Star Wars Ex Umbra

15. Aurora

Poe Dameron cruzó la rampa del Halcón Milenario esperando sentarse frente al hombre que lo había torturado más de un año atrás en una nave de la Primera Orden. Estaba tenso, era imposible no estarlo, pero confiaba en Rey lo suficiente como para prestarse a aquella locura y prometer no delatar a nadie.

Sin embargo, cuando por fin los cuatro estuvieron dentro y tuvo delante de sus ojos a Kylo Ren, la sensación se esfumó de una forma extraña, en parte como si no estuviera viendo a la misma persona, en parte como si así fuera de cualquier modo. Durante un instante todo se vio invadido por un incómodo silencio, hasta que Ben carraspeó.

—Bueno... ¿Quién habla primero? ¿Hablas tú? ¿Lo hago yo?

Poe necesitó un segundo para procesar que aquel chico estaba bromeando. Deseó que alguien le diera un pellizco, la situación era demasiado surrealista.

—Yo... —comenzó, aún no muy seguro sobre lo que iba a decir— Creo que primero me gustaría que supieras que me alegro de que estés de vuelta.

Rey y Rose intercambiaron una discreta mirada de esperanza y satisfacción.

—Y si puedes ayudarnos con Finn —titubeó—. Sería fantástico. Porque la verdad es que ahora mismo ni siquiera sé por dónde empezar con él.

La joven jedi lo había puesto al día acerca de lo que habían averiguado gracias a Ben y sus sospechas sobre el estado del ex-soldado. Aunque Poe había pasado a un estado de preocupación creciente, también parecía emocionado de tener un punto de partida para ayudar a la persona que más quería en el mundo.

—Él aún no ha alcanzado ningún punto de no retorno —explicó Ben—. Es importante que Vicrul no logre aislarle, si se siente solo, escuchará cualquier cosa que tenga que decirle y probablemente le hará caso.

Hubo un asentimiento general.

—Creemos que eres la única persona en la que aún confiará —continuó Rose—. Después de lo que ha pasado... Ni siquiera quiere tener nada que ver con Maz. Y no queríamos que tú también pensaras que no confiábamos en ti cuando él te dijera que Ben está aquí.

Poe asintió y desvió la mirada hacia Rey.

—Aún así, lo entiendo. Tampoco es como si nunca hubieras hecho nada que me hiciera pensar que ibas a traicionar a la Resistencia —aclaró el piloto—. Confío en ti.

La aludida asintió. Que aquello estuviera saliendo bien tras el encuentro tan duro que había tenido lugar con Finn, sobrepasaba cualquier cosa. Rey dejó salir un suspiro para tranquilizarse.

—Bueno, entonces ¿por dónde empezamos?

Ben entrecruzó los dedos, decidido.

—Como digo, lo importante es que no se sienta solo, pero de todas formas ya se siente bastante traicionado, así que creo que lo mejor es que Poe se acerce de nuevo a él y que no le mienta. Si le pregunta por todo esto, lo mejor es que se sincere.

—Pero entonces puede pensar que hacemos todo esto para manipularle... —interrumpió Rose.

—Sí, pero probablemente sería mucho peor si luego descubriera que se lo he ocultado —intervino Poe— Ky... Solo tiene razón. Creedme, conozco a Finn. Ya se ha sentido lo suficientemente inseguro a lo largo de su vida como para darle más motivos ahora.

Las chicas coincidieron con él con un gesto de aprobación. Poco a poco, el joven dejó su mirada perderse y se abstrajo, tardando un instante en hablar.

—Traté de convencerle de que se entrenara contigo, Rey... —murmuró— Pero cada vez que sacaba el tema me lo ponía todo más y más difícil. En el fondo sé que le fascinaba, que no era miedo por sus poderes lo que sentía. El problema es que él...