Camille Brown
Él camino hacia él lugar del evento es algo largo. Pero no es aburrido ya que vamos cantando y recordando algunos momentos.
Cuando llegamos no puedo evitar mirar él lugar. Es hermoso. Asher se estaciona y me ayuda a salir del auto.
La entrada del lugar es hermoso. Tiene lujos por todas partes, hay un cartel diciendo que el evento es para recaudar fondos para los niños sin hogar.
Él hombre pide nuestros nombres y luego nos deja pasar. Si por fuera era hermoso, por dentro es precioso.
—¿Camille Brown?
Escuho una vos conocida a mis espaldas, Asher y yo volteamos. Y es Jenn, está hermosa, lleva unos pantalones de vestir y un crop top de encaje. Que hacen juego con sus hermosos zapatos.
—¿Jeen?
—Pero si estas hermosisima hoy.
Me abraza con fuerza y no dudo en devolvérselo. —Pero, tu no te quedas atrás.
Murmuró. —Si fueras lesbiana, te llevaría al baño de aquí y te daría bien duro.
Asher se aclara la garganta. —Siempre tan delicada Jennifer.
—Tu siempre dañando los momentos Asher Blake.
El odio es evidente en la forma en la que Jenn le habla. Ella siempre ah odiado su nombre completo, al igual que Asher siempre ah odiado su segundo nombre.
—Ay pero si son el dúo dinámico.
Dice Aron uniéndose a la conversación.
—Hola.
—¿Que diablo lo hiciste a Camille?
Aclara Aron mientras mira mi cuerpo. —¿Por que lo dices?
—¿Desde cuando tienes senos?.
Trató de disimular él rubor en mis mejillas. No estoy acostumbrada a resivur este tipo de atención. Los chicos siempre me han mirado como una más del grupo.
—¿Donde están los otros?
Pregunta Asher cuando nota que estoy incómoda. —Por aquí.
Nos guia entra la multitud de personas hasta llegar casi al final del lugar donde todos están sentados en una mesa. Todos me miran asombrados.
—Dejen de mirarla así. Ella ya sabe que se ve caliente, no es necesario que se lo recuerden.
Dice Jenn en forma de amenaza. La miro con una sonrisa y ella me guiña él ojo.
Todos mis amigos están aquí. Pero no veo a Blake o a Bruce por ningún lado. Comenzamos a hablar de diferentes cosas.
Hasta que varios golpes al micrófono nos hacen callar.
—Buenas noches. — habla la señora Miller. Suelto un suspiro cuando veo a los gemelos acompañando a su madre. —Es un placer para mi tenerlos en este evento. Es de vital importancia colaborar todos para esta causa, todos los niños merecen un hogar, o por lo menos amor...
La señora Miller continua con su discurso pero mi mirada viaja a Bruce. El lleva un traje elegante, camisa blanca, chaqueta negra al igual que sus pantalones. Pero la corbata roja resalta. Eso me hace sonreír un poco, estamos combinados.
Su mirada se cruza con la mía y me sonríe de lado. Mi sonrisa aumenta y vuelvo a la realidad cuando escuchó los aplausos.
Veo como la familia Miller baja de podio y se acercan a saludar a los invitados.
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ÉL NO ES UN MOUNSTRO
Teen Fiction-Ninguna vida es perfecta, todos tenemos heridas, no visibles ante todo el mundo. No se como diablos ella pudo ver algo de esperanza en mi. -La vida tiene una jodida manera de hacerte sufrir de la manera más dulce, así fue con él.