The Flower on my Garden •Meanie•

III

Wonwoo había aprendido mucho durante un par de semanas:

1. Al parecer al entrar a la universidad las burlas se reducían y al haber tanto estudiantes podía pasar desapercibido sin problema.

2. No había visto el rostro de su vecino dado a que era el tipo de persona que se levantaba muy temprano y regresaba lo suficientemente tarde como para saludar adecuadamente.

3. Kim Mingyu le nublaba el raciocinio a un nivel increíble, simplemente su atención se quedaba estancada en el más alto, más cuando esté comenzó a cambiar de lugares. Ahora Mingyu se encontraba a un escritorio de distancia.

4. Algo no se sentía del bien del todo en él. Él se sentía raro.

Justo aquellas cosas comenzaban a causarle un malestar en su mente en especial el recuerdo y presencia de cierta persona ¿Por qué? No tenía ni la menor idea pero simplemente se le oprimía el pecho cada vez que se encontraba cercada de él, tenía taquicardia, por momentos sentía su piel arder y no podía dejar de percibir ese aroma raro.

Algo estaba mal en él, tal vez debería ir al médico porque aquellas cosas no eran normales ¿A caso estaba enfermando? De seguro era eso.

Wonwoo suspiro acomodándose nuevamente en su cama viendo las estrellas que había pegado en el cielo de su habitación, cuando no podía dormir aquellas figuras resplandecientes le hacían compañía hasta que caía rendido o simplemente hasta que amanecía y decidía levantarse para comenzar su día.

Sus pensamientos flotaban libremente en ese espacio sin ninguna restricción, volaban, corrían, caminaban y se enrredaban para que el joven de rizos se sintiera más ligero con la carga que llevaba día a día sobre sus hombros pero todo aquello se vio interrumpido cuando la casa se sacudió a forma de temblor crispandole los nervios hasta la persona mal calmada.

En cuestión de segundos Wonwoo se encontraba afuera de la instancia para descubrir que no se trataba de un temblor, bueno, realmente no sabía que había sido eso pero ahora se encontraba enfrente de su buzón sosteniendo un papel doblado. Le habían enviado una carta ¿Quién enviaba cartas en ese tiempo?

Extrañado regreso al interior de su hogar y tomo lugar en el desayunador de la cocina para leer la pequeña "carta" que se asimilaba más a los papelitos que solía enviarse con Seungcheol cuando era más pequeño.

"Hola Vecino ¿Cómo te encuentras? Lamentó mucho tener que comunicarme y presentarme de esta forma pero nunca estás en casa y bueno, pensé que sería muy grosero sino me presentaba.

Soy tu nuevos vecino y espero que nos podamos llevar bien.

Por cierto, tienes un lindo gato ¿Cómo se llama?"

Para ser una presentación, era bastante rara e informal para Jeon, su vecino ni siquiera le había dicho su nombre ¿Quién se presentaba sin dar su nombre?

Tomo una hoja y un lápiz para responder, ¿Qué debía escribir? Era la primera vez que tenía un vecino y realmente no sabía cómo tratarlo ¿Era mayor o menor a él? ¿Debía ser formal o casual? ¿Cómo debía contestar?

"Hola nuevo vecino, me encuentro bien y espero que usted también lo haga y se sienta cómodo con su nueva vivienda y conmigo como su vecino, espero no ser muy ruidoso y si algo llega a molestarle siéntase libre de decírmelo y veré la forma de resolverlo.

A decir verdad, también lamentó que nuestra presentación se de esta forma, tenía la intención de presentarme pero suelo ocuparme demasiado. Lamentó mucho que haya tenido que recurrir a esto para poder comunicarse conmigo pero, creo que es de mala educación presentarse sin decir su nombre o edad, así que espero no se tome esto personal pero no le diré mi nombre hasta que podamos presentarnos adecuadamente.

Espero que nos llevemos bien y no tengo ningún gato, aunque estoy muy seguro que habla de un gato negro ¿Verdad? Es un gato callejero que viene mucho por aquí porque suelo alimentarlo. Siéntase libre de llamarlo como quiera.

Espero que se encuentre bien".

Wonwoo doblo su nota improvisada y la mando por el buzón esperando que su vecino la recibiera. Estuvo parado en ese lugar por un tiempo hasta que escuchó una risa del otro lado que logró agitar su pecho, al parecer alguien había recibido la nota y de nuevo el malestar en su pecho se presentaba.

Ante ello, regreso al interior de su casa con el corazón acelerado como si este se quisiera escapar por su garganta. Mojo su rostro con un poco de agua fría con la esperanza que aquello latidos desenfrenados se detuvieran pero al parecer estos solo aumentaban, más cuando la puerta fue tocada.

Wonwoo abrió la puerta logrando que su aliento se quedará atorado en sus labios y su corazón amenazara con explotar en su cavidad torácica al ir tan rápido al ver a la persona en su umbral.

-Hola vecino -mumuro el joven de forma juguetona ante el pelinegro- Soy Kim Mingyu, un gusto conocerte.

Sin pensarlo, Wonwoo cerró la puerta en la cara de su nuevo vecino y pudo escuchar de nuevo aquella risa que le ponía débil las rodillas y su estómago comenzó a tomar una forma de nudo produciéndole náuseas.

Estaba perdido.