Capítulo 6

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Corriste pasando a todos los otros participantes, dirigiendote hacia un enemigo de 3 puntos con tus manos abiertas frente a ti, ya preparadas para usar tu don. El robot te ubicó en si campo de visión y te lanzó un golpe, sin embargo saltaste hacia arriba esquivandolo e impactando la palma de tus manos en su puño estellado contra el suelo.
Primero fue la mano, luego el brazo y, finalmente, todo el robot de contrajo sobre si mismo haciéndose una enorme pelota de metal. Ante esto, sonreíste con satisfacción y alivio. Por un segundo creíste que estos enormes robots estaban fuera de tus límites.

Akaneru _____, Kosei: Contracción

Mediante el contacto de las palmas de sus manos o las plantas de sus pies, _____ tiene la habilidad de causar que los objetos se contraigan y aplasten sobre si mismos.

Su don tiene un tamaño límite en el que puede ejercerse. Este puede ser ampliado y mejorado mediante un arduo entrenamiento.

Nunca lo ha usado en seres vivos, pero se rumorea que si se usa en un ser humano, podría hacer que el cráneo se contrajera hasta aplastar el cerebro, causando la muerte.

Tras esa pequeña victoria de tres puntos, continuaste repartiendo puños y contracciones a todos los enemigos que veías. Por fin te estabas divirtiendo. En los últimos meses no habías hecho más que aplastar latas, botellas o muebles viejos. En general, no habías usado tu quirk en nada que tuviera un tamaño mayor al tuyo. En tu antigua casa, practicabas contraer los contenedores basura del puerto cerca de tu hogar. Era bastante divertido y útil, hasta que alguien te atrapaba y le caía una denuncia a tu padre o algo por el estilo.

Sobre tu cabeza viste pasar al chico al que confundiste con Eijiro antes, usando las cintas que salían de sus codos para desplazarse por los edificios.

"No sabía que la cinta adhesiva también servía para eso" .

En tu distracción viendo al chico de ojos negros, no notaste cuando un enemigo elevó su pie en tu dirección, dispuesto a aplastarte. Al notar la sombra creciente sobre ti prestaste atención a tu entorno, notando el inminente ataque. Antes de que pudieras razonar, sentiste un par de delgados pero fuertes brazos, excesivamente sudados, tomarte por la cintura y las piernas y echarte sobre un hombro desconocido, cargandote como un costal de papas.
Curiosa, paseaste tus ojos por la espalda de tu salvador. Luego intentaste mirar a su rostro, pero la pocisión solo te permitía ver el lado posterior de su cráneo: brillante cabello color cyan atado en una coleta desprolija.

Una vez fuera de peligro, el desconocido te dejó con delicadeza en el suelo, observandote con sus oscuros ojos grises. Notaste un rastro de agua que iba desde donde el robot ahora tenia su pie hasta donde ustedes estaban parados. Además, el chico estaba completamente empapado... No podía ser sudor ¿o si?

-Ah, es por mi quirk- aclaró el chico como si te leyera la mente.

Satoru Misuki, Kosei: Hidrokinesis

Expulsa el agua de su cuerpo a través de sus poros y la manipula a voluntad.

Por esta razón, su cuerpo es capaz de contener mucha más agua que otras personas, pero también debe mantenerse constantemente hidratado.

Prácticamente vive sediento y no sale de casa sin una botella llena, pero si se excede de su límite de agua contenida la necesidad de orinar lo atacará 5 veces más fuerte que en las personas normales.


-¿También eres telépata?

-No...

-Ah.

-Y... ¿Te encuentras bien?- interrogó el muchacho con su voz animada y varonil, pero preocupada.

No le respondiste, solo te alejaste corriendo hacia los enemigos de 3 puntos más cercanos que viste

-Um... ¿"Si, muchas gracias, guapo extraño"?- mientras tu te alejabas el chico se respondía a si mismo lo que, según el, se supone que habrías dicho.

Lo ignoraste.

-¡S-Soy Satoru Misuki...!

Mi Vecino Pelirrojo [DISCONTINUADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora