In the new world. [Rick Grimes Y Tu]

Capítulo 40.

—Iremos por la 23, hasta allí nos dirás como llegar.

—Es...no sé cómo decirlo, es una mala idea, despejamos la 16, llegaremos antes.

—Tomaremos la 23, al anochecer.

—¿Lo haremos de noche?

—Sé que es peligroso— me respondió Rick—, pero es mejor que llegar al lugar durante el día, si no es seguro tendremos que huir antes de que nos vean.

—Nadie va a hacerles daño— dijo Aaron—, intentas proteger a tu grupo pero los pones en riesgo.

—Dime cuál es la ubicación y salimos ahora— Aarón negó, solté un resoplo—, será una noche larga, descansen si pueden, sobretodo tú— me señalo—. Te quedaste haciendo guardia, necesitas fuerzas.

Asentí sin ánimos, no iba a descansar, mucho menos dormir, la situación no me lo iba a permitir, ví a Rick salir, Michonne le siguió. Miré a Aarón y me acerqué a él.

—¿Por qué no le quieres decir dónde esta tu comunidad?

—No sé lo que puedan hacer ustedes, sin mi, no irán.

—Me alegra que lo sepas.

—¿Qué cosa?

—Que no se puede confiar en nadie. La confianza es un elemento que solo se entrega a algunas personas, ha sido así desde el inicio de los tiempos, pero en este período, la confianza es nula.

—¿En cuántos de tu grupo confías?

Di una vista rápida a mi grupo y luego volví la mirada al chico frente a mi.

—Yo no confío ni en mi propia sombra.

—¿Daryl? ¿Rick? ¿Glenn? Tal vez Maggie...¿confías en ellos?

Miré en otra dirección, y tomé aire.

—¿Y si estuviéramos en una situación extrema? Glenn y yo estamos rodeados de caminantes y él decide que para librarse tiene que dar mi vida...

—No lo haría.

—¿Cómo lo sabes?

—No lo sé.

—Yo tampoco...así que no puedo confiar al 100% en nadie.

—¿Y si te arriesgases un poco?

—Me estoy arriesgando, me arriesgo con los que nombraste y con todo el resto del grupo, pero me arriesgo contigo también.

—No te arrepentirás.

—Tal vez si. Mírame— él observó mis ojos con más detalle que antes—. ¿Acaso me parezco a las mujeres de tu comunidad? Dijiste que les hacia falta gente como nosotros, ¿acaso el centro de madres me aceptara para dar mi reporte diario de Carl y Judith aunque los niños no sean míos?

—Si, lo harán, podrás conocer gente, tener nuevos amigos, una casa, podrías ser feliz— baje la cabeza y pase mi lengua por mis labios—. ¿Quieres contarme un momento feliz de tu vida?

—¿Un momento feliz? Mi vida no fue muy feliz que digamos— Aarón sonrió, me puse a pensar—. Hice reír a Carl.

—No, un momento tuyo, __.

—Cuándo era niña encontré una ficha, para las máquinas de videojuegos retro que habían en una tienda famosa de Atlanta, fui allí y gaste mi única ficha en un juego de autos de carrera súper violento— Aarón soltó una ligera risa, llamando la atención de mi grupo—. El chico a mi lado tecleaba los botones como un loco, mi felicidad empezó cuando encontré la ficha, cuando jugué algo por primera vez y cuando gané mi primer juego. El chico dijo "genial, es un juego difícil, felicidades." En su pantalla marcaba el "game over." Me pregunto si tenía más fichas, él se presentó como Thomas aunque todos le decían Tommy, y él me dio muchas fichas, jugamos toda la tarde, y jamás nos separamos, luego conocimos a Glenn... Daryl nos llamo el equipo dinamita.