La princesa villana [Pausa]

Y Entonces Despertó

No podía creer lo que estaba pasando, acababan de matarla, entonces ¿por qué se encontraba en una cama? , la habitación era más que familiar, era su cuarto, aunque no lo recordaba con tantos peluches y adornos, se levantó y entonces notó que todo parecía más grande, corrió hasta el espejo y se congeló ante él reflejo.

-pequeña princesa, se levantó más temprano de lo normal. -

Dijo una mucama mientras se acercaba a Liliana, esta la reconoció de inmediato, era su mucama personal que la atendía desde que había nacido.

-dime... ¿Que año es? -

Preguntó con miedo aquella pequeña de cabellos castaños ondulados y algo despeinados, la mucama extrañada por aquella pregunta se limitó a contestar.

-es el ah, año del sol 1018, un día antes del cumpleaños de la princesa. -

¿Había sido entonces todo un sueño?, pero si era ese el caso se preguntaba por qué había soñado con aquello, y si no, había regresado al pasado justo un día antes de su cumpleaños y justo el día anterior de conocer a Corthis, asustada salió del cuarto corriendo mientras su mucama la seguía preocupada, pero a pesar de las súplicas de aquella joven Liliana no se detuvo hasta entrar en la oficina de su padre, donde justo se encontraba su hermano platicando con el rey, al verlos a ambos no pudo evitar llorar desconsoladamente mientras se lanzaba a los brazos de su querido hermano, el cual la sostuvo con fuerza y con mucha preocupación, el rey de igual forma se levantó de su asiento para acercarse a la pequeña y tomarla entre sus brazos mientras ella seguía llorando.

-¿estas mejor Liliana? -

Mencionó su padre cuando la joven se calmo por fin, se encontraba sentada en su cama, ella tallo sus ojos con suavidad y asintió, no era un sueño, había regresado en el tiempo y no entendía como, pero aquello no importaba, aún no habían pasado los eventos importantes, aún no perdía nada y se encargaría de que continuará así en el futuro.

-sólo tuve una pesadilla, pero ya no recuerdo... -

Dijo suave para no preocupar a su padre, este se levantó y dejó a la mucama atendiendo a la pequeña princesa, esta arreglo a la princesa con un pequeño vestido blanco y recogió su cabello.

El día pasó como normalmente recordaba, estudiando y bebiendo té, en su momento libre decidió visitar el jardín de su madre y sentada ahí intentaba recordar los detalles. Sabía que el día siguiente se encontraría con el príncipe en su fiesta de cumpleaños, y según recordaba ese día fue el que se interesó por aquel chico, sacudió su cabeza sabiendo que si podía impedir que ese interés surgiera no tendría celos cuando fuera más grande.

-yo, yo no caeré de nuevo.-