Bésame™ +16 [PAUSADA TEMPORALMENTE]

~ Capitulo dos ~

Un año antes.
- vamos... Será divertido - me anima mi mejor amiga, rodo los ojos y trato de convencerme de que así será. Sin embargo, en mi capa exterior e interior sé que no será así. Suspiro.
- ¿traen todo lo de la lista? - pregunta mi mamá. - ¿llevan ropa interior limpia? - Asiento y apresuro el paso, unas cuantas personas alcanzaron a escuchar, y antes de que pudiera dar un paso para que abordáramos el avión, mi queridísima madre me detiene de la mano. - ¿segura? - me mira directo a los ojos, después a mi mejor amiga- ¿Jenn, tú?
- si, estaremos bien tía, no se preocupe - le dice con una firmeza y seguridad que en este preciso momento yo no hubiera actuado tan bien, aunque estaba noventa y nueve por ciento segura de que estaba convencida. Asentí para darle la razón y nos abrazó a ambas. Técnicamente Jenn no era nada de nuestra familia directamente, más nos conocemos desde secundaria y nuestra amistad a sido inquebrantable y así lo seguirá, pero en este viaje me hacia tanta falta. - se portan bien, ¿eh, Ivy? - me miró con desprecio y duda.
- claro, mamá. Tranquilízate, estaremos bien, ¿okay?- le pregunté. Frunció el ceño en señal de disgusto, ya que no le gustaba ser corregida o que le dieran la contra, algo que es normal en ella.
- bien, creo que esta es la despedida... - susurró. Lagrimas salieron de sus ojos y por un momento me sentí nostálgica, simplemente que no lo demostré como ella. Soy mas fuerte en cuestión a mis sentimientos y llorar en público o sola, siempre he pensado que es símbolo de vulnerabilidad. Solté con un ruido sordo la maleta y la abracé. Olía a su champú favorito.
- estaré bien, Jenn me vigilará, es la responsable de por aquí - le dije sinceramente, eso era cierto, a pesar de que teníamos la misma edad, siempre he sido la impulsiva de por aquí, puños primero, hablar después. - te llamaré de vez en cuando y tu descansarás de estar oyendo mi horrenda música, ¿entendido? - le pregunté, sorbió por la nariz y me alejé de ella para verle los ojos - ¿entendido? - repetí - vé a un spa, vé con tus amigas, diviértete, emborracha... - ví su cara y descarté la idea. Sonreí juguetonamente - sabes que bromeo, solamente que diviértete - me acordé repentinamente de algo - ¡por favor dale a Maximus de comer todos los días! y algo más ¡no veas Master Chef sin mi ¿okay?! - le tomé el pelo una vez más y esta vez sonrió. No pareció causar el efecto que quería porque al instante soltó otra lágrima. Jenn, ocupó mi lugar y le susurró algo en el oído que SI la hizo sonreír ¿que le habrá dicho?, me pregunté. Mi celular sonó, y cuando lo bloqueé miré que mi madre y mi mejor amiga estaban haciendo planes sin mí.
- ¿que? - pregunté molesta.
- nada - contestaron al unísono, confirmando lo que pensé. Levanté una ceja y ambas desviaron la mirada.
Asentí y dejé el tema. - bien, lista para arruinar mi verano - refunfuñé. Mi mejor amiga rodó los ojos y le dió un beso en la mejilla a mi mamá. Nos despedimos ambas con la mano antes de pasar por las puertas que nos llevaban al peor lugar deseable en esta tierra.
Los Ángeles, California. Con mi padre.