22.

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Dégel vio irse a Kardia junto con esa mirada de odio, uno que no era para él sino que para Seraphina quien estaba a su lado sonriendole una vez que su pareja se fue. La miro de reojo antes de darse la vuelta e irse a su consultorio. No queria tener problemas y ella tenia esa palabra escrita por todas partes.

- Dégel espera.

En este momento maldecía que no poder caminar más rápido, el accidente que había tenido le afecto más de lo que creyó.

- ¿Que quieres?- ni siquiera la miro, de hacerlo estaba seguro que le coquetearía como llevaba haciéndolo desde que volvio a trabajar.

- Acompañarte, por si necesitas algo.

Antes se lo hubiera agredecido por ser tan atenta, pero ahora solo le daba una sensación de ahogo al tenerla tan pegada a él todo el día.

- No es necesario, si necesito algo te avisare.

- Pero...

- Seraphina por favor, no quiero ser agresivo contigo fuiste una gran amiga para mi, no empeores las cosas.

La dejo plantada en la puerta, por mucho que haya hecho no podía ser grosero con una mujer eso su mamá se lo enseño bien, también le daba un poco de lastima ignorarla pensaba que tal vez trataría de pedirle perdon por lo que hizo. Se conocía lo suficiente para saber que le subiría el enojo y terminaría diciéndole cuanta cosa se le ocurriera.

Su celular vibró anunciado un nuevo mensaje. Era de Kardia.

"Si te sigue demasiado ten por seguro que al otro día de mi no se salva"

Amaba sus celos. Solo a esa fiera salvaje le permitía ser tan posesivo con él. Decidio ponerse a revisar los papeles con los historiales de los pacientes y estar al tanto de a quienes debía atender. Estaba tan concentrado en su trabajo que no sintió la puerta abrirse, se dio cuenta de que no estaba solo cuando vio unos cabellos plateados sobre su escritorio, ahora que los miraba bien si parecían extenciones.

- Dégel.

Levanto la vista solo para encontrarse el rostro se Seraphina muy cerca del suyo. Frunció el ceño ¿Que cree que hacia? De seguir asi se iba a enojar de verdad. No quería pelear con ella, pero se dio cuenta de que no podría sacarsela de encima muy facil.

- Antes de que me mandes lejos déjame explicarte que paso.

Suspiro resignado, mejor le daba una oportunidad.

- Te escucho, pero que sea rápido.

- Me gustaste desde el primer día que llegaste, te quise solo para mi de inmediato. Trate de ir despacio para que no pensaras que era una loca desesperada. Cuando comencé a creer que tendría una oportunidad contigo sin darme cuenta Kardia ya me había ganado terreno- se sento sobre el escritorio queriendo acercarse más- y te me escapaste de las manos. Esa vez lo acepte, esas cosas pueden pasar y si tu eras feliz con él yo no debia meterme en tu relación. Siempre los mire desde lejos imaginando que esas sonrisas eran para mi.

Hasta este punto ya no sabia que sentir si lastima por ella o enojarse por ser un poquito acosadora.

- Seraphina, resume la historia no tengo toda la noche. Sabes  que dime de una vez. ¿Porque seduciste a Camus?

Quiso reirse en su cara cuando la vio sonrojarse de la vergüenza, la haria pasar un mal momento un rato como una pequeña venganza.

- Se parece tanto a ti, solo le faltan los lentes y...y... ¡Sé que lo que hice esta mal! Pero ya no lo soportaba y ese niños es tan malditamente atrayente que...

Se dio cuenta que hablo de más cuando el frances se levanto de su asiento con una seriedad que no le había visto antes. Se bajo del escritorio lo pronto posible para alejarse lo más que pudo.

- Fuera.

- Dégel yo...

- Largo.

Trago saliva, nunca lo había visto tan enojado, tenia mucha razón de estarlo había utilizado a su hijo por una cosa muy estupida y de la que ahora se arrepentía bastante.

Al ver que no se movía de su lugar, decidió mejor irse él mismo, despues de todo debía  ir a ver a la única mujer con inicio de contracciones esa noche.

- Si no te vas tu, saldré yo.- abrió la puerta y antes de salir se giro a verla- Milo tenia razón si parecen extensiones.

Ahora si salio del lugar, no quería verla en un buen tiempo, sus planes se vieron arruinados una vez más cuando la sintió gritar su nombre de nuevo. Para su suerte al doblar una esquina se encontró con los gemelos y con Asmita, quien traía a Shaka en brazos y por lo rojo de su carita supuso que el bebé venia con una fiebre muy alta.

- ¿Les puedo ayudar?

- ¡Señor Dégel! ¿Hay algún pedriatra que este libre? Shaka no reacciona desde hace unos minutos.

Vio lo asustados que estaban los tres, por suerte para ellos y él mismo Seraphina lo venia siguiendo hace rato, aprovecharía de ayudarlos y de sacarsela de encima.

- Seraphina llévalos con Albafica, que atienda a este niño de urgencia tiene la temperatura muy alta.

Ella pareció no procesarlo por un segundo, pero cuando reacciano no tardo en guiarlos al consultorio del otro doctor. Dégel suspiro cuando se vio libre de ella unos minutos.

- ¿Se la entretenemos un rato?

Quedo mirado a Kanon sin entender muy bien lo que le decía.

- Puedo decirle a Saga que me ayude, así usted descansa un rato de su acosadora.

- Te lo agradecería mucho Kanon.

Aprovecharia para hablar un rato con Kardia, cuando no dormian juntos a su pareja le costaba quedarse dormido.

~•~

Kanon envío una foto al grupo de WhatsApp que tenían entre los cuatro. Bajo ella decía "Entreteniendo a la intensa" en ella se podía ver a Saga hablando con Seraphina de algo, la pobre se veía algo enojada.

Milo se la mostro a su mamá para que se le bajara un poco el enojo.

- Se acaban de ganar un punto más conmigo estos gemelos.

🔥🔥🔥

Pobre Dégel 😅

ScorpioNoMilo 💕

¿Quién es el padre? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora