IX- Epilogue of Hell's Arc

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La Tierra. Es un pequeño planeta que órbita en torno de la última estrella creada en la labor de "Samael de la Hueste" como la Estrella de la Mañana del Único y Verdadero Dios, único planeta habitable por criaturas creadas por el mismo Dios en este sistema solar, pero tan intranscendente en el amplio panorama cósmico.

Este planeta (Tierra) es sitio de mitos, leyendas e historias.

Este planeta es lugar de tan hermosas cosas que cautivaría los corazones de aquellos que las vieran y las sintieran.

Este planeta es uno de lugares donde se puede cometer las peores atrocidades que traerían pesadillas e incredulidad.

Y, en la masa de tierra conocida como "América" o más en especifico en el Estado de Illinois "El Estado de la Pradera", un veinteañero hombre de tez morena se halla caminando por las no concurridas banquetas de un vecindario de clase media mientras que los iris marrones del hombre se posan distraídamente en el grisáceo suelo; el nombre de este ser, es Jorge Ávila-Torrez.

Sin embargo, no paso mucho tiempos ante que su distraída atención sobre la grisácea banqueta se apartara cuando el incesante ruido de pedaleó así como de risitas infantiles se coló en su sentido auditivo (oídos), contemplando como es que dos pequeñas niñas se acercaban en sus bicicletas con unas divertidas sonrías plasmadas en sus infantiles rasgos.

Con la vista de las infantes, un vil susurro oscuro se coló en las profundidades de su corazón y lo tentó a cometer actos que normalmente no realizaría por temor a las represalias; pero, este susurro lo seducía e inhibía sus restricciones por completo a cada segundo que pasaba y las veía acercarse.

Hasta que, la poca consciencia o moral dentro del hombre, se desvaneció y comenzó a acercarse a las pequeñas niñas; con una creciente erección notándose en sus pantalones. [1]

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En otro Estado, Sheila LaBarre se encontraba cómoda en el extenso sillón familiar de la sala de estar de la casa (granja) en donde vive con su novio (Michael Deloge), mientras que veía la televisión abierta; con el susodicho encontrándose, como era habitual, laburando en los establos de la granja.

Sin embargo, el entretenimiento del programa así como el ruido proveniente de este empezó a ensordecerse, cuando un seductor susurro malicioso se internó en la profundidad de su corazón y la incito nuevamente a cometer a actos los cuales la condenarían; pero, el susurro derrumba aquellas restricciones en su actuar a cada segundo que transcurría.

Su voluntad no duro mucho, la experiencia con aquel nato instinto malicioso que tenía al manifestarlo, le hizo de poca ayuda para resistirse a tal susurro. Por lo que, se alzo de su asiento y marcho a donde se encontraba su novio; sin este, desafortunado hombre, saber el destino que le espera. [2]

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Y, como en estos dos casos, el seductor susurro melodioso que incita la tentación al pecado broto en los corazones de la humanidad para desvelar aquellas oscuras verdades las cuales la humanidad intenta tanto esconder con moralidad y sus deficientes cuerpos normativos (Derecho).

Temerosos son ellos de quitarse aquella "mascara", la cual muestra la superficie de los pensamientos y acciones de la persona que se encuentra delante de ti, pero quitemos esa "mascara" y no serán diferentes a los llamados criminales; villanos, malvados, etc.

Es por ello que, la tasa de crímenes se incrementó a niveles estratosféricos que no se veían desde el Diluvio Universal.

¿El porqué de este fenómeno? Se preguntará los analistas, pero no encontraran una respuesta correcta a la pregunta; después de todo, ellos se enfocan desde un punto de vista puramente científico. Los mas religiosos, oradores del Dios Creador, vociferan fervientemente lo que ellos creen ser la causa de esta ola de crimen.

"¡El Diablo! ¡Es culpa del Diablo!"

Y, por esta vez, la humanidad tenía razón.

¿Por qué? Porque el Diablo había llegado a la Tierra.

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[1] Jorge Ávila-Torrez; El 9 de mayo de 2005, en Zion, Illinois, secuestró, violó y apuñaló hasta la muerte a dos niñas de 8 y 9 años. Laura Hobbs, de ocho años, y Krystal Tobias, de nueve, salieron a jugar en sus bicicletas pero no regresaron al anochecer del Día de la Madre en mayo de 2005.

[2] Deloge era el novio de LaBarre, quien vivía con ella en la granja. Fue visto vivo por última vez en 2005. Un hueso, una vaina de escopeta y su certificado de nacimiento fueron encontrados en el tanque séptico de la granja en 2008. Se desconoce las razones de su muerte. Su madre informó a la policía que estaba preocupada de que LaBarre intentara matarlo.

[3] No sé si ustedes lo viejos Lectores o los nuevos que leyeron mas allá de "Hells Arc", se acuerden de como llegue a incluir a "The Ancient One" cuando Lucifer llego a la Tierra, bueno también pensaba incluir un fragmento de la reacción de "The Ancient One" reaccionando a sentir como algo entraba a la Tierra. Sin embargo, seria estúpido de mi incluirlo, esta nueva versión de Lucifer es mucho más inteligente y preparado.

En el ultimo capitulo de arco del Infierno (el previo a este), Lucifer mismo dice: "Deseo un retiro pacifico, Arturia; anunciar mi retiro sería contraproducente". Así que, la función de las demás runas que están talladas en la piedra y Leviatán no entiende, algunas de ellas son para enmascarar su llegada a la Tierra; hasta de la vigilancia de la Hueste Celestial.

Donec iterum, Lector(a)~

Marvel (DC): LuciferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora