«Mientras las cosas van bien, las personas no le dan la más mínima atención a lo que el Espíritu Santo dice»
Miles de enfermos y muertos. El COVID-19, conocido como coronavirus, puso al mundo entero de rodillas. Saber que la muerte puede ser transmitida en el aire, en cualquier momento, ha generado pánico en todo el mundo. Pero ¿por qué Dios, siendo justo y bueno, permitiría que semejante virus se propagara en la humanidad?
Recientemente, el Obispo Edir Macedo respondió la siguiente cuestión:
«Yo creo, con todas mis fuerzas, con toda mi fe, que Dios ha permitido esa situación que nosotros estamos viviendo (un caos mundial). Él no es el responsable, obviamente. Pero permitió que ese caos viniera a sacudir al mundo, a fin de que el mundo escuche la Voz del Espíritu Santo».
Conforme a lo que el propio obispo señala, «mientras las cosas van bien, las personas no le dan la más mínima atención a lo que el Espíritu Santo dice, por medio de Su Santa Palabra».
No obstante, en momentos como este, las personas tienen una nueva oportunidad para abrir sus oídos para el Evangelio.
«Esa situación es una excelente oportunidad para que usted se encuentre con Dios, para que vuelva a Él», afirma el obispo. «Lo que Dios espera es que nosotros tengamos oídos para escuchar lo que el Espíritu Santo dice».
¿Y cómo hacer eso?
El obispo Edir Macedo señala que «ahora las personas tienen oídos para escuchar la voz de Dios y hacer lo que Él manda». Y esto depende solo de cada persona.
«Es muy simple, porque el propio Dios es el que dice: “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces”. Nosotros no tenemos nada que hacer: no puede ir al teatro, al cine […], a un restaurante, ¡usted no puede ir a ningún lugar! Tiene que estar encerrado en su casa. Vamos a aprovechar la cuarentena y buscar a Dios con todas nuestras fuerzas, con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma. Y es bueno que se aísle en un lugarcito muy reservado para que hable con Dios», orienta el obispo.
«Vamos a invocarlo, vamos a clamarle, no vamos a estar lamentándonos», continúa el obispo. «No vamos a estar llorando por la leche derramada, estar ajenos a la situación porque no va a haber arreglo. Lo que sirve es levantar un clamor, una súplica, un gemido. Pero, no todos tienen fe para clamar. La mayoría tiene fe para estar lamentándose, reclamando, maldiciendo. Pero, hay quienes tienen fe en el Señor Jesucristo, porque confían en las promesas de Dios».
Si tienes fe en el Señor Jesús, entonces, no dudes en buscar a Dios. Para brindarte ayuda en esta búsqueda, recibe diariamente mensajes de fe a través de este libro.
Actualización diaria.
Tomado del blog Universal México.
ESTÁS LEYENDO
Cerca de DIOS © [Segundo Libro]
Duchowe¿Te gustaría escuchar la voz de DIOS? Por medio de los diferentes temas y canciones que serán hablados podrás encontrar la respuesta a muchas de tus preguntas referentes a DIOS, añadiendo el ejercitar tú fe a través de la lectura. De modo que si alg...