Obligados Al Amor(Actualizando)

33

La casa es un desastre, y solo llevamos una semana acá.

No hemos terminado de desempacar y cada vez que buscamos nuestras cosas entre las cajas las cosas solo empeoran. En verdad creo que nuestra familia si nos daría tiempo para acomodarnos, pero parece que un día fue suficiente tiempo para ellos y ya nos están llenando de clases y tareas para que estemos listos para el nuevo gobierno.

Quisiera tener tiempo para asegurarme que el sur este bien, pero tengo que confiar en mis padres y seguir a los cooper en todo lo que nos dicen, a pesar de que tenemos encargados para cada tarea quieren que aprendamos y seamos capaces de hacernos cargo de cada una de estas, aunque probablemente jamás necesitemos hacerlo.

Es bastante agotador, pensé que sería algo así como ser líder en el sur, pero nunca tome en cuenta las responsabilidades que él sur le delego al norte o que ellos mismos tomaron la libertad de encargarse. Además el sur es considerablemente más pequeño y nuestra población es más unida.

Y si a mi me a tocado duro a Betty aún más, pues el anuncio de que un sureño estaría a cargo de todo el pueblo no a sido del agrado público asi que Hall se encarga de mejorar mi imagen pública. Básicamente me hace propaganda en su periódico y me enseña cómo se hacen las cosas de este lado de la ciudad.

Betty está en casa para cuando llegó y se ríe al verme.

- ¿Que llevas puesto? - Me pregunta.

- Esto - Le digo señalando los pantalones cafés y la camisa polo blanca. - Nada, solo mi traje para las charlas informales.

- Tu gorro no combina.

Se acerca a mí y me lo quita, últimamente no lo uso tanto como antes, solo en las situaciones que más me abruman y están todo el día siendo juzgando por los del norte para ver si soy i no un buen gobernante es la número uno en mi lista.

- Jamás espere verte usar eso.

- Yo tampoco.

- Pero tengo buenas noticias. Mis padres saldrán con los Lodge a una cita de negocios y no estamos invitados.

Me tiró en el sofá dramáticamente, parece que Alfin tendremos un descanso.

- Tendremos tiempo de arreglar la casa.

Agh, ya estoy arto de esto. Las responsabilidades son infinitas a partir de ahora.

- ¿No podemos pagarle a alguien para que lo haga?

- No, es nuestra casa.

- Y nuestro dinero.

- Nosotros podemos hacerlo. Levántate.

Ella se acerca a mí y me extiende las manos yo la jalo hacia mi y la abrazo, ella recuesta su barbilla en mi pecho y me mira fijamente.

- Esto no durará mucho, en unas semanas nos acostumbraremos a este ritmo y luego las cosas se calmaran.

- ¿Semanas? Tengo un mejor plan. Te voy a secuestrar y nos iremos muy muy lejos. Solos.

Ella se ríe y me abraza. Se que también le gustaría poder hacerlo, pero jamás dejaría a su familia.

- Hoy deberíamos comer algo que no sea pizza.

- Estoy de acuerdo. Que te parece si nos cambiamos y vamos a pop's.

Ella asiente e intenta levantarse pero yo la retengo entre mis brazos.

- Pero primero.

La traigo así mi y la besó.

- Mejor vayamos mañana - Me propone.

Yo asiento y sonrió, la casa está en completo silencio y sin siquiera pensarlo sonrió.

- Te amo - Le digo.

Ella me mira en silencio por un segundo y me mira asombrada.

- Juggy - Sonríe y acerca su cabeza a mi pecho. - Yo también te amo.

Ella también me ama.

¿Cuando me enamoré tanto de ella?

Cierro los ojos. No necesito nada más, la sostengo con fuerza en mis brazos y miro todo lo que me rodea, este es mi hogar.