cinturón con las armas y lo dejo lejos, baje mi arma—. ¿Ves? Sin trucos, ahora tu— Rick le saco el seguro y la guardo—. Bien, como quieras.

La puerta se abrió y entró Andrea.

—¿Qué ocurre aquí?

—Nada. Tus amigos no son muy habladores.

—Si quiere hablar, hable.

—Ha muerto demasiada gente sin motivo— dijo Andrea—, hay que solucionarlo, ocupemonos de las verdaderas amenazas. Podemos resolverlo, por eso les pedí que vinieran.