—Mami, ¿está muerto?— pregunta Oliver curioso, pero preocupado.
—Claro que no, Oli. Él sólo está durmiendo.— respondo con fingida tranquilidad.
Dievs lleva tres días inconsciente. Reacciona de a momentos, pero sólo balbucea incoherencias, gruñe o susurra mi nombre.
Estoy agotado, mover a Dievs fue trabajo pesado, si estuviera en su forma humana sería más sencillo, pero parece no tener intenciones de cambiar. Logré llevarlo hasta la orilla de un pequeño lago, mis brazos y piernas quedaron adormecidas.
Oliver cayó dormido de agotamiento también.—Mami, tengo hambre.— dice al mismo tiempo que su estómago gruñe.
Sonrío divertido y lo cargo en mis brazos, mi bebé está mas grande.
—Iré a buscar algo, tendrás que quedarte a...—¡No!& grita interrumpiendo.
—No, mami... No.— comienza a llorar.—Tranquilo, cariño. No te dejaré solo de nuevo.— digo con calma.
—Recuerda, siempre estaré contigo.— susurro besando su frente.—Voy con mami.— dice más tranquilo, abrazando con más fuerza mi cuello.
Oliver no ha querido separarse de mí en ningún momento.
Suspiro y comienzo a caminar hacia el interior de aquel bosque, Dievs duerme profundamente, no sucederá nada, volveremos rápido.Miro donde está dormido y aprieto más a Oliver, tengo que cuidar a mi bebé aunque esté sensible y no quiera separarme de mi Alfa.
No puedo ni quiero hacer sentir mal a Oliver.Caminamos unos minutos y encontramos un gran árbol con frutos, son muy dulces y deliciosos. Los hemos estado comiendo durante estos días, los recolectaba cuando Oliver dormía.
—No quiero eso.— dice arrugando su nariz.
—Neithan cazaba, Mami también caza.Oliver se acostumbró a comer carne, los lobos cazaban y le daban eso, pero yo no puedo cazar. Hago un gesto de disgusto al pensar en aquella acción.
—Oli, ya lo hablamos.— suspiro bajándolo.
—Realmente no puedo.—No, mami, no quiero.— se queja.
Lo observo y me mira suplicante.
—Está bien, vamos a intentarlo.Salta feliz y cambia a su lado lobo.
No creo que sea tan difícil.
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.~Me rindo.~ murmuro más que agotado y respiro hondo para calmarme un poco.
No logre cazar nada. No puedo, no puedo lastimar a nadie.
~Lo siento, Oli. Soy un inútil, no pude atrapar nada para tí.~ me recuesto sobre la hierba y siento una presión en mi pecho.
~No llores, mami. Oli comerá las frutas.~ dice ansioso, dándome unos golpecitos con su cabeza.
~Omega.
Me levanto de golpe y coloco a Oliver detrás de mí.
~¿Quienes...?
No se acerquen.~ gruño.Frente a nosotros se encuentran tres tigres Alfas, dos mujeres y un hombre.
~Tranquilo, no queremos hacerles daño.~ habla con rapidez una de las Alfas.
~Los idiotas que vigilaban a Dievs, llegaron a nuestra manada pidiendo ayuda.~ otra Alfa habla mientras se acerca.
~Par de imbéciles, no sé que les tomó tanto tiempo.~ murmura.~No se acerquen.~ pido temblando. No me siento seguro, Dievs no está consciente y Oliver está hecho bolita detrás mío.
~Aquellos insensibles te dejaron solo, aún sabiendo el estado de Dievs. Vinimos a ayudarte. Camino aquí, nos encontramos con dos lobos.~ la Alfa se acerca otro poco, despacio y un poco agachada.
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Dᴇsᴛɪɴᴏ. ·Segunda Parte·
Fantasy2do. Libro de la saga "Destino" ----------------- Oliver y Dievs quedan devastados por la muerte de Ethan. El Alfa se encuentra sumergido en la tristeza y desolación, sin percatarse de los cambios que ocasiona en el mundo. La inesperada visita de un...