Perder al amor de tu vida, te quiebra por completo...
Lo único que me mantiene de pie, es mi hija...
Pero ella acaba de llegar a mi vida a hacerme dudar y acabar con la poca cordura que me queda...
Necesito eliminar estos sentimientos, que me están...
El vestido de seda blanco cae sobre todo mi cuerpo hasta la punta de mis pies, mientras frente a mí se encuentran diferentes joyas de oro con piedras preciosas de diversos colores, me voy colocando una por una, los brazaletes de oro completamente liso, la gargantilla con cristales azules y el anillo con un cristal completamente negro. Comienzo a peinar mi cabello y coloco pequeñas flores blancas en él, mientras lágrimas comienzan a caer por mis mejillas. Después de terminar me colocó una especie de caperuza negra, parecida a la de los Volturis.
- Lo lamento Edward...- digo cayendo al piso y comenzando a llorar con desesperación.
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Edward...
El festival de la luna roja está por comenzar, ya que el atardecer está bastante cerca.
Las calles están llenas de personas con caperuzas de un rojo intenso, los edificios y casas decorados con adornos rojos, dorados y negros, mientras que hay secciones de las calles pintadas completamente de un rojo carmesí.
- Ponte esto- dice Alice apareciendo frente a mí con una caperuza igual a la que tiene el resto de la gente, muy parecida a la de los Volturis.
- Estás bromeando ¿cierto?- digo rogando que ojalá este bromeando.
- ¿Qué?, No mira Jacob, Matteo, Jasper y yo ya traemos la nuestra.
- Alice, no...
- Tenemos que mezclarnos con la gente, además que nos protegera del sol y no estaríamos escondidos como lo hacemos ahora- dice Alice mirándome con cara de pocos amigos, y logrando que al final acepte.
Después de caminar por unos minutos, entre toda la multitud, tratando de no llamar mucho la atención, Jacob comienza a hablar.
- Los Volturis deben estar por algún lugar, ellos nunca se pierden este festival, tenemos que encontrarlos antes de que la luna se ponga.
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- Ojalá y tengas razón...- digo mientras sigo caminando, pero al hacerlo una persona llama mi atención, la cual se encuentra caminando en medio de la multitud, y está cubierta con una caperuza negra, y es la única de esa manera en toda la plaza.
Comienzo a caminar con rapidez, mientras los demás me siguen el paso, evitó chocar con la gente, lo cual es un tanto imposible, hasta lograr estar detrás de la chica de la capa negra, la tomo de la mano y esta gira inmediatamente.
- Edward... - mis ojos comienzan a cristalizarse y mi cuerpo a calentarse, por el enojo.
- Bella... No puedo creerlo, intentas engañarnos...- digo tomandola de la mano y llevándola hasta un callejón.
- Edward no sé de qué hablas... Yo solo vine a disfrutar del festi...
- Cállate!! Deja de mentir Bella!! - digo mientras tomo su cuello con fuerza y Alice y los demás aparecen detrás de mí.
