Hermoso momento para reflexionar.
Toda mi vida es actuada, porque ya nada es interesante, ja jajajaja.
Todo lo vivido es un teatro del cual no puedo salir y mucho menos ver.
Aburrimiento es lo que queda y se vuelve interesante ver como la gente arrogante, errante y sola empieza a escupir sus malos días.
Echo de menos esas épocas cuando nada tenía que ser tan simple ni repetitivo.
Digo no, cada que quiero negar algo.
Aburrido, recuerdo los desprecios para echarme la culpa y al menos tener algo de sentido nuevamente; a la media noche lamentar otra vez cada vez que la culpa me sugiere seguir adelante para sentirme al menos algo menos culpable.
Un encuentro a ciegas, un simple disculpa, mi cara se distorsiona y me vuelvo un garabato. Alguna vez dejaré de ser un simple objeto del cual burlarse a espaldas. Miremos el sol hasta que ya nada tenga sentido, admiración falsa y simples palabras que nunca escucharemos continuamente. Una alegría momentánea, gracias. Jajajajajaja.
