Epílogo

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—Y así niños, es como todo pasó —finalizó el mayor achicando los ojos.

—Fue tan... ¡wow! —dijo la pequeña estirando sus brazos.

—¿Y qué aprendieron de todo esto? —preguntó sin que la sonrisa abandonase su rostro.

—¿Que debemos tener cuidado con las pistas? —preguntó y respondió el niño.

—Bueno, sí, ¿pero qué más?

Los mellizos se miraron entre sí antes de negar y jugar con sus dedos. Entonces, ya aburrido de tanto esperar, el segundo mayor se acercó a la niña y cuidando de que el de ojos más rasgados no lo notase, susurró una respuesta en su oído. La niña inmediatamente abrió sus ojitos y levantó la mano.

—Debemos aprovechar la vidddda, a nuestros seres queridos y saber salir adelante —contestó la mayor alzando su dedo.

—Muy bien, Dahee —felicitó Jimin, muriéndose de ternura por el hecho de que ella alargase la d—. Tú por poco, Beomwoo.

—¡No se vale, tío Tae le susurró la respuesta! —reprochó el menor de todos con un notable puchero formándose en su regordete labio inferior.

—¿Es eso cierto? —Jimin miró acusadoramente al mencionado.

Taehyung se sobresaltó antes de soltar una frustrada respiración.

—Ay por favor, no esperes que unos niños de cuatro años te den la respuesta correcta.

—¿Estás subestimando la inteligencia de un niño?

—No esperes que uno te responda las dudas de la vida.

Una pequeña discusión comenzó y los mellizos se miraron confundidos antes de encogerse de brazos y comenzar a imitarlos.

—No, bebés, eso no se hace —los alejó su tío Sanha—. Ya saben de ley que no hay que imitar a estos idiotas.

Los niños asintieron.

—No imitai a esos idiotas —copiaron al unísono. Sanha rió hasta que recordó con quienes hablaba y volvió a negar alarmado.

—No, no, tampoco repitan esas palabras. Cuando sean más grandes ya si quieren, ¿ok?

Los mellizos nuevamente estaban confundidos. Era mucha información así que solo asintieron. El de cabellos levemente ondulados les sonrió antes de volver la mirada al par que seguía discutiendo sentados en el pasto.

—Se supone que le enseñen a los niños a no pelear —se quejo Sanha—. ¿No es mi labor como el menor de los hermanos ser el menos maduro? Porque parece todo lo contrario.

—No, niños. El pasto no se come —Felix le quitó el mencionado de la mano a Beomwoo, quien casi se lo lleva a la boca.

—¿Puedo jugar con mis primos a las chapadas? —preguntó Seongmin a su padre, interrumpiendo así la discusión que este tenía con su tío.

—No, bebé. Es algo muy agresivo para su edad —le respondió Taehyung acariciando sus cabellos—. Pero puedes ir y jugar con Chaewon —señaló con su cabeza a su sobrina, hija de Felix dos años mayor a los mellizos, que se hallaba jugando con carros y muñecas.

—No, gracias —respondió antes de cruzarse de brazos junto a Sanha y pucherear.

Desde lejos, Jeongin y Ahnna miraban la escena con una sonrisa. El primero notó que el menor de sus hermanos tenía dos años más a la edad de Beomgyu en ese entonces. Ahora él mismo tenía 32 y sentía que había vivido muy bien hasta ahora. Su perro Yeontan que en paz descanse, había fallecido el mismo año que entró a la universidad. Nuevamente tuvieron una pérdida, pero esta vez supo lidiar con ella.

Miró a su lado, a la de ahora cabellos nuevamente negros y cortos, que le dedicó una sonrisa. Presionó su mano, donde ambos anillos lucían resplandecientes bajo el sol.

Obviamente no todo había sido fácil, Jeongin y Ahnna habían roto una vez. Pero al final de todo, terminaron juntos y Jeongin le pidió matrimonio.

Viendo todo a su alrededor, solo podía agradecer lo que tenía. Una familia feliz.

—¡Una mariposa! —Beomwoo se acercó corriendo a ella.

Jeongin tuvo un mal presentimiento y observó a su alrededor, tratando de ubicar a su hijo.

—¡Un camión! —gritaron Sanha y Seongmin al mismo tiempo.

Jeongin saltó de su asiento y corrió hacia la pista, logrando tirar del brazo de su hijo hacia atrás evitando así una catástrofe. Oía de fondo al mismo Sanha gritándole groserías al conductor y a Taehyung avisando que Jimin se había desmayado después de soltar un: "No otra vez". Tomó el rostro de su niño en manos y examinó su cuerpecito.

—¿Estás bien?

El pequeño se largó a llorar y abrazó a su papá. Pronto Dahee también se acercó y ahora los hermanos estaban llorando. Ahnna se agachó a la altura de ambos.

—Beomwoo, dijimos que hay que tener cuidado con las carreteras.

—Pe-pero era una mariposa y... lo sento, yo solo quería tocarla...

Ahnna les sonrió antes de abrazarlos.

—Debemos hacer algo, pongamos cercas. Estoy traumado con las pistas —bufó Sanha cruzándose de brazos.

Jeongin rió y miró al cielo. No, no volvería a ocurrir.

Bueno, esto es kk pero la vida no es perfecta xd Ya lo tenía escrito hace muchos días, pero mi autoestima no me da y sigo pensando que está feo unu

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Bueno, esto es kk pero la vida no es perfecta xd
Ya lo tenía escrito hace muchos días, pero mi autoestima no me da y sigo pensando que está feo unu

Ya no iba a matar más personajes, pobrecitos. Igual Yeontan que en paz descanse ;-;

Yo no sé qué haría si se muere mi perrito, ¿algunx de ustedes ha perdido una mascota? Si es así, ¿cómo superaron su ausencia? Esta historia es de superación, pero la verdad, en mi caso, no sé qué haría. 😔

Y bueno, aquí termina esto.
Sorry si esperaban algo mejor, di lo mejor que pude pero mi estado de ánimo no es el mejor que digamos jsjs

Gracias por acompañarme hasta aquí en estos dos libros, y gracias por amar NP31D y aceptar Healing List. Significa mucho para mí y ya puedo dar por concluida del todo la historia de Beomgyu, Kyuhee y el dolor de Jeongin.

❤❤❤❤❤

— d o r i t o —

P.D: Pase lo que pase, no hay forma que lo cancele. Incluso si lo que dijo estuvo mal, para mí todas las acciones buenas que ha hecho valen más que un feo error no del todo comprobado como para cambiar mi opinión de él. No estoy decepcionada ni de él ni de los demás porque así se aprende, son humanos y se equivocan. Pero cancelar a alguien y sobre todo a él, no va.

ʰᵉᵃˡ'ⁿᵍ ˡ'ˢᵗ - ʸᵃⁿᵍ ʲᵉºⁿᵍ'ⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora