Capítulo 23: Inesperado

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El timbre de la última clase sonó, haciendo que todos los alumnos se levantaran de sus asientos para dirigirse a sus casa o, por el contrario, a sus actividades extra escolares.

Marceline - ¿Te vas ya? - Pregunta ella con cuenta pena en su tono.

Bonnie - Sí, Menta tiene que estar a punto de llegar a casa, y tengo que estar allí para poder abrirle las puertas. - Le explica Bonnie Bell a su novia.

Marceline - Entiendo... En fin, hablamos luego. - Dice ella acercándose a la pelirosa para darle un beso de despedida, pero es inmediatamente detenida por esta.

Bonnie - ¿Tú te quedarás aquí? - Pregunta ella a escasos centímetros de los labios de Marceline.

Marceline - Sí, tengo que practicar en el club de música... - Apunta ella.

Bonnie - Oh, ya veo... En fin, te llamaré por la tarde. - Dice separándose de Marceline y dirigiéndose a la puerta.

Pero, antes de cruzarla, se da media vuelta para darle el beso de despedida.

Bonnie - ¡Nos vemos! - Dice yéndose veloz hacia su casa.

Marceline - Adiós, princesa... - Dice un una incomprensible satisfacción personal.

Una vez recogidas sus cosas, se dirige a la sala de música.

Lo que Marceline no había notado, es que había alguien siguiéndola. Alguien que había visto el espectáculo que había montado en la cafetería y estaba realmente impresionada...

Marceline abre la clase, pero, antes de poder entrar, una voz la llama.

Phoebe - Marceline. - Dice la pelirroja detrás suyo.

Esta se gira y la mira a los ojos.

Marceline - ¿Necesitas algo, Phoebe? - Pregunta curiosa la pálida chica.

Phoebe - De hecho... Si no te es mucha molestia, ¿Me podrías acompañar al gimnasio del centro? Es que he quedado allí para hacer unas pruebas para entrar en el equipo de animadoras, pero... Como soy nueva, no conozco muy bien las instalaciones... - Le explica la morena jugando con su cabello.

Marceline - Ya veo... Bueno, deja que deje mis cosas en la sala de música y ahora te llevo al gimnasio. - Dice ella servicialmente.

Phoebe - ¡Muchas gracias! Me haces un gran favor...

Marceline - No es nada... - Dice ésta dejando su mochila en la una mesa y saliendo de la clase, cerrando la puerta tras de sí.

Hecho esto, las dos chicas comenzaron a caminar hacia el gimnasio, una al lado del otra.

Phoebe - Entonces... Esta mañana en la cafetería... - Comienza a hablar ella.

Marceline - Ya... ¿Tú también crees que me pasé? - Pregunta algo cohibida.

Phoebe - No, no, no... Yo creo que estuviste increíble. La manera en la que defendiste a Bonnie y pusiste a ese idiota de Bull en su sitio... Fue impresionante.

Marceline - Bueno... Él se lo buscó. - Le explica ella.

Phoebe - Estoy de acuerdo. Aunque yo no hubiera tenido el valor para hacer lo que tú hiciste. Verás, al ser la nueva, no tengo muchos amigos, no de verdad, y tenía miedo de que si me peleaba con alguien nada más llegar me aislaran o algo así... - Se explica ella.

Marceline - Tranquila, no te preocupes por eso. Bonnie me contó que intentaste detener al Bill ese o como se llame.

Phoebe - Bueno, hice mi mayor esfuerzo... Pero tú... - Dice recortando distancias poco a poco con Marceline. - De verdad que con solo verte hacer aquello... - Dice mordiéndose el labio inferior. - Me emocioné. - Acaba con una amplia sonrisa.

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