Kakuhidan "Una Mala Inversión"

Revelaciones

El sol ya se estaba ocultando, lo que hizo que los presentes regresaran al interior de aquel hotel. 

Como ya no tenían nada planeado, los chicos se dividieron para matar el tiempo. 

Hidan arrastró al moreno hacia la pequeña sala del lugar, para que pudieran tomar chocolate caliente juntos y claro que aunque Kakuzu se veía un poco incómodo no se opuso a la idea.  

Deidara y Sasori se retiraron sutilmente tratando de no llamar la atención, mientras que Kisame sin ningún tipo de pena invitó a Itachi a comer en su cuarto. 

Por otro lado el enmascarado se lamentaba en silencio, su plan era ir a comprar dulces pero no encontraba su billetera por ningún lado. 

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-¡Aquí tienes Kakuzu-chan!- gritó el religioso dándole al más alto su taza. 

El moreno sonrió antes de tomar aquel regalo. 

-Gracias- lo sujeto sin derramas una gota. 

El menor sonrió satisfecho y se percató de que solo las personas que se encargaban del hotel rondaban por ahí. 

-Anciano, hay que sentarnos cerca de la chimenea, nadie nos molestara por un rato- sugiero el fanático. 

Kakuzu lo pensó un poco y sin más asintió, emocionado al chico de ojos violetas. 

Ya una vez en el suelo, Hidan aprovechó el ambiente para sentarse lo más cerca del avaro pero sin parecer desesperado. 

Ambos disfrutaban el cálido momento. 

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Ya en el cuarto, cierto chico de grandes ojeras disfrutaba la compañía del bajista. 

-El servicio si que es rápido- comentó Kisame degustando uno de los 6 platos que tenían esparcidos por toda la cama. 

-No había comido de este modo desde que era un niño- sonrió Itachi divertido. 

-Oh vamos chico, estamos de vacaciones, no pasa nada si nos relajamos un poco- dijo el más alto con una enorme sonrisa. 

Todo era paz hasta que el teléfono del bajista sonó. 

-¿Te llaman?- 

-No, parece un mensaje, déjame ver quien es- y en cuanto lo abrió el bajista se extraño. 

-¿Pasa algo?- preguntó la comadreja al ver la cara del chico de la banda. 

-No, es un mensaje del amigo de Ren, me dice que encontró la billetera de Tobi en la nieve y que le avise para que pase por ella- le explicó Kisame la situación. 

-Entiendo, pero,¿será una buena idea dejarlos solos?, por lo que vi en el viaje, Tobi no parece cómodo a su lado- comentó Itachi recordando los incidentes en el carro. 

El mayor solo sonrió para después mandarle un mensaje al buen chico. 

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En el piso de una cómoda habitación Kakashi se encontraba hablando por teléfono. 

-Si Ren, te juro que los estoy vigilando*****si justo ahora estoy con ellos********tienes razon, son unos lindos angelitos*******aja***** no, no ha pasado nada raro*****- 

De repente unos toquidos se escucharon en su puerta. 

-Escucha, debo colgar******si te marco mañana*****cuidate- el hombre de cabello blanco corto la llamada para abrirle a su invitado. 

-Bu-Buenas noches, Kakashi-san- saludo el chico de la máscara naranja. 

-Por favor pasa, la billetera está encima de la mesa- señaló el mueble al lado de la cama.