Inocente Flirteo

Capítulo 15

Que día tan extraño. Comenzando por esa charla de Marcos ¿Por qué me había dicho eso? Desde luego que sabía que Ben no era una blanca paloma, ni yo tampoco lo era. Pero, sentía que exageraba un poco, Ben no era tan malo como lo describía él. Aunque lo que me tenía más preocupada, era esa metida de pata que Ben había escuchado, desde luego que tenía motivos para estar molesto, tanto que me había dejado botada. Pero no lo culpaba, aunque la cara que puso cuando me vio con Max, me decía que eso había empeorado las cosas. ¡Rayos! Era la primera vez que Ben se enojaba conmigo, pues aunque hiciéramos locuras con Perla, a la única que castigaba era a ella, pero nunca a mí. Aunque ahora sin duda estaba molesto.

Tal como lo imagine, esa tarde no hubo ni visita ni llamada por parte de Ben. Tampoco lo hice yo, tenía que esperar a que el enojo se le bajara o las cosas no terminarían nada bien. Aproveche para repasar para el examen que tendría a primera hora del día. ¡Joder! Lo que me hizo pensar en cómo me iría, tenía un auto que me habían regalado mis padres, pero era pésima conduciendo, así que mi madre era quien en ocasiones lo utilizaba. Bueno... ya pensaría en algo.

Decidí salir varios minutos antes de la hora en la que Ben pasaba por mí. Llame un taxi, el mismo que espere una cuadra antes de mi casa. Llegue con tiempo y me sorprendió ver a Max, en el estacionamiento.

-Marja -Me saludo con un gesto y se acercó a mí.

-Hola -Miro el taxi que se alejaba.

- ¿Por qué no me dijiste que pasara por ti? -Su tono era un tanto de reproche, algo que no me gusto del todo. "Odio que me impongan cosas".

-No era necesario. Regularmente siempre me traen pero... -Me encogí de hombros- A veces sucede.

-Nada me costaría recogerte.

-No. De verdad que no es necesario -Mi celular comenzó a vibrar- Disculpa.

-Adelante -Mire sin creerlo, era mi madre.

- ¿Si?

- ¿Dónde estás?

-En la universidad ¿Por qué?

- ¿Cómo que estas allá? Ben acaba de pasar por ti.

- ¿Qué? -Pregunte sorprendida. ¿Por qué había echo eso? Habría jurado que no lo haría, que me dejaría botada como ayer.

-Sí, incluso llamo a la puerta.

-Ah... olvide avisarle que tenía que llegar más temprano. Tengo un examen.

-Cariño, eso no se hace. Debiste decirle.

-Lo siento, madre. Me disculpare con el mas tarde -Max no dejaba de mirarme y me ponía nerviosa con esa sonrisa entre inocente y picara.

-De acuerdo.

-Lo siento.

- ¿Llamada de mamá?

-Ni me lo recuerdes.

-La mía es peor. Me trata como a su chofer personal.

-Pobre.

- ¿Quieres que te acompañe a tu clase?

-No hace falta.

-Me queda de paso.

-Ni si quiera te he dicho a qué aula voy.

-No importa. Seguro me queda de paso -Puse los ojos en blanco, pero accedí.

-Está bien.

Nunca faltan los curiosos, los que siempre están al pendiente de lo que haces y dejas de hacer. Razón por la cual cuando me vieron cruzar el estacionamiento en compañía de Max, comenzaron a cuchichear, claro yo siempre iba en compañía de Ben. Ben ¿Dónde estaba? Volví la mira en busca de su auto, pero no, aun no llegaba.