¿Cuáles son y qué significa cada uno?
El bautismo es una de las cosas que los recién convertidos escuchan cuando llegan a la iglesia. Marca una etapa importante en la vida del cristiano. Sin embargo, no todos saben que existen tres tipos de bautismo.
Estos son bautismo en las aguas, bautismo con el Espíritu Santo y bautismo de fuego. Al respecto de los tipos de bautismo, el obispo Renato Cardoso aclaró las diferencias y en qué momentos de la vida cristiana ocurren.
Bautismo en las aguas
Para él, el bautismo en las aguas indica el arrepentimiento. Es decir, la persona reconoce sus pecados y decide, por libre y espontánea voluntad, entregarse a Jesús, arrepintiéndose de lo que había cometido anteriormente.
“El arrepentimiento no es un sentimiento, sino una decisión. El bautismo en las aguas significa que usted reconoce que necesita cambiar. Que necesita abandonar las mentiras, los malos ojos, el rencor y todas las cosas de las que tiene consciencia que es pecado y decide cambiar”, aclaró el obispo.
Él incluso explicó que, por no arrepentirse de sus pecados, muchas personas solo entraron al agua, pero no son bautizadas de verdad. “No fue bautizada porque no se arrepintió. No cambió o tomó una decisión emotiva. Si usted no abandonó los pecados, su bautismo en las aguas aún no sucedió. Usted necesita reconsiderar su vida y decidir si, de hecho, quiere tomar la fe en serio”, señaló él.
Bautismo con el Espíritu Santo
Después de ese arrepentimiento y entrega, la persona que realmente cambió su comportamiento, entonces, recibe el bautismo con el Espíritu Santo. “Significa la confirmación de Dios, de que Él vio que su cambio fue sincero, real y verdadero. Usted decidió cambiar y realmente cambió. Como reconocimiento a ese cambio, Él confirma dándole a usted el Espíritu Santo, que es el sello de Dios”, enseñó el obispo.
Bautismo de fuego
En cambio, después de recibir al Espíritu de Dios, el cristiano no debe creer que todo será fácil. Por el contrario, después de recibir al Espíritu Santo, pasa por el bautismo de fuego. “El bautismo de fuego es una especie de prueba de nuestra fe, para que nada se quede en la teoría”, reiteró el obispo.
Para ejemplificar, el obispo utilizó el ejemplo de Job, descrito en la Biblia. Él era un hombre recto, íntegro y temeroso a Dios (Job 1:8). Sin embargo, aun así, satanás incluso le dijo a Dios que si Él le quitaba todo lo que Job tenía, él blasfemaría contra Dios (Job 1:11).
“Él perdió todo en siete meses. Él pasó la prueba. Él no blasfemó. El bautismo de fuego es que usted pase por pruebas de la fe para que mañana el diablo no pueda señalarle con el dedo, porque usted tiene referencias de la fe que son persecuciones. Y cuando usted sale del fuego, usted prueba que es oro y que solo se purificó”, concluyó el obispo.
El propio Señor Jesús, después de ser bautizado en el río Jordán por Juan el Bautista y sellado con el Espíritu Santo, fue llevado por el propio Espíritu de Dios al desierto, con un bautismo de fuego.
Vea que a pesar de ser el Hijo de Dios, Él tuvo que pasar por el desierto y, además de todo, estaba solo. Muchas veces, las personas no entienden por qué están enfrentando problemas y que, aparentemente, parecen estar solas. Esto sucede porque pasar por el desierto exige que el verdadero cristiano solo dependa de Dios para oír Su voz. Son días difíciles, pero necesarios, pues estos aumentan la comunión con el Altísimo.
Lea también: Su mayor enemigo no es el diablo. (Subido en éste libro)
Tomado del blog Universal México.
ESTÁS LEYENDO
Cerca de DIOS © [Segundo Libro]
Spiritual¿Te gustaría escuchar la voz de DIOS? Por medio de los diferentes temas y canciones que serán hablados podrás encontrar la respuesta a muchas de tus preguntas referentes a DIOS, añadiendo el ejercitar tú fe a través de la lectura. De modo que si alg...