Kara Zor-El/Supergirl

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Han pasado siete años desde que dos objetos no identificados aterrizaron en la tierra. No eran los primeros en hacerlo, habían muchos que lo hacían, pero eran rodeados y capturados, el problema era que no habían dado con esas dos naves, habían desaparecido sin dejar rastro alguno.

El general Lane se encontraba más que molestó por eso. En siete años no habían podido dar ni con la más pequeña pista de esas dos naves.

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Han pasado siete años.
Kara Zor-El, ahora de venite años de edad y Kal-El de siete años de edad, vivían en la Fortaleza de la Soledad.
Kara, desde que se formó la Fortaleza, empezó aprender sobre los humanos, sus diversos idiomas y culturas, sus historias y comportamientos, aunque no llegaba a entender mucho de esos comportamientos. Ella le enseñaba a Kal-El sobre ambos mundos, sobre su extinto planeta Krypton y sobre la Tierra. Ambos vivían felices en ese lugar.

Kara, había construido a un robot, lo llamó Kelex, Kal-El había quedado maravillado por el robot.
Kelex, era un ayudante de Kara y Kal.

-"¿Qué es eso?"- preguntó Kal en un perfecto kryptones, al ver unas imágenes nuevas para él.

-"Eso es lo que los humanos llaman pastel"- respondió Kelex.

-"¿Por qué no lo hemos probado?"- volvió a preguntar.

-"¿Probar qué cosa?"- preguntó Kara entrando a la que era la habitación de mando.

-"Eso llamado pastel. Si no estoy equivocado es comida, nosotros no hemos probado nada de eso."- miró a su prima sonriendo.

-"¿Pastel? ¿Quieres comer de eso?"-

-"No vendría mal. Digo, me encanta comer el pescado y tomar agua, pero mira esto prima."- comenzó a mover las imágenes y salían muchas de diferentes comidas. -"Hay un mundo de comida en este planeta. ¿A qué no se te antoja?"-

Kara, miraba con detenimiento las imágenes, ella nunca había visto esas imágenes y lo poco que sabía de comida era gracias a unos habitantes del Ártico que se encontraban a varios kilómetros de distancia.

-"¿Quieres comer eso, Kal?"- preguntó.

-"Sí, pero no quiero causarte problemas prima. Trabajas con los humanos para comprar el pescado aunque más que todo ropa y calzado."- Kal, se deshizo de las imágenes y con una sonrisa fue hasta su prima. -"Anda prima. Vamos a preparar el pescado que has traído."-
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Luego de comer, Kara y Kal se pusieron a practicar con sus poderes. Por supuesto que a Kal aún le costaba controlar algunos como su visión calorífica, su fuerza, su velocidad y vuelo.

Kara, por el contrario, controlaba todos si problema alguno. Al ella tener 13 años cuando llegó a la Tierra, comenzó a practicar, controlarlos y a desarrollarlos uno por uno, lo contrario al pequeño Kal que había empezado hace apenas un año.

Los poderes de ambos primos son los siguientes:
• Superfuerza (capas de destruir una luna de un solo golpe).
• Supervelocidad (capaz de igualar la velocidad de la luz).
• Vuelo.
• Invulnerabilidad (capaz de soportar fácilmente la explosión de 11 sistemas solares).
• Superoído.
• Visión Telescópica y Microscópica.
• Visión de Rayos-X.
• Aliento Helado.
• Visión Calorífica (capaz de lanzar rayos tan calientes como el sol).
• Visión Infraroja.
• Visión Espectro Magnético.