Capítulo 15- Confesión.

894 18 2
                                    

Al despertar, miré a Justin con los párpados cerrados y respirando pesadamente en la cama. Las sábanas resaltaban una media erección que sobresalía de su entrepierna y sus miembros estaban totalmente relajados. Hace tanto que no dormía con alguien desde... Wade. 

Justin respiró pesadamente y me dio la espalda. Joder, que espalda tenía el muy hijo de puta. Me levanté mirando al mar. Las vistas eran espectaculares. 

Me cubrí con las calientes sábanas de Justin. Mientras observaba mis uñas recorrer la espalda de Justin, él habló. 

-No me hagas cosquillas, joder. 

Reí y él se giró. No sabéis lo que es perfección si no habéis visto a Justin con el pelo despeinado, los ojos entrecerrados, la voz ronca y sin camiseta. 

-______ -empezó-. ¿Te he hecho daño? 

Sabía que no estaba de broma por el semblante serio y la mirada dura e implacable. Reí al recordar su cara cuando su amigo salió de mi coño. 

-No -dije risueña-. Ha sido divertido. 
-¿Divertido? -su cara se desencajó por la sorpresa-. Osea que... Yo tengo que lidiar toda la vida con esto y a ti, te parece gracioso. 
-No... No... -joder, siempre meto la pata. 
-Joder ______, joder -escupió levantándose. 
-Justin... -dije suavemente. 
-Yo odio esta condición, te puedo asegurar que lo que hicimos en la madrugada no lo recuerdo. Solo por partes y... Es estresante tener lagunas mentales con algo tan... Tan... 
-¿Delicioso? -intenté ayudarlo. 
-Importante -impuso él mirándome con los ojos severos-. No me acordaré de la noche que haga el amor con mi esposa y procree a mi hijo. 

Vaya... Justin Bieber tenía planes de vida. 

-Es horrible, _____, horrible. ¿Y a ti te parece 'divertido'? 
-No quise decir eso... Quería decir que... 

Me interrumpió pasando a mi lado y empujando mi pobre cuerpo desnudo contra la pared. 

-Necesito una raya -masculló dirigiéndose a su chaqueta. De ahí sacó una pequeña bolsita con algo blanco dentro... Polvo tal vez. 

Ahí lo comprendí todo. 

-Y una mierda -sentencié mientras corría y se la arrebataba de las manos rezando para que no se rompiera. 

Empecé a correr desnuda por toda la cabaña hasta que llegué al baño. Ya ahí, vacié todo el contenido de la bolsa en el inodoro, tiré de la cadena y desaparecí la bolsa. 

Justin parecía un toro a punto de atacar... O mejor, un precioso León desnudo con ojazos mieles a punto de atacar. Gruñó mirando mis manos vacías. 

-Ya sabes, el trato -justifiqué mis actos. 
-Serás... -se acercó peligrosamente. 
-¿Qué? -lo reté-. Prometiste cumplir un trato. Me acosté contigo por eso, así que a mi no me vengas con cuentos chinos porque te... 

Me interrumpió besando mi cuello con suavidad. 

-Porque te voy a... -gemí-. Ya verás que te... 
-Shhh -siseó-. Recuerda la otra parte del trato. 
-Yo no quería decir que era divertida tu condición... Lo que quería decir es que, oh joder -gemí cuando succionó mi cuello-. Que... Eres bueno en la cama, superaste mis expectativas y mis... ¡Ay! -chillé. 

Justin tomó mi cuerpo y lo subió a la encimera del baño. Tomé todo el aire que pude teniendo en cuenta su olor y sus perfectos labios besando mi cuello con esmero. 

-¡Ah, no! -me quejé cuando metió uno de sus poderosos dedos dentro de mi. 
-¿Te duele? -preguntó apartando el dedo y mirando mis ojos. 
-Sí... Bueno, no. Es solo incómodo, no estoy húmeda ni lubricada. 

Adicta al sexo (Justin y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora