Citrus - Llegar a ti

Soy Aihara Mei

ACADEMIA AIHARA

Maruta: Directora, aquí están los reportes del presupuesto para la excursión.

Mei: Déjalos aquí por favor. Gracias.

Soy Aihara Mei, a mis 25 años creo que soy la mujer más feliz del mundo. Algunos dice que me casé muy joven, podría ser verdad, pero no me arrepiento, mi esposa me ama con locura y de igual manera yo la amo a ella. Llevamos 3 años de matrimonio y tenemos una hija y vivimos es una hermosa casa con un hermoso jardín. Masao es mi amado sobrino y tambien hijo de Yuzu, bueno, luego de nuestra boda, soy técnicamente su madrastra, pero prefiero que siga llamándome "Tita". Él tiene ya 6 años, el tiempo pasa volando, ha crecido mucho, ya no puedo cargarlo como antes, aunque sigue subiéndose sobre mis piernas para que lo consienta, al igual que lo hace con Yuzu y Allen.

Hablando de Allen, el se ha dedicado a ser un buen padre y a su trabajo. Yuzu algunas veces ha tocado el tema con el, le ha dicho que tal vez podría intentar enamorase otra vez, pero el siempre responde que la única mujer para el ya se ha ido de este mundo.

Aunque suene absurdo y un poco raro, Allen vive con nosotras. Nuestra nueva casa tiene varias habitaciones así que luego de sentarnos juntos a hablar sobre el tema, decidimos que nuestra prioridad sería Masao, pues no queríamos que el tuviera que vivir la vida de un niño con padres divorciados, someterlo a ir de un lado para otro para poder ver a sus padres es algo a lo que simplemente nos negamos. Mamá y Papá se quedaron en el apartamento, pero estuvieron de acuerdo en que Allen viviera con nosotras, Papá sobre todo, parecía contento de que no estuviéramos solas.

Las habitaciones están bastante separadas, así que no es un problema.

Masao aún no quiere dormir solo, algunas veces duerme con nosotras y otra veces duerme con Allen, aunque ya no llora cuando lo dejamos tomar una sienta y no estamos con el, preferimos siempre acompañarlo; a veces le gusta dormir con Aki, está muy apegado a su hermanita y como prometió, ha sido un buen hermano mayor. El sigue siendo tan adorable como cuando lo conocimos, tal vez más; es un niño obediente, amable y cariñoso, además muy inteligente.

Por otro lado, Katsuki, nuestra pequeña hija, está por cumplir un año. Es una niña hermosa, saludable y adorable, ella y Masao son la luz de nuestros ojos. Aún no ha dicho su primera palabra, aunque ya balbucea un poco; también está aprendiendo a dar sus primeros pasos. Yuzu, como era de esperarse, es una madre cariñosa y alegre, además es sobre protectora. Desde el primer día, Yuzu ha sido un madre y esposa atenta, cuando Aki llora por las noches, ella es la primera el despertarse a ver qué le ocurre, aún si estaba muy cansada, ella se levanta y corre a su habitación. Sé que ella quiere que yo descanse apropiadamente, pero algunas veces ella está tan cansada que ni el llanto de su adorada hija puede despertarla. Algunas veces he ido a su oficina y le he encontrado dormida sobre su escritorio, ella es diligente y responsable, pero no puede negar el cansancio de su cuerpo que, aunque en realidad sigue siendo joven y vigorosa, pasionada y fogosa, Yuzu cumplirá 33 años el año que viene.

Yuzu: Toc toc.- Se asomó por la puerta de mi oficina.- Directora? Se puede?

Mei: Yuzu, ya estás aquí.

Yuzu: Hola, cariño.- dijo entrando a la Oficina con Aki en brazos y Masao de la mano.- Mamma, la princesa y el príncipe te extrañaron.- me beso.- Que tal tu día, cariño?

Mei: ha ido bien, nada fuera de lo normal.- Tomé a Aki en mis brazos.- Hola, cariño, me extrañaste?

Aki siempre está sonriente. Cuando le hablamos siempre ríe.

Masao: Hola Tita!- corrió alegre y me abrazó.

Mei: Hola, cariño.- me agaché para besarlo en la mejilla.- te divertiste en la escuela hoy?