Lost Stars→Jeon Jungkook

ESPECIAL

El tren iba a toda velocidad por las vías, avanzaba a través de campos verdes cubiertos por un manto de flores. Jungkook miraba por la ventanilla y observaba el paisaje mientras reflexionaba sobre algunas cosas. Haeri se movió y él le miró sorprendido.

-¿No has dormido nada?-le preguntó esta. Jungkook le acarició el pelo, intentando arreglárselo.

-No puedo dormir. No paro de pensar en él.

Haeri se incorporó y miró a su novio preocupada. 

-Me dijiste que estabas bien, que querías ir a Busan a despedirte.

-Y así es, pero todos los recuerdos están apareciendo de nuevo.

Haeri trató de reconfortar a Jungkook pero no lo consiguió. Él valoró su esfuerzo y le dio un abrazo mientras recordaba cada patada, cada puñetazo y cada grito que le había dado su padre años atrás.

Ellos normalmente iban a Busan varias veces al año para ver a sus familiares y amigos, pero aquella visita sería diferente. El hermano de Jungkook había llamado el día anterior para informarles que su padre había muerto. Y, aunque Jungkook lo pensó bastante, decidió volver a Busan. Su padre le había hecho daño e incluso le había dejado un trauma pero quiso ir a despedirse porque hubo un tiempo, antes de que su madre los dejara, en el que fue un padre de verdad, una persona honorable.

Cuando llegaron a Busan estaba su hermano y la familia de Haeri esperándoles. Todos se saludaron con un cálido abrazo y Haeri habló con su familia mientras que el hermano de Jungkook, Junghyun, le rodeaba con un brazo.

-No esperaba que vinieras-le dijo.-¿Dónde vais a dormir? Ya sabes que en nuestra casa hay una habitación libre.

-Dormiré con vosotros-le contestó a su hermano.-Lo más seguro es que Haeri quiera dormir en casa de sus padres.

Junghyun asintió mientras ambos oían a Leeri chillar y contarle todas las cosas nuevas que le habían pasado a su hermana. 

💜

Cuando Jungkook llegó a la casa de su hermano, una totalmente diferente a la anterior y en otro barrio, le recibió Hyemin con un abrazo. Hyemin era la esposa de Junghyun, una mujer amable y habladora. Estaba embarazada de siete meses y eso hizo que el abrazo fuera algo diferente a los demás que había recibido.

Jungkook subió las escaleras y dejó la mochila en la habitación donde dormiría aquel día, con las paredes pintadas de azul y una cama ancha con una colcha amarilla.

Hyemin y Junghyun le llamaron para enseñarle la habitación de su futura hija, Yuna. Esta tenía una cuna, una mesa y bastantes adornos en el techo. La mayoría de las cosas eran de color morado y gris.

Los tres bajaron a la cocina a almorzar, donde Jungkook fue interrogado por su hermano con preguntas sobre el alquiler, la universidad y Haeri. Jungkook las respondió automáticamente pero él no quería hablar de ello.

-¿A qué hora será el entierro?-le preguntó a su hermano, cansado de sus preguntas.

-A las nueve de la mañana-contestó, con un rostro serio, totalmente diferente al que tenía segundos atrás. Hubo un largo silencio mientras Jungkook se acababa el plato de arroz.-Por cierto, no me has preguntado como murió.

Jungkook paró de comer y miró a su hermano con curiosidad, diciéndole con la mirada que se lo dijera.

-Peleó con otro preso y este le pegó hasta matarlo.

Jungkook alzó las cejas sorprendido, su padre había muerto siendo golpeado. Notó la ironía de la situación y esta le secó la boca. El maltratador había sido maltratado y había muerto por ello.