DOS: ¡Las pastillas!

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'Lo que no te mata te hace desear estar muerto'

Narra Autora

─¡NO PUEDE SALIR!─ Kunikida dispara al tanque. Dazai corre en aquella dirección, mientras el agua cae el cristal se rompe y el delgado cuerpo que, hasta hace pocos segundos luchaba por salir, va a caer y golpearse contra los cristales rotos en el suelo. Pero el joven de abrigo beige la atrapa antes de que eso ocurra. ─¡Hay que darle respiración boca a boca!─ Grita el de coleta. Dazai se dispone a hacerlo, depositando a la joven en el suelo, algo alejada de los cristales rotos e inclinándose sobre ella, mueve su mentón con cuidado, despejando las vías respiratorias. Después de inhalar, apega sus labios a los de la chica, y exhala.

(...)

En la enfermería de A.D.A, una joven abre los ojos con lentitud, una vista borrosa y una leve migraña. Poco a poco, siente la presencia de un chico castaño, con su mirada sobre ella.

Al instante se levanta con brusquedad y se dirige a la puerta, pero los nervios impiden que la abra de inmediato y Dazai aprovecha ese momento para depositar su mano sobre el picaporte, impidiéndole así que pueda continuar con su huída. Voltea entonces a ver al propietario de la mano vendada y sus ojos se vuelven a encontrar, tiñendo el ambiente de una temerosa curiosidad que retuerce el cuerpo de la chica, como sí intentara ocultarse detrás del aire que le rodeaba.

La piel de la joven se eriza, parece asustada, pero él se limita a sonreír con amabilidad.

─¿D-d-dónde estoy?─. Segundos de silencio más tarde, se aleja del muchacho y este apoya su espalda en la puerta. Ella, sintiendo como su corazón se acelera, gira su cabeza en dirección de los cajones y se agacha con brusquedad. Tiene dudas, pero el pánico le invade al darse cuenta de que no conoce aquel lugar, a aquel hombre o aquel cielo tras la ventana─. N-necesito mis pastillas, ¿dónde hay?. ¡Es una enfermería!, ti-tiene que haber...─ Alterada, comienza a abrir los cajones uno por uno, quiere refugiarse en las drogas que le han dado desde niña, su estomago ya les ve como una necesidad.

Sin embargo, sin comprender del todo, Dazai le observa brevemente perplejo.

─Hey─ Habla, intentando llamar la atención de la extraña que tiene en frente, pero ella le ignora. ─¡Hey!, ¡cálmate!─ Le pide, aumentando el volumen de su voz mientras ella arroja todo a sus pies, respirando con dificultad.

─¡No entiendes!, ¡las necesito!─ Le grita, volteando a mirarle tan solo por unos segundos. Rebusca entre los cajones, tirando, con desespero, aquello que no le sirve. Al reaccionar, Dazai se inclina a su lado con rapidez, pero a penas envuelve el brazo de ____ con una de sus manos, con la intención de detenerla, siente lo helada que se encuentra la piel de la joven y se sobresalta. ─¡Aléjate!─. Grita ella. Era casi como tocar un cubo de hielo, incluso pudo decir que le dolió el tacto. Debido al asombro, luego de retroceder un paso el castaño observó curioso la palma de su mano, anonadado se dio cuenta de que en su piel, blanca como la nieve, había escarcha y sus dedos se habían congelado un poco.

Quiso acercarse de nuevo, la joven lucía más calmada pero su cuerpo. Osamu le analizó con la mirada un momento; Su piel había adoptado un tono ya algo azulado, sus venas moradas debajo de sus piernas resaltaban por lo delgadas y debiles que parecían ser, en un cuerpo tan pequeño como el suyo. Ella tenía la mirada baja dado al miedo, sin embargo, cuando sintió al cuerpo del varón cerca del suyo, le empujó. Lamentablemente, aunque sigue revisando los cajones se da cuenta de que su esfuerzo es en vano, pues el último cajón está vacío y no ha encontrado lo que deseaba en absoluto. Frustrada, desliza su cuerpo tembloroso por la madera brillosa del suelo, y apega su espalda a la pared, sollozando a un volumen bajo

─Cálmate, cálmate, cálmate─. Murmura, para sí misma. Tapando su rostro con sus manos. Cierra sus ojos con fuerza, creyendo que así volvería al tanque en el que recuerda haber estado.

Pero sus pensamientos son aterradores, y sin embargo no sabe sí mirar o no al chico delanto suyo. Sabe que le hará algo, sabe que tiene que huír, sabe que no puede dirigirle la mirada a menos que quiera recibir un puñetazo.

El temblor es cada vez más notorio, Dazai le observa con preocupación, el shock del momento le ha dejado en blanco. Pero, cuando nota que ella se ha distraido, no tarda ni un segundo más en tocarle el hombro, desactivando sus poderes tan pronto sus pieles se rozaron.

Ahí es cuando, creyendo que el frío se desvanece, el corazón de ____ late con fuerza y ella levanta la mirada pasmada en dirección del chico, sus ojos abiertos a tope mientras desliza sus manos por sus piernas y siente la calidez de su propia piel, abrazándose así misma mientras se esconda entre sus rodillas, aún con algo de miedo─. ¿Qué me hiciste?...─ Susurra, anonadada, una extraña sensación invade su estómago.

─Mi nombre es Osamu Dazai... Mi habilidad me permite desactivar el poder de cualquier ser humano─ Explica, sonriendo y susurrando al unísono. _____ le observa en silencio.

Y oído eso, de rodillas sobre el suelo, inclina su cuerpo en dirección del varón frente a ella, y con los ojos cerrados, le dice lo siguiente, de pronto un nudo se forma en su garganta, el pecho le duele y le tiemblan los dedos. En su interior se advierte que, sí él le ha ayudado con ello, es porque quiere algo como devolución. Y puede ser peligroso;

─Lamento mi arrebato, no volverá a pasar─. Murmura, esperando un golpe que nunca llegó.

Durante esos segundos, ante la sumisión con la que la chica habla, él, inundado en lo que cree es compasión, lleva su mano con suavidad a su cabeza y acaricia su cabello. Él lo ha tomado como un consuelo, él quería desvanecer la poca confianza que la joven le estaba mostrando, sin embargo su respuesta no es más que un cuerpo tembloroso. ─Pero hablo en serio cuando digo que necesito pastillas antidepresivas... Por favor, por favor deme─ Habla ella, encogiendose sobre su sitio. Remarca el último por favor como si estuviese suplicándole. Y él, perplejo ante cómo la chica actúa, con una extraña sensación en su pecho, posa su mano en la barbilla de la joven y la levanta con cuidado, al principio, las cejas de la muchacha se mantienen inclinadas y cierra los ojos con fuerza, como si esperase un golpe pot parte del muchacho, pero cuando se atreve a mirar luego de no haber sentido ningún impacto brusco, lo único que fue capaz de percibir fue el brillo inusual en los ojos de aquel chico.

─Te las traeré... Por favor, acuéstate y trata de descansar un poco más, tu cuerpo tiembla mucho...─ Dicho eso, mientras la mira, se quita su abrigo con lentitud y lo deja sobre los hombros de la muchacha mientras que esta, aún con la mirada en el suelo, siente que sus mejillas se tiñen de rojo. ¿Qué hace? se pregunta, pero no demora en asentir a lo pedido. Sin embargo, recuerda lo que ha hecho y, en vez de ir en dirección de la cama, se agacha y comienza a guardar todo lo que ha tirado.

Entonces, Osamu, que también se había levantado, se inclina y le toma de la muñeca con suavidad, _____ alza la mirada al unísono en el que sobresalta por la sorpresa.

─No te preocupes por eso, recuéstate por favor─ Le pide, ella le observa en silencio por unos segundos, se levanta nuevamente con cuidado, el abrigo de Dazai, ante la estatura de la chica y que este se encuentre colgado en sus hombros, roza el suelo. ____ acomoda las almohadas luego de sentarse sobre la cama, y mueve las mantas para ocultar sus piernas debajo. Mira al joven con curiosidad, le analiza con la mirada. El contorno de su cuerpo. Entrelaza sus manos y juega nerviosa con sus dedos, sus ojos se detienen en los nudillos marcados del varón, observa su cintura, sus hombros anchos. El joven siente una mirada sobre él, ya no hay más cosas tiradas en el suelo, guarda la última y da media vuelta hacia la chica, se sorprende por un instante al encontrarla paseando su mirada curiosa por una que otra parte de su cuerpo, pero tampoco tarda en sonreír con cierto orgullo.

×💫×🔥×💫×

¡Lamento la tardanza!, estuve investigando un par de cosas relacionadas a las drogas para poder darle algo más de realismo al libro. Repito algo que mencioné en el apartado E&S ¡esta historia tiene contenido delicado!⚠️

¿Alguna parte favorita hasta el momento?.

INESTABLE [Dazai y tú] (completa/editando) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora