¿Cómo saber si una persona sirve a DIOS?

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La manera como vemos las situaciones definen nuestras creencias. Por ejemplo, una persona puede ser despedida del empleo y lamentarse. Mientras otra, puede verla como una oportunidad para volverse emprendedora. Ambas están en la misma situación, pero tienen visiones diferentes.

El Señor Jesús ya había explicado que si nuestros ojos fueran malos, todo el cuerpo también será malo (Mateo 6:23). Los malos ojos conllevan tristeza, depresión, maldad entre otros tipos de problemas.

Del mismo modo tenemos que entender cómo funciona la dinámica entre criatura y Creador por medio de la perspectiva. Así sabremos qué hacer correctamente.

“Dios nos ve como siervos. Él es el Señor. Eso cambia totalmente su relación para con Él. Usted tiene que obedecerlo, no importa cuán difícil sea. Yo obedezco, porque mi Señor quiere mi bien. Él está ordenando no como un tirano egoísta. Yo obedezco porque Su voluntad es buena, perfecta y agradable. Nuestra voluntad no lo es. Por ejemplo, ¿cuántas veces usted tuvo lo que quiso y después se arrepintió?”, preguntó el obispo Renato Cardoso.

El obispo incluso señaló que el propio Señor Jesús nos alertó que para la condición de siervo: “Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro” (Lucas 16:13).

Solo para ejemplificar, el matrimonio es una buena metáfora para comprender lo que es una alianza. Porque dentro de la unión no hay lugar para la traición. Del mismo modo, Dios no acepta la infidelidad. La persona tiene que dedicarse a Él con todas las fuerzas.

¿Yo sirvo a Dios?

Para identificar si una persona sirve al Altísimo es simple, aclara el obispo Renato: ¿ella sacrifica para Él? La respuesta debe ser “sí”.

Porque el acto del sacrificio involucra dejar la propia voluntad para hacer lo que Él desea.

No sirve que la persona hable que Lo adora, que Él es el primero en el corazón. Serán palabras vacías, sino son acompañadas de actitudes.

Cambio de visión

El obispo Renato incluso agregó otra característica de quien es siervo. En la Biblia, está la siguiente orientación:

“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios”(1 Corintios 10:31).

En otras palabras, la persona no vive para su gloria o para su familia, por ejemplo. Todos sus planes se basan en los deseos de Dios.

“Ella piensa: ‘Dios mío, Tú me salvaste. Yo estaba yendo al infierno. Mi vida aquí solo es mientras espero para ir a la Eternidad Contigo’. Ella empieza a tener como meta la Eternidad y el deseo de agradar al Señor. Mientras ella está en este mundo, hace de todo para agradar a Dios. Aunque sus proyectos personales contribuyen con Su Obra. Como, por ejemplo, cuando la persona desea casarse con alguien que también es siervo”, concluyó el obispo Renato.

La trayectoria cristiana no es una fase, esta dura a lo largo de toda la existencia de la persona. Por eso, es muy importante evaluar el tema.

¿Quiere aprender más sobre la vida con Dios? Entonces, no se pierda los siguientes artículos en los diferentes libros que tenemos.

Tomado del blog Universal México.

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