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Sasuke Uchiha

No iba mentir, pese que se me daba bien, no planeaba hacerlo, Hinata me había dejado en un extraño estado de tristeza y soledad que únicamente había sentido en mi infancia y cuando me despedí de mi hermano mayor; aun podía sentir sus pequeños dedos golpeando mi frente, odiaba esa sensación de que la gente me escondía cosas. Mientras caminaba de regreso para recoger a Sarada, no podía evitar sentir que Hinata me ocultaba algo,  desde niños me parecía extraña, con su manera callada y sigilosa de ser, con sus ojos perlados asustadizos, con esos molestos movimientos de dedos, con el poco empeño que le ponía a su físico, con su cabello corto que le daba a su rostro un aire inocente, con esa suave voz que te transmitía calma,  simplemente extraña, pero ahora, al regresar me di cuenta de que ya no era la misma, lo cual era un poco obvio, todos sufrimos cambios con el pasar de los años, pero en ella no me agradaba dicho cambio, desde que vi como aquellos ANBU querían llevársela a la fuerza, hasta sus expresiones tristes ponía cuando se perdía en sus propios pensamientos, hasta el trato de Naruto tan indiferente hacia ella, detuve mi caminar de pronto, llevando una mano a mi flequillo y sonriendo con melancolía.

¿En que momento esa mujer se había metido tan profundo en mi mente? 

Tal vez desde siempre, me sentía culpable porque ni siquiera en esta actualidad podía corresponderle a Sakura, enserio que lo intente, trate de cambiar con ella, de corresponder sus sentimientos, y creí que lo había conseguido, pues cuando Karin me mostró a Sarada recién nacida, pude sentir una enorme alegría mezclado con el deseo de protegerla de todos, incluso de mi mismo si era necesario, esa misma sensación de protección me provocaba Hinata, el deseo de querer verla siempre con un sonrisa era lo que mantenía mi cabeza  ocupada desde que llegue a la aldea de nuevo.

(...)

Llegué a la casa de Shikamaru, pues al parecer de la casa de Hinata se fueron a su propia residencia con nuestros hijos y quien me recibió fue la mujer de la arena de cuatro coletas, la verdad no recordaba su nombre, solo que intento coquetearme cuando eramos unos niños. Al poco rato llego Shikamaru, quien fue a ver quien había llamado a la puerta, note que sonrió al verme, pero de inmediato cambio a una mueca de confusión.

-¿Y Hinata?- pregunto tratando de sonar natural. 

-Con su esposo- dije serio.

Pude ver que su esposa se cruzo de brazos, con solo verlos de reojo pude notar quien era el del carácter fuerte.

-¿Y Sakura?- cuestiono con una expresión que no me gusto. 

-Temari, no es el momento- escuche como Shikamaru le susurraba.

Y otra vez esa sensación de que algo me ocultaban, muy poco tenían la capacidad de hacer que mi rostro mostrara emociones; así que me mantuve serio aunque deseaba mostrar mi enojo e incomodidad.

-Pasa, Sarada esta jugando con Boruto, Himawari y Shikadai- dijo Temari volviendo a entrar a su hogar.

Suspire un poco por lo mandona que podría ser esa mujer, pues ni siquiera me pregunto si quería pasar o algo. Aunque tampoco tenia nada mejor que hacer y prefería dejar que Sarada jugara otro rato, así que me quite las botas dejándolas perfectamente acomodadas y me pase, siendo guiado por Shikamaru hasta una especie de comedor. No pude evitar que ese ambiente era muy hogareño y familiar, algo así es lo que me hubiese gustado tener; pero ahora dudaba que lo tuviera con Sakura y Hinata, pues era obvio que era algo imposible, ambos eramos casados y ninguno de los dos seriamos capaces de engañar a nuestras parejas, porque si, puede que comenzara a tener sentimientos por la Hyuga pero jamas engañaría a Sakura, a pesar de no amarla como ella deseara, nunca la traicionaría de una manera tan cobarde, y en cuanto a Hinata, ella tampoco engañaría al idiota de mi amigo, por eso yo no era nadie para ir y confundirla con sus sentimientos y tampoco valía la pena que pusiera a volar mi imaginación imaginando cosas que nunca pasaran; tal vez ese toque en mi frente era la señal de que en efecto ambos nos alejáramos, de esta manera podríamos seguir con nuestras vidas como hasta ahora, haciendo felices a nuestras parejas que no tenían la culpa de nada. 

Princesa de mi pensar (Sasuke X Hinata)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora