El resto de la tarde fue incómoda.
Betty trato de aligerar el ambiente pero se veía que ella también se sentía dolida por lo que sus esfuerzos fueron en vano. Pase la tarde en mi computador encerrado en la habitación y Betty también estaba ahí en la habitación y de vez en cuando salía a verme.
Finalmente era hora de ir a la cama. Me acosté de espaldas a ella y pude sentir como se giraba a verme, tocó mi hombro pero la ignore ni quería verla ahora mismo. Ella volvió a tocar mi hombro pero como no respondí se dio la vuelta de nuevo.
- Deberíamos hablar - Dijo
Me quedé en silencio. No sabía que tenía que decirme y no sabía si yo podría controlarme.
- Deja de ignorarme, así no se solucionaran las cosas - Dijo.
Seguí en silencio, esperando que dijera algo imposible. Me gire. El silencio reino por todo el cuarto hasta que ella suspiró.
- Creí que eras tú - Murmuro
- Es una excusa muy pobre. - Respondí de mala gana
- Él tenía tu gorro, yo me fui a buscarte pero no estabas por ningún lado, luego vi tu gorro y me acerque y te besé. Pero no eras tú.
-¿Por que el tendría mi gorro?
- Tu se lo diste
- Eso no tiene sentido.
Ella se levanto y fue a buscar algo en el clóset.
- ¿Que haces? - Le pregunté enojado.
- Saldré a caminar.
- Pero estamos hablando.
- Creo que nos vendría bien un tiempo a solas. - Dijo y se fue.
Me deje caer en la cama con fuerza y respire profundamente. Dejaría que se fuera, todo iba a estar bien ¿No? Digo una relación es entre dos y si no es así entonces no vale la pena que me vaya a buscarla. Esto era un desastre, pero solo podríamos solucionar juntos.
Lo único que sé escuchaba era el ruido de los carros afuera y los pasos en el pasillos que iban y venían. El timbre de mi teléfono los opaco.
- Hola hermanita - Digo.
- Hola.
- ¿Como va todo? Ayer no hablamos.
- No muy bien - Le digo levantándome y caminando hacia la venta.
- ¿Que pasa?¿Estan bien?
- Nada, solo peleamos. Eso es todo.
-¿Que paso? - Pregunto con real interés.
- Nada, solo una discusión tonta. No debí decirte nada. No es nada.
- Jughead, puedes decirme.
- No te preocupes.
- Si no me dirás nada será mejor que me llames cuando se arreglen las cosas. Porque a van a arreglar.
- Te llamo después - Digo y cuelgo sin esperar una respuesta.
Me pongo mi abrigo, yo también debería salir un momento. Tal vez ir a reina a tomar aire. Me monto en el elevador y marco el último piso, mi mente me devuelve a esa noche en el mirador, por un dulce y fugaz momento antes de que Jack vuelva a mi mente.
Idiota.
Salgo a la azotea y me recargo en la baranda mas cercana a la puerta. Me giro y encuentro a Betty de espaldas a mi en el otro lado de la azotea. Cómo si me sintiera ella se gira hacia mi y me mira fijamente con los ojos llorosos y la nariz roja.
— Lo siento. Lo siento mucho. Por favor no te vayas. Por favor perdóname.
Ella corre hacia mi y me abraza, sigue llorando contra mi y yo me quedo petrificado observando la. La rodeó con mis brazos y me aferró más a ella.
- Perdon - murmura una y otra vez.
Nos acercamos todo lo que nos es posible hasta que ella deja de llorar, le doy en beso en la cabeza y siento como el nudo en mi pecho desaparece.
Ella sube la cabeza y me ve a los ojos, puedo ver el miedo reflejado en ellos y el reflejo de mi propio miedo también se puede percibir.
- Por favor no te vayas - Repite.
- No iré a ningún lado.
Y con esas simples palabras todo dentro de ella parece estar en calma. Pero aún puedo sentir sus nervios, sus brazos firmemente se aferran mi y sua ojos brillan.
Nos quedamos en la azotea mirándonos como si el tiempo no pasará, unas pocas palabras que trata de explicarlo todo salen torpemente de nuestras bocas de forma totalmente inecesaria, porque no hay palabras que describan todo lo que sentimos en este momento y porque jamás habiamos sido tan sinceros como lo somos ahora mismo.
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Obligados Al Amor(Actualizando)
RomanceDos familias, un contrató que unirá a las familias, una chica obstinada con el corazón roto, un chico testarudo que no aceptará la situación con facilidad. Ninguno puede romper el contrato, ambos estarán obligados a convivir juntos sin importar su p...