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- No sabía que usaba lentes. - hizo una seña para que Kara se sentara, ella rodeó su escritorio y se sentó, Kara la imitó.

- Yo tampoco. - dijo en un susurro.

- ¿Disculpe? - preguntó al no escucharla bien.

- ¿Por qué se disculpa? - Kara no entendía y la duda en su rostro lo verifica.

Lena también la vió con duda y confusión.

«Acaso ella...»

- No, yo no me he disculpado. - respondió con la sonrisa confusa.

- Lo acaba de decir. - inclinó su cabeza a un lado, sin darse cuenta, Lena le imitó.

Unos segundos sin quitar la vista de la rubia para luego aclararse la garganta mientras comenzaba a ojear unas páginas. Estaba apunto de hablar cuando la puertas de su oficina se abrieron sin ningún aviso, ningún permiso, sin delicadeza, Alexander Luthor entraba con periódico en mano, evidente enojo y sin prestar atención al acompañante de su hermana.

- ¿Puedes creer esto, Lena? Proclaman héroe a una mujer que podría hacernos daño. Es absurdo e ingenuo de parte de todos ellos, ni siquiera da su rostro y creen en ella ciegamente. - tiró el periodo en el escritorio de su hermana.

- Este no es momento para hablar de esto, Lex. - su hermana señaló a Kara. La rubia miraba seriamente al hombre. - Lex, te presento a Kara... - hizo una pequeña pausa al darse cuenta que no conocía el nombre completo de la susodicha. - Señorita Kara, él es mi hermano, Lex Luthor. -

- Aunque eso ya debería de saberlo. - Lex entendió su mano. - El gusto es todo suyo. - sonrió a su estilo. Lena rodo los ojos con rostro serio ante la superioridad de su hermano.

Kara, se puso de pie y estrechó la mano del hombre, un poco más fuerte de lo que esperaba. Vió el rostro de disgusto de la mujer y se preguntaba si le sucedía algo.

- ¿Kara? - empezó Lex a recordar. - ¡Oh, claro! Es la mujer de la que me hablaste, la que te ayudo en la cafetería. Te sorprendes muy rápido, hermanita. Eres muy ingenua. -

- No empieces con esto. Suficiente tengo con Lillian. Te pido que te retires de mi oficina. - su voz calmada y rostro serio.

Lex rió con evidente gracia.
- Querrás decir mi oficina. Recuerda que Luthor Corp me pertenece desde que papá murió. - su sonrisa de autosuficiencia lo decía todo.

Lena, quién no estaba dispuesta a soportar nuevamente las burlas de su hermano, se colocó de pie, guardo los documentos tomando los en mano junto a su laptop, luego agarró su bolso y viendo a Kara dijo.
- Acompañeme, señorita Kara. - la rubia asintió y empezó a seguirla.

La risa de Lex se dejó escuchar. - Que infantil. - dijo sin más.

Ambas mujeres bajan por el ascensor en completo silencio. De alguna manera, Kara podía sentir un aura diferente ahora, más pesada e inquieta. Caminaron fuera del edificio para caminar sin dirección alguna.

- ¿Se encuentra bien? - preguntó Kara caminando a la par de la pelinegra.

- Perfectamente. - fue su corta respuesta.

- No lo parece. Su rostro ahora está más duro y tiene estas energías negativas por toda usted. - continuó insistiendo, moviendo sus manos en dirección a Lena para referirse a las energías negativas.

Lena, al ver eso no pudo evitar sonreír, paró de golpe viendo a Kara.
- ¿Tiene algún lugar para hablar en privado? -

Ambas caminaban por el pasillo de ese edificio. Kara tocó dos veces cuando estaban paradas frente a una puerta, un hombre de cabello negro y radiante sonrisa les atendió.

Kara Zor-El/SupergirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora