VIXEN; SPIDERMAN VOL.1

LI

—Harper, puedes confiar en mí, no le diré a nadie —dijo Peter tomando la mano de su novia. Ella suspiró y asintió confiando al cien por ciento en la palabra de Benjamin.
—Recuerdas las teorías que tenemos sobre mi pasado —Peter asintió— Anne no es mi madre.
—¿Qué? Wow ¿Cómo estás segura?
—El día que nos castigaron, volví a casa y la escuché hablando con... —no podría decir Wanda, no hasta saber quién era ella y que era lo que hacía esa tarde ahí— con mi prima.
—Tu supuesta prima.
—Si, estaban hablando y de todo lo que escuché lo único que no he podido olvidar es que mi vida es una mentira y que algo malo iba a pasar si descubría todo.
—¿Todo de qué?
—La verdad, Peter. Mi pasado, quien soy. Todo lo que ha sido mentira.
—¿Y estás segura?
—Totalmente —Harper suspiró— ya no puedo confiar en nadie.

Aquello le lastimó un poco a Peter.

—Solo en mis amigos, ellos no tienen nada que ver con mi pasado... Por eso te estoy confiando esto Peter, eres el único que puede ayudarme.
—¿En qué?
—En lo que me voy a convertir.

Harper le estaba abriendo su corazón a Peter, y quizás era el momento para que él también abra su corazón y le confiese a alguien lo que le ha estado pasando.

—Tambien te quiero contar algo —Harper asintió— desde el día que fuimos al recorrido en Osborn me ha estado pasando algo.
—¿Y qué es?
—Una araña me mordió y comencé a sentir cosas raras.
—Como que no eres normal, ¿verdad?
—Si, y tengo miedo a contárselo a alguien... También confío en ti Harper y quiero que tú sólo sepas esto.

Harper asintió y tomó la mano de Peter dándole un leve apretón a esta, el cataño sonrió y se acercó a Harper para besar sus labios en un beso tímido y dulce.

Harper estaba acostada en su cama, con Peter a su lado quien quiso hacerle compañía para que ella no se sintiera sola ni incómoda, estando en la casa de la misma persona que finge ser alguien que no es.

—¿Te imaginas que fuéramos héroes? —dijo Peter.
—Apenas somos unos adolescentes, ¿cómo vamos a defender a las personas si apenas nos defendemos en la escuela?
—Bueno, tu siempre eres la que me defiendes, ya eres mi heroína.

Harper se sonrojó.

—¿Pero no te imaginas como héroes? Tú con tus poderes y yo con los míos. Una pareja de héroes.
—Suena tentador, ¿que nombre usarías tu?
—El otro día estuve pensando en uno, si me mordió una araña radioactiva, pensé en algo como La Araña Humana.
—¿Qué? —Harper soltó una gran carcajada.
—Que tiene de malo.
—Suena extraño, ¿quien quisiera ser salvado por alguien llamado la Araña Humana?
—Haber, tu muy buena con los nombres, ¿que nombre me darías?

Harper pensó unos segundos hasta que el nombre perfecto llegó a su mente.

—El Hombre Araña.
—Suena genial —Peter soño despierto imaginando el ser un héroe— ¿y tú?
—Aun no lo sé.
—¿Que tal tigresa?
—No, eso no. Tiene que ser algo que le guste a las personas.
—Si, así como Hombre Araña.
—Ay, ya te la acabas con ese nombre —ambos rieron.

Harper se quedó unos segundos pensando en cuál sería el nombre que usaría si fuera una heroína.

Hasta que recordó las palabras de uno de los hombres que contribuyeron a su desarrollo.

Demos inicio al proyecto VIXEN.

—¡Ya sé! —Peter se asustó cuando su novia alzó la voz— que tal Vixen.
—¿Zorra en inglés?
—Si, me gusta como suena Vixen, además es un animal.
—Vixen y el Hombre Araña, suena bien.

Y ahí, en esa habitación acostados en la cama, comenzaba la historia de dos héroes de secundaria.